MADRID.- El expresidente español Felipe González considera que debería realizarse una
verificación del resultado electoral en Venezuela mediante una
organización internacional independiente y advierte que debe de hacerse
"pronto" porque, según sostiene, el Gobierno de Nicolás Maduro trata de
alterar el sistema "acta a acta" mediante un grupo chino.
El exdirigente socialista español dice que
le consta que la oposición está dispuesta a negociar la transición con
el chavismo porque, asegura, buscan la "reconciliación" y no ajustar
cuentas e incluso accederían a "olvidar algunas cosas". Por tanto, no
pondrían como condición la salida del país de Maduro y otros dirigentes
si se lleva a cabo esta constatación de los resultados.
Además,
González reprocha la actitud del también expresidente socialista español José
Luis Rodríguez Zapatero, que estuvo presente en las elecciones del
pasado 28 de julio como observador internacional y le acusa de ser el
único integrante del Grupo de Puebla que acudió a Venezuela y no exige
la revisión de las actas.
El Consejo Nacional Electoral, fiel a Maduro, sostiene que este
obtuvo 6,4 millones de votos mientras el opositor Edmundo González
Urrutia logró 5,3 millones. Por el contrario, la oposición defiende que,
según las actas que logró recopilar, González fue el vencedor con 6,2
millones de votos frente a 2,7 millones para Maduro.
"Yo solo quiero advertir que el contraste tiene que hacerse por una
organización independiente, no dependiente del Estado, de Maduro ni del
Gobierno, y que lo haga pronto, porque me temo que están contratando, si
no lo han contratado ya, a un grupo especializado en meterse en el
sistema y alterar acta por acta, un grupo especializado que viene del
lejano Oriente", ha alertado Felipe González.
Advierte así de
que hay "unos especialistas chinos" que "parece que están trabajando en
la alteración del sistema", aunque para llevarlo a cabo "necesitan
tiempo", señala, y por eso el Consejo Nacional Electoral trata de
retrasar al máximo la publicación de las actas, tal como está pidiendo
buena parte de la comunidad internacional.
En todo caso insiste
en que el contraste entre el resultado del voto electrónico y las actas
que se derivan de ese voto "debería ser el resultado aceptable por
todos" y para que así sea tiene que haber un organismo internacional
"independiente" que revise el proceso y "constate exactamente lo que ha
pasado".
Ese organismo, añade, no puede ser ni el Tribunal Supremo ni el
Consejo Nacional Electoral porque están "cooptados" por Maduro. Debe
ser "supranacional" y lo deben elegir las partes, apunta.
González propone esta vía para "evitar lo peor" y para hacer respetar
la voluntad de los ciudadanos aunque piensa que el candidato de la
oposición Edmundo González ganó a Maduro "por mucho" a pesar de las
"truculencias" llevadas a cabo por el Estado, pues "han hecho lo que han
querido con los censos" y han dificultado votar a la mayoría de
residentes en el exterior, según apunta.
Considera que es
"abrumadora" la demanda popular de recuperación de la libertad y de
respeto a la Constitución y considera que Maduro ha perdido el apoyo de
los venezolanos porque la riqueza del país se ha reducido en un 80%
desde que es presidente. Una "absoluta ineficiencia" en la gestión y una
"ruina" del país que provoca que a día de hoy se pague un salario
mínimo de "un dólar al día".
González, que tiene línea directa
con los líderes opositores, traslada que están dispuestos a negociar
con el chavismo la transición hasta la toma de posesión del próximo
presidente, que será en enero de 2025.
"No con el afán de penalizar,
sino lo contrario, de llegar a una reconciliación", señala, para que el
que ha ganado gobierne y el que ha perdido pase a la oposición y se
prepare para ganar las próximas elecciones.
"Hay una propuesta de
reconciliación, no de ajuste de cuentas por parte de la oposición",
reitera.
No obstante, advierte de que debe terminar la
persecución contra la líder María Corina Machado --que fue inhabilitada
por el chavismo y a la que quieren "condenar a muerte civil"-- contra el
candidato Edmundo González y los más de 1.200 "desaparecidos" tras las
elecciones. Por tanto, señala, las dos partes deben poder elegir los
miembros de sus equipos para pilotar este proceso de transición.
Además, lanza un mensaje a la comunidad internacional para que pidan
al dirigente venezolano que "cese la persecución" y también le exijan
que verifique los resultados con un organismo independiente.
Apunta en
especial a los líderes de la izquierda iberoamericana, los presidentes
de Brasil, Colombia y México, Lula da Silva, Gustavo Petro y Andrés
Manuel López Obrador, respectivamente, para que "cesen las muertes y la
persecución política que ha iniciado el régimen".
Pide lo mismo
a Gobierno de Pedro Sánchez y a la Unión Europea y considera que esto
es más importante incluso que reconocer a González como presidente, como
ha hecho Estados Unidos y varios países latinoamericanos. "Lo que me
importa es que exijan que se contrasten los resultados electorales, ese
es el punto mínimo, no quiero ir más lejos", señala.
Felipe
González también ha lanzado un dardo a Zapatero por su silencio tras las
elecciones y ha remarcado que otros dirigentes, también vinculados al
Grupo de Puebla como el expresidente de República Dominicana Leonel
Fernández, han exigido la publicación de las actas, pero el expresidente
español no lo ha hecho.
No obstante afirma que no tiene
intención de confrontar con su compañero de partido y lo que le interesa
es el pueblo venezolano y la recuperación de las libertades respetando
la Constitución, aunque lanza una advertencia: "Los demás que asuman su
responsabilidad" por acudir como observador a unas elecciones cuyo
resultado y garantías pone en duda.
En este sentido afea que "solo se haya aceptado a Bildu como
organización política española para estar presente" en el proceso electoral
venezolano. "Repito, Bildu, que le dará la razón a Maduro la tenga o no
la tenga, de eso no me cabe duda", reprocha.
González dice que
Zapatero presume de conocer "mejor que nadie" lo que pasa en Venezuela y
le pide que "por favor lo mantenga dentro de un año de dos o de tres" y
que después no diga "yo de esto no sabía nada", advierte.
A
renglón seguido señala que Maduro tiene ahora una "oportunidad" de
entrar en una vida democrática respetuosa con la Constitución de su país
pero si no lo hace, apunta, hay otro camino "que conduce a La Haya", en
referencia a una posible denuncia contra el líder chavista por
violación de derechos humanos.
"No estoy proponiéndolo ni deseándolo, lo que digo es que hay un
camino de reconciliación nacional aceptando la verdad de los resultados y
verificándola con gente independiente y hay otro camino que es una
denuncia, que cada día se consolida más, de delitos de violación de
derechos humanos y de lesa humanidad", afirma.
Finalmente,
señala que la situación en Venezuela también podría perpetuarse y Maduro
seguir el camino del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega y su mujer,
Rosario Murillo, y además de quitar los derechos constitucionales a los
ciudadanos, retirarles también la nacionalidad y convertir en
"apátridas" a los que salen del país.