WASHINGTON.- El Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) ha decidido este miércoles mantener los tipos de interés en el rango objetivo del 4,25% al 4,50%.
Esta pausa se sucede a las ya decretadas el pasado enero y marzo, así como a las tres bajadas consecutivas iniciadas en septiembre, cuando se recortó el precio del dinero por primera vez desde marzo de 2020.
"Aunque las oscilaciones de las exportaciones netas han afectado a los datos, los indicadores recientes sugieren que la actividad económica ha seguido creciendo a un ritmo sólido. La tasa de desempleo se ha estabilizado en un nivel bajo en los últimos meses y las condiciones del mercado laboral siguen siendo sólidas. La inflación sigue siendo algo elevada", ha resumido la Fed.
En su comunicado, la entidad ha subrayado que la incertidumbre sobre las perspectivas económicas "se ha incrementado aún más", por lo que el órgano rector del banco central continuará "pendiente" de los riesgos que pesan sobre el empleo y sobre la inflación.
El FOMC ha indicado que, a la hora de modificar la tasa de referencia, estará atento a la afectación de los datos entrantes sobre el entorno macroeconómico. Esta vez ya no hace mención al balance de riesgos para su mandato dual, puesto que ambos están al alza.
El instituto emisor ha asegurado que está "preparado" para ajustar los tipos de ser necesario, para lo que se analizarán las lecturas del mercado laboral, de inflación y sus expectativas de evolución futura, así como los efectos derivados de acontecimientos internacionales y financieros.
Por otro lado, la Fed ha mantenido sin cambios los planes de reducción del balance, reinvirtiendo los principales de la deuda que venza, a excepción de 40.000 millones de dólares (35.233 millones de euros) mensuales, entre bonos del Tesoro y titulizaciones hipotecarias.
La economía de la primera potencia mundial experimentó un decrecimiento anualizado del 0,3% en el PIB del primer trimestre de 2025 frente al avance del 2,4% de los tres meses previos. En cuanto al mercado laboral estadounidense, se crearon 177.000 empleos no agrícolas durante abril. A su vez, el paro se mantuvo en el 4,2%.
El índice de precios de gasto de consumo personal, la estadística preferida por la Fed para monitorizar la inflación, se situó en marzo en el 2,3%, dos décimas menos. La tasa mensual registró un estancamiento, esto es cuatro décimas menos. La variable subyacente cerró en el 2,6% interanual, dos décimas menos.
Powell subrayó este miércoles su independencia frente a las presiones del mandatario, Donald Trump, para que la institución baje los tipos, a la vez que destacó que esa insistencia no afecta a su trabajo y que lo prudente es esperar a ver cómo evoluciona la situación económica.
"Vamos a seguir haciendo lo mismo: usar nuestras herramientas para fomentar el máximo empleo y la estabilidad de precios en beneficio del pueblo estadounidense", dijo el presidente del banco central estadounidense en una conferencia de prensa.
Subrayó que la Fed considerará "solo los datos económicos, las perspectivas, el balance de riesgos, y eso es todo. Por lo tanto, no afecta ni a nuestro trabajo ni a nuestra forma de hacerlo".
Powell aseguró este miércoles su independencia frente a las presiones del mandatario, Donald Trump, para que baje los tipos, y destacó que esa insistencia no afecta a su trabajo y que lo prudente es esperar a ver cómo evoluciona la situación económica.
"Vamos a seguir haciendo lo mismo: usar nuestras herramientas para fomentar el máximo empleo y la estabilidad de precios en beneficio del pueblo estadounidense. Consideraremos solo los datos económicos, las perspectivas, el balance de riesgos, y eso es todo. Por lo tanto, no afecta ni a nuestro trabajo ni a nuestra forma de hacerlo", dijo en una rueda de prensa.
Su intervención tuvo lugar después de que, al término de una reunión de dos días, el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) del Banco Central decidiera dejar los tipos en su rango actual del 4,25 y 4,5 %.
El comunicado de ese organismo sí apuntó a que se han incrementado los riesgos de una mayor inflación y desempleo en el país y también la incertidumbre sobre las perspectivas económicas.
Powell destacó, no obstante, que la economía en sí misma sigue en una posición "sólida".
"Así que pensamos que podemos esperar y actuar cuando esté claro qué es adecuado hacer. (...) Ahora mismo no hay una razón para tomar una decisión y no hay motivo real para hacerlo", añadió ante los medios.
Aunque Powell admitió que la incertidumbre es "extremadamente elevada" debido a la guerra arancelaria emprendida por la Administración republicana, reiteró su opinión de que no hay que tener prisa para bajar los tipos.