Qatar reconoce ante las familias de los rehenes que la muerte de Al Aruri ha complicado la negociación

DOHA.- El primer ministro de Qatar, Mohamed bin Abdulraman al Zani, ha reconocido en un encuentro mantenido en Doha con las familias de los rehenes israelíes en manos de las milicias palestinas que las negociaciones para su liberación se han complicado bastante a raíz de la muerte esta semana en Beirut (Líbano) del número dos del ala política de Hamás, Salé al Aruri, en un ataque atribuido a Israel, según fuentes del portal estadounidense Axios muy próximas al encuentro.

"El primer ministro les ha explicado que, después de lo que ocurrió con Al Aruri, se ha vuelto más difícil hablar con Hamás", según ha explicado al portal Axios un alto cargo qatarí que describió las conversaciones con el movimiento islamista, en las que Qatar actúa como uno de los principales mediadores internacionales, como "muy complejas".

Las familias también se reunieron con el considerado como negociador principal de Qatar en las conversaciones para liberar a los rehenes, Abdulaziz Al Julaifi, el "arquitecto" de las liberaciones previas efectuadas durante el conflicto, quien describió no obstante un sombrío panorama desde lo ocurrido en Beirut.

"Estamos empleando todos los canales posibles, estamos colaborando con nuestros homólogos de Estados Unidos e Israel", apunta la fuente qatarí, "pero nosotros solo somos mediadores y no ejercemos ningún tipo de control sobre Hamás".

La misma fuente lamenta además que "cada vez es más difícil mantener abiertos los canales de comunicación" con el movimiento islamista, "dado que los bombardeos de Israel sobre Gaza están aumentando cada vez más en intensidad, lo que complica, y mucho, las negociaciones para liberar a los rehenes".

Qatar, en cualquier caso "es dolorosamente consciente del sufrimiento de los rehenes restantes y de sus seres queridos" y se ha comprometido ante las familias "a seguir ejerciendo su labor de mediación el tiempo que sea necesario".

Israel ha estado librando una guerra contra Hamás en la Franja de Gaza desde que terroristas islamistas atacaron al Estado judío el 7 de octubre, matando a más de 1.200 personas y tomando casi 200 rehenes. Un total de 105 rehenes fueron liberados a finales de noviembre como parte de un acuerdo entre el gobierno israelí y Hamás y a cambio, Israel liberó a 240 prisioneros palestinos de las cárceles israelíes.

Después de recibir una enorme simpatía mundial tras los acontecimientos del 7 de octubre, Israel se encuentra ahora bajo una fuerte presión internacional debido a los numerosos civiles muertos en la guerra y la destrucción masiva de la Franja de Gaza. Según la autoridad sanitaria controlada por Hamás en la franja costera, más de 22.400 personas han muerto y más de 57.600 han resultado heridas.