NUEVA YORK.- La Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo
(UNCTAD) ha alertado de que la economía en los territorios palestinos
ocupados se enfrenta a un "declive sin precedentes" debido en gran parte
a las ofensivas del Ejército de Israel, iniciados tras los ataques del
Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) del 7 de octubre.
El
organismo de Naciones Unidas ha publicado este jueves un informe en el
que "revela una devastación económica y el declive sin precedentes" en
los territorios palestinos, "mucho mayor" que en otros recientes
contextos de guerra como en 2008, 2012, 2014 o 2021. La inflación, el
desempleo y la falta de ingresos "han emprobrecido gravemente" a la
población.
"El impacto combinado de la operación militar en
Gaza y sus repercusiones en Cisjordania ha causado un choque sin
precedentes que ha afectado a la economía palestina en todo el
territorio ocupado, incluida Jerusalén Este", reza el informe de la
UNCTAD en sus conclusiones.
En lo que respecta a la Franja de Gaza, y según las cifras
registradas a comienzos de año, entre el 80 y el 96 por ciento de los
"activos agrícolas" --como sistemas de riego, granjas de ganado,
huertos, maquinaria e instalaciones de almacenamiento-- han sido
destruidos.
Esto ha provocado la paralización de la producción de alimentos en la
región y ha profundizado los ya de por sí elevados niveles de
inseguridad alimentaria. Por otro lado, más del 80 por ciento de las
empresas privadas, pieza clave en la economía gazatí, según la UNCTAD,
también han resultado dañadas o destruidas.
Con este caldo de
cultivo, el Producto Interior Bruto (PIB) de la Franja de Gaza se ha
desplomado en más de un 80 por ciento tan solo en el último trimestre de
2023, desembocando en una contracción anual del 22 por ciento. A
mediados de 2024 la economía gazatí ya se había reducido en menos de una
sexta parte en comparación a 2022.
Aunque los ataques israelíes se centran en la Franja de Gaza, el
territorio de Cisjordania también ha registrado un "rápido y alarmante
declive económico" debido a la expansión de los asentamientos, la
confiscación de tierras, la demolición de estructuras y el aumento de la
violencia por parte de los colonos.
Uno de los principales
exponentes de esta regresión económica se plasma en el turismo, el
comercio y el transporte, sectores claves para Cisjordnia, que en los
últimos tiempos "han sufrido una fuerte caída". En torno al 80 por
ciento de las empresas de la Ciudad Vieja de Jerusalén Este han cesado
parcial o totalmente sus actividades.
Mientras que en los
primeros tres trimestres de 2023 las estimaciones apuntaban a una subida
del cuatro por ciento del PIB en Cisjordania, el estallido de las
hostilidades por los ataques de Hamás ha derivado en una contracción
"sin precedentes" del 19 por ciento en la última etapa de aquel año.
En lo que respecta al desempleo, Cisjordania ha visto como el número
de parados ha aumentado en casi un 20 por ciento, pasando del 12,9 por
ciento en el tercer trimestre de 2023, a un 32 por ciento en la
actualidad. La UNCTAD señala que "se han perdido 306.000 empleos", lo
que desemboca en pérdidas de más de 23 millones de euros diarios en los
ingresos laborales de los hogares.
En la Franja de Gaza los
datos apuntan a una pérdida de dos tercios de los empleos previos al
estallido de la guerra en enero de 2024, lo que no hace más que
profundizar la ya de por sí grave crisis económica y humanitaria en el
enclave palestino.
Así las cosas, la UNCTAD ha abundado en que
"la ocupación prolongada sigue siendo el mayor obstáculo para un
desarrollo económico sostenible", y que las restricciones a la
inversión, movilidad laboral y el comercio "han socavado sistemática el
potencial económico" de los territorios palestinos.
"El informe
hace eco del llamado del secretario general de la ONU (Antonio
Guterres) a tomar medias urgentes para apoyar y fortalecer las
instituciones palestinas, destacando la necesidad de intensificar los
esfuerzos de consolidación de la paz", ha remachado la UNCTAD en su
informe.
Como "camino a seguir" para darle la vuelta a esta
situación, el organismo de Naciones Unidas insta a considerar un plan
integral de recuperación, el aumento de la ayuda y el apoyo
internacional, así como la liberación de los ingresos retenidos y el fin
del bloqueo seobre la Franja de Gaza.