"Cuatro miembros del equipo de saboteadores relacionados con el régimen sionista, que habían cometido importantes acciones contra la seguridad del país bajo la dirección de agentes del Mossad, han sido ejecutados esta mañana siguiendo procedimientos legales", reza un comunicado.
Los cuatro acusados han sido ejecutados por "el crimen de guerra y corrupción del territorio a través de la cooperación de Inteligencia con el régimen sionista con la intención de perturbar la seguridad de país".
El Tribunal de Apelaciones rechazó los recursos interpuestos por sus equipos legales.
En el caso hay diez condenados que también forman parte de dicha red criminal que habría llevado a cabo sus acciones en distintas ciudades incluida la capital. Estos últimos han sido condenados a diez años de prisión cada uno por el "delito de comunicarse con el régimen sionista con la intención de alterar la seguridad de país".
Según Teherán, los acusados recibían dinero de las autoridades israelíes para identificar a miembros de los distintos departamentos de seguridad del país y pretendían revelar su información mediante secuestros, amenazas y agresiones físicas.
Las informaciones indican que "en algunos casos" llegaron a intentar matar a agentes de seguridad e Inteligencia, "lo que afortunadamente no tuvo éxito".
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