BRUSELAS.- El comisario de Comercio y Seguridad Económica, Maros Sefcovic, ha avisado este lunes de que si el presidente de Estados Unidos, Donald Trump,
cumple la amenaza de imponer aranceles generalizados del 30% a las
producciones europeas si fracasan las negociaciones para el 1 de agosto,
ello supondrá en la práctica prohibir el comercio entre la Unión
Europea y Estados Unidos.
"Como saben, la Unión Europea ha abordado estas conversaciones de
buena fe y con plena intensidad a lo largo de todo el proceso. Así que
seamos honestos, la idea de una tasa arancelaria del 30 % es, en la
práctica, prohibitiva para el comercio mutuo", ha argumentado el
comisario en declaraciones a la prensa en Bruselas, a su llegada a una
reunión extraordinaria de ministros de Comercio de la UE.
Sefcovic, que no ha escondido su decepción por el último ultimátum de
la Casa Blanca, ha insistido aún así en que cree posible una "solución
negociada" y ha avanzado que hablará con sus contrapartes
estadounidenses esta misma tarde, tras la reunión con los Veintisiete.
"La incertidumbre actual provocada por los aranceles injustificados
no puede persistir indefinidamente y, por lo tanto, debemos prepararnos
para todos los resultados", ha argumentado el comisario, que habla por
voz de los 27 en materia de política comercial.
Así, ha continuado, la UE debe seguir trabajando para tener a punto
"si es necesario" contramedidas "proporcionadas" y bien calibradas para
restaurar el equilibrio en nuestra relación transatlántica.
El Ejecutivo comunitario anunció el domingo la decisión de retrasar
aún más la entrada en vigor de la primera ronda de represalias sobre
21.000 millones de euros de compras a Estados Unidos que la UE diseño en
abril para responder a los primeros recargos americanos sobre el acero y
el aluminio, pero que estaban suspendidas hasta este lunes para dar
espacio a la negociación.
Bruselas dijo que prorrogará la suspensión hasta el 1 de agosto,
nuevo plazo dado por Trump, quien ha amenazado con imponer aranceles
generalizados del 30% sobre las importaciones europeas a partir de esa
fecha.
El comisario y negociador con Washington, además, presenta este mismo
lunes a los Estados miembro la lista definitiva para una segunda ronda
contramedidas que, inicialmente, estaba pensada para afectar a cerca de
95.000 millones de euros de importaciones estadounidenses pero que, tras
las negociaciones con los capitales, se ha visto significativamente
recortada.
El ministro español de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo,
ha abogado este lunes a su llegada a una reunión de los 27 en Bruselas
por "empujar" para llegar a un acuerdo que resuelva la guerra
arancelaria lanzada por Estados Unidos, si bien ha pedido "no ser
ingenuos" y acordar la segunda ronda de contramedidas para tenerla a
punto en caso de que fracasen las negociaciones en el nuevo plazo dado
por Trump, del 1 de agosto.
Además, Cuerpo ha apuntado la necesidad de "seguir avanzando" también
en "ampliar" la red de socios comerciales "estratégicos" y ha puesto
como ejemplo el "preacuerdo" anunciado el domingo entre la Unión Europea
e Indonesia para cerrar un acuerdo de libre comercio de aquí a
septiembre.
También ha apuntado la necesidad de "ser capaces de ratificar" el
acuerdo con Mercosur "antes del final de año", cuyas negociaciones
concluyeron en diciembre del pasado año pero no ha llegado a avanzar en
su aprobación, a la espera desde entonces de que Bruselas presente la
propuesta legal que permita iniciar el proceso de ratificación por el
Consejo --en donde choca con reservas de Francia o Polonia-- y la
Eurocámara.
El ministro de Comercio Exterior francés, Laurent Saint-Martin,
también ha expresado el apoyo sin fisuras a Bruselas, pero ha avisado
de que la "relación de fuerza" que ha elegido Trump con la amenaza de
nuevos aranceles debe llevar a la Unión Europea a concretar su capacidad
de represalia.
Por ello, ha opinado, los 27 deben dejar claro este mismo lunes
cuáles son las "represalias" que "de manera muy concreta" y de forma
"muy rápida" podrán activar desde el 1 de agosto si fracasan las
conversaciones.
"Quiero que no haya ningún tabú en la capacidad de respuesta de la
Unión Europea y asumir que, aunque no sea el final deseado, demostrar
que somos capaces de responder", ha defendido el ministro galo, quien se
ha referido tanto a aranceles equivalentes como a otras posibles
medidas como el instrumento anticoerción para responder a presiones
extranjeras.
El ministro danés de Asuntos Exteriores, Lars Lokke Rasmussen,
por su parte, ha insistido en que cree que aún hay opciones de acuerdo y
que se debe seguir intentando el diálogo para llegar a un pacto "justo"
y "equilibrado", sin descuidar por ello la preparación de contramedidas
a la altura del pulso.
"Si quieres la paz debes de estar preparado para la guerra, y creo
que es ahí en donde estamos", ha indicado Rasmussen, quien sin embargo
ha considerado que las contramedidas "no deben imponerse en esta fase",
pero que el bloque debe estar "preparado para usar todos los
instrumentos" disponibles.
El danés, que este semestre ejerce la presidencia de turno del
Consejo de la UE, ha dicho que convocó esta reunión para recibir
información actualizada de la situación de parte de Sefcovic y ha
apelado a la unidad de los 27 para avanzar y definir la segunda ronda de
contramedidas.
Además, Rasmussen ha advertido de que Estados Unidos es un socio
importante que participa en cerca del 13% del comercio global, pero ello
supone que "hay aún un 87%" fuera del mercado estadounidense dispuesto a
tender lazos con la Unión. En este contexto, el ministro se ha referido
al acuerdo con Mercosur y afirmado que su objetivo es que pueda ser
ratificado durante el semestre en que Dinamarca ejerce la presidencia
rotatoria.