El primer ministro del país, Ulf Kristersson, ha indicado en una rueda de prensa junto al ministro de Desarrollo, Johan Forssell, que el paquete de medidas incluye 900 millones de coronas (cerca de 80 millones de euros) destinados al Fondo para la Reconstrucción de Ucrania del Banco Mundial, que se encarga de apoyar la infraestructura central del país en materia energética, sanitaria, de vivienda y de transporte.
Asimismo, se entregará equipamiento para una mejora de la calefacción y la red eléctrica de las viviendas con el objetivo de que "los civiles sobrevivan al invierno" debido a las bajas temperaturas.
Además, el Gobierno entregará 300 millones de coronas (26,7 millones de euros) para el Fondo de Medio Ambiente y Energía del Banco Europeo de Desarrollo para Ucrania, mientras que otras 100 coronas (8 millones de euros) se destinarán al Programa Mundial de Alimentos. El resto de ayudas se entregarán a la UNESCO para la construcción de refugios y escuelas y a la Agencia para la Protección y Preparación Comunitaria.
Además, ha reiterado la importancia de que la ayuda a Ucrania procedente de la Unión Europea y Estados Unidos "no decaiga".
"Es extremadamente preocupante que se cuestione el apoyo a largo plazo", ha dicho Kristersson antes de alertar de que el país podría entrar en un "limbo económico" si la UE no llega a un acuerdo sobre el presupuesto que incluya la ayuda a Ucrania.
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