ROMA.- El primer ministro italiano, Mario Monti, negó hoy que exista un "pacto secreto" con la canciller alemana, Ángela Merkel, sino más bien una amplia colaboración entre sus Ejecutivos a la que se comprometieron durante la visita a Roma de la jefa del Gobierno de Alemania el pasado marzo.
En una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros italiano 
celebrado este lunes en Roma, en el que su Ejecutivo dispuso un ahorro 
adicional para este año de 4.200 millones de euros en gasto público, 
Monti se refirió a la necesidad del crecimiento económico en Italia y en
 el resto de Europa.
"No creo que se pueda hablar de un pacto secreto ítalo-alemán, sino 
de una fuerte iniciativa de colaboración ítalo-alemana", dijo el jefe 
del Gobierno italiano en una comparecencia retransmitida en directo por 
televisión.
Con estas palabras, Monti respondía a una pregunta sobre la 
información de hoy del diario italiano "La Repubblica", que aseguraba 
que existe un plan "secreto" entre Roma y Berlín para aprobar de forma 
simultánea en sus respectivos parlamentos el pacto fiscal europeo y el 
fondo de rescate permanente (MEDE).
El primer ministro italiano abordó además la cada vez mayor exigencia
 en el seno de la Unión Europea (UE) hacia el Ejecutivo alemán de la 
necesidad de la aprobación de medidas que propicien el crecimiento 
económico, una exhortación que, según algunos partidos italianos, aún es
 un tanto débil.
"Es pueril, aunque frecuente, decir que el Gobierno no da un puñetazo
 sobre la mesa para lograr una política de crecimiento en la UE, pero ya
 hemos visto en el pasado la escasa eficacia de políticas más 
declamatorias", dijo Monti.
"Nosotros pensamos que la mejor estrategia es la de hacer esas cosas 
en el propio país que se consideran necesarias para la salud financiera 
del país, que habitualmente coinciden con las exigencias de la UE", 
agregó.
En este sentido, el jefe del Gobierno tecnócrata italiano indicó que 
son esenciales para el crecimiento medidas como la dispuesta hoy para 
conseguir de junio a diciembre ahorrar 4.200 millones de euros en el 
gasto de la administración pública, que será supervisado por un 
comisario extraordinario, Enrico Bondi.
"Nosotros pensamos que esta cosa que es iniciada hoy es esencial para
 el crecimiento, porque no va destinada tanto a reducir la cantidad y 
calidad de los servicios públicos que se ofrecen a los ciudadanos 
italianos, sino a recortar los derroches, duplicidades, ineficacia y 
abusos", indicó.
Monti aseguró que fue equivocado que el Gobierno anterior suprimiera 
el impuesto sobre bienes inmuebles que ahora ellos han tenido que 
reintroducir y lamentó que su Ejecutivo, que llegó al poder en noviembre
 hasta la celebración de elecciones en 2013, no vaya a tener tiempo para
 poder bajar los impuestos a los italianos.
En la misma comparecencia de prensa, el primer ministro indicó que, a
 pesar de que finalmente consigan esos 4.200 millones de ahorro en 2012 
en gasto público, aún no queda descartado el hecho de que vaya a ser 
necesario subir el IVA dos puntos (hasta el 23 y el 12 % en los tramos 
más altos), como preveía para el próximo octubre su plan de ajuste de 
diciembre.

 
 
 
 

 
 
