MADRID.-  Los ministros de Finanzas de la zona euro aprobaron el viernes un 
acuerdo para conceder un préstamo por hasta 100.000 millones de euros a 
España para que recapitalice a sus bancos, aunque el importe exacto del 
mismo probablemente no se fijará hasta septiembre.
    
En una conferencia telefónica, los ministros sellaron un extenso 
memorando de entendimiento con España que explica las condiciones de la 
asistencia financiera, la cual será completamente desembolsada para 
fines del 2013.
Pero antes de que España decida exactamente cuánto dinero 
necesita, primero debe revisar los resultados de unas exhaustivas 
auditorías a su sector bancario, que está gravemente afectado por 
préstamos incobrables.
En una rueda de prensa tras la teleconferencia, el ministro de 
Finanzas de Luxemburgo, Luc Frieden, anunció que los responsables de 
economía de la zona euro habían dado luz verde a la ayuda.
"Hemos formalizado lo que discutimos en los reuniones pasadas el 
Eurogrupo. Hemos aprobado formalmente el memorando que detalla las 
condiciones bajo las cuales España recibirá dinero para la 
recapitalización de sus bancos", declaró Frieden a periodistas.
"La aprobación de todos los 17 ministros ya está y eso significa 
que el programa puede continuar. El dinero no fluirá de inmediato debido
 a que se están llevando a cabo trabajos de análisis de bancos 
específicos", expresó.
El rescate bancario, junto con las nuevas medidas de austeridad y
 medidas fiscales más flexibles acordadas con Madrid, busca evitar un 
rescate soberano que la zona euro apenas podría permitirse.
Sin embargo, existen señales de creciente descontento con el plan
 económico entre la opinión pública española. Cientos de miles de 
personas protestaron el jueves contra las últimas medidas de austeridad 
del Gobierno de centroderecha, luego de más de una semana de 
manifestaciones vistas por todo el país.
El Parlamento español aprobó un paquete con recortes de gastos y 
alzas de impuestos por 65.000 millones de euros que posiblemente 
agudizarán la recesión en la que está sumergida España.
La prima de riesgo española, que mide el diferencial entre las 
rentabilidades de la deuda pública española y la alemana, marcó a 
mediodía del viernes un nuevo máximo desde el lanzamiento del euro por 
las preocupaciones que generan los desequilibrios de la economía 
doméstica.
A las 14:30 horas local, el diferencial del bono de referencia 
español a 10 años frente a su equivalente alemán marcaba 604 puntos 
básicos apenas dos horas después de haber tocado su máximo intradiario 
desde la entrada del euro en 591 puntos.
En virtud del memorando de entendimiento (MoU, según sus siglas 
en inglés), 14 grupos financieros que componen cerca del 90 por ciento 
del sistema bancario español serán sometidos a pruebas para ver sus 
necesidades de capitalización en una revisión que será completada para 
la segunda quincena de septiembre.
Madrid espera 30.000 millones de euros en el primer tramo de 
ayuda que estará disponible de inmediato para los bancos rescatados por 
el Estado que necesitan fondos con urgencia.
Una auditoría independiente de las firmas consultoras Oliver 
Wyman y Roland Berger, publicada el 21 de junio, mostró que el sector 
bancario necesitaría hasta 62.000 millones de euros en total.
Pero un segundo estudio más detallado, además de nuevas pruebas 
de tensión, ayudarán a determinar con precisión cuánto necesita cada 
banco y en qué forma: créditos o efectivo.
Los tres mayores prestamistas de España - Banco Santander, BBVA y
 Caixabank - no requerirían capital adicional bajo un escenario de mayor
 presión, dijo la auditoria de España.