PARÍS.- Las muertes provocadas
por el nuevo coronavirus se dispararon en Europa y Estados Unidos el
domingo a pesar de los confinamientos masivos, en un escenario
generalizado de hospitales saturados que forzó a Alemania a prohibir
reuniones de más de dos personas.
Alemania y Grecia se
convirtieron en los últimos países europeos en adoptar restricciones al
movimiento de sus habitantes, mientras el virus mantiene casi mil
millones de personas confinadas en sus casas e intensificó los temores
de una recesión mundial.
En Estados Unidos el presidente Donald Trump ordenó el
montaje de estaciones médicas de emergencia para áreas críticas y los
hospitales buscan abastecerse de respiradores mecánicos, mientras en el
Congreso una propuesta de un billón de dólares para rescatar la
tambaleante economía se hundió sin pena ni gloria.
Al ser
consultado sobre cuando la economía estadounidense podría estabilizarse,
Trump respondió con una admisión brutal: "No podría decirlo".
Por
su parte, el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, advirtió que
Estados Unidos se encaminaba hacia su mayor crisis desde la Gran
Depresión de la década de 1930.
El proyecto de ley propuesto por
los legisladores republicanos destinaba hasta 2 billones de dólares a
familias, empresas y hospitales estadounidenses, aunque no se aprobó ya
que fue rechazado por los demócratas por considerarlo insuficiente.
En
Estados Unidos, donde las muertes superaron las 400 y los casos ya son
más de 33.000, más de un tercio de los habitantes se encuentran bajo
varias fases de confinamiento, incluyendo las tres mayores ciudades del
país: Nueva York, Chicago y Los Ángeles.
El alcalde de Blasio dijo que Nueva York estaba a 10 días de quedarse sin respiradores mecánicos.
En
Nueva York, el gobernador Andrew Cuomo reaccionó con evidente
irritación ante las numerosas personas que salieron a las calles y
parques a disfrutar del primer fin de semana de la primavera boreal.
"No
sé que parte es la que no entienden. Es insensible, es arrogante, es
autodestructivo, es irrespetuoso con otras personas y esto tiene que
parar. Esto no es una broma", declaró.
El número de muertos por el
virus, que ha cambiado transformado vidas y cerrado negocios y escuelas
en todo el planeta, aumentó a más de 14.300 el domingo, según un
recuento.
El epicentro está ahora firmemente en Europa después de salir de China, donde la enfermedad surgió a fines del año pasado.
"Estoy
un poco molesto con China. Seré honesto contigo ...", dijo Trump
refiriéndose a la falta de cooperación e información al principio de la
crisis.
El número de víctimas de la pandemia en Italia se acercó a
5.500 cuando el país mediterráneo reportó otras 651 muertes, un día
después de que superó a China por el mayor número de decesos.
Grecia,
por su parte, impuso un confinamiento generalizado y en Alemania la
canciller Angela Merkel se situó comenzó a poner cuarentena en su casa
después de ser tratada por un médico, que después de ello arrojó
resultado positivo virus.
Sin embargo, las medidas de confinamiento en Italia han hecho poco para detener el brote.
En
tanto, en Roma la policía patrullaba las calles desiertas y realizaba
controles en las playas después que los funcionarios locales se quejaron
de que la gente estaba desafiando las órdenes de tomarse un tiempo al
sol.
A su vez, el primer ministro de España, Pedro Sánchez, dijo
que pediría al parlamento que extienda un estado de emergencia de 15
días para prohibir que las personas salgan de sus hogares a menos que
sea absolutamente esencial, hasta el 11 de abril.
El país registró
cerca de 400 nuevas muertes el domingo, elevando el total a 1.720, lo
que sugiere que el bloqueo no estaba siendo efectivo.
En Francia,
donde el número de muertos aumentó a 562, los habitantes permanecieron
encerrados en sus hogares. Se impuso un toque de queda en algunas
regiones y el alcalde de París pidió medidas de confinamiento aún más
drásticas en una ciudad bajo llave.
El Reino Unido, por su lado,
parece avanzar hacia medidas similares ya que el primer ministro, Boris
Johnson, advirtió que el país a dos semanas de registrar números
similares a los de Italia.
A medida que la pandemia
abruma a los hospitales, los médicos de todo el mundo tienen que
priorizar rápidamente a los pacientes en función de sus posibilidades de
supervivencia, lo que inflige una enorme carga moral.
"Entramos
en medicina para curar a las personas. No para tomar decisiones sobre
quién puede vivir", dijo Philippe Devos, un anestesiólogo en Liege,
Bélgica.
Si bien el número de casos en China se ha reducido
drásticamente desde que comenzó la crisis, hay temores en Asia de casos
"importados" de otros puntos críticos como Europa.
Tailandia
informó su mayor aumento diario en los casos, llevando su total a casi
600, mientras que Singapur, Hong Kong y Malasia también informaron un
aumento después de que los números se habían estancado.
Las calles
normalmente ruidosas en Nueva Delhi y Mumbai estaban en su mayor parte
desiertas y muchas tiendas cerraron durante el "toque de queda
autoimpuesto" de un día a nivel nacional en India.
Hasta ahora más o menos contenido, los países latinoamericanos también empiezan a ver crecer la curva de propagación.
En
Brasil, el número de víctimas fatales se elevó a 25, con 1.546 casos
confirmados, y Ecuador registró el domingo 7 muertos, el mayor
crecimiento diario, con lo que el saldo se eleva a 14 muertos y 789
infectados, que se extienden por más de la mitad del país.
Colombia
también anunció su primer muerto por el coronavirus, un taxista de
Cartagena de Indias que había llevado en su taxi a extranjeros.
La
COVID-19 causa estragos también entre el personal sanitario que se
enfrenta a la precariedad de medios y jornadas extenuantes de trabajo,
documentadas por el enfermero y fotógráfo italiano Paolo Miranda, que
trabaja en el hospital de Cremona (norte de Italia), la región más
castigada por la pandemia, con más de 3.000 muertos.
En España,
3.475 médicos, enfermeras y personal sanitario han resultado infectados,
casi un 12% del total. En Italia ya han muerto 18 médicos, en Indonesia
tres, y en Francia uno.
El coronavirus tampoco discrimina entre
clases sociales. El tenor español Plácido Domingo, envuelto en los
últimos tiempos en denuncias de acoso sexual, anunció que dio positivo
al coronavirus, al igual que el canciller de la República Dominicana,
Miguel Vargas, en cuyo país hay 202 infectados y tres muertos.