
El portavoz del FBI Richard Kolko indicó que el personal de la oficina actuó a petición de la SEC, el organismo regulador de la seguridad en el mercado de valores estadounidense, y que Stanford, que ha permanecido en paradero desconocido en los últimos días, no ha sido arrestado.
Kolko dijo desconocer si Stanford ha entregado su pasaporte a las autoridades. Stanford recibió la demanda interpuesta por la SEC de manos de los agentes de la oficina del FBI en Richmond, Virginia, precisó. "Los agentes entregaron a Stanford las órdenes judiciales relacionadas con la demanda civil de la SEC contra el Stanford Financial Group", dijo.
Stanford y tres de sus empresas han sido acusadas de fraude en una demanda civil presentada en el tribunal federal de Dallas, en Texas. Stanford y otros dos empresarios están acusados de llevar a cabo la venta fraudulenta valorada en 8.000 millones de dólares (unos 6.300 millones de euros) de títulos a plazo fijo conocidos como certificados de depósito con un alto rendimiento, en un esquema que extendió por todo el mundo.
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