BRUSELAS.-   La Comisión Europea ha pedido este lunes al 
Gobierno portugués que presente "rápidamente" las medidas alternativas 
para cumplir los objetivos de reducción de déficit pactados con la UE, y
 ha aclarado que deberán tener el mismo impacto presupuestario que los 
ajustes de 2013 anulados por el Tribunal Constitucional luso.
   El Ejecutivo comunitario ha avisado además de que el cumplimiento 
del déficit es una "precondición" tanto para el pago a Lisboa del 
próximo tramo de 2.000 millones de euros, previsto para mayo, como para 
el alargamiento de los plazos de devolución de la ayuda.
   Estas cuestiones, ha confirmado Bruselas, se discutirán en la 
reunión informal de ministros de Economía de la UE que se celebra el 
viernes en Dublín.
   "Ahora corresponde al Gobierno portugués decidir y presentar las 
medidas que pretende tomar para adaptar el presupuesto de 2013 de forma 
que respete los objetivos fiscales", ha dicho el portavoz de Asuntos 
Económicos, Simon O'Connor. "Confiamos en que esto suceda rápidamente", 
ha agregado.
   La troika -formada por la Comisión, el Banco Central Europeo (BCE)
 y el Fondo Monetario Internacional (FMI)- "deberá examinar las medidas 
que presente el Gobierno portugués", ha señalado O'Connor, "pero está 
claro que tendrán que respetar los objetivos presupuestarios".
   El primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, anunció este 
domingo nuevos ajustes en materia de educación, sanidad y seguridad 
social para cumplir las exigencias de la troika y descartó nuevas 
subidas de impuestos.
   El Ejecutivo comunitario respalda dar más tiempo a Lisboa para 
devolver el dinero del rescate, pero "obviamente la precondición para 
esta decisión es la aplicación continuada y en plazo del programa".
   "Sería beneficioso para Portugal en vista de su intención de 
recuperar el acceso al mercado de forma sostenible", ha indicado el 
portavoz, que ha eludido aclarar si la decisión podría tomarse ya en 
Dublín.
   El Ejecutivo comunitario ha negado que el plan de rescate de 
Portugal haya fracasado, aunque ha admitido que el país se enfrenta 
todavía a "retos muy significativos" y que los ciudadanos lusos viven 
una "situación difícil".
   "Portugal ha realizado progresos muy importantes a la hora de 
afrontar los profundos obstáculos al crecimiento que han afectado al 
país durante muchos años", ha dicho O'Connor.

 
 
 
 
 
