BERLÍN.- Las autoridades de Alemania y Turquía han acordado este jueves retirar de forma gradual a un millar de imanes turcos que se encuentran trabajando en mezquitas alemanas con el objetivo de limitar su presencia en el país.
La ministra del Interior alemana, Nancy Faeser, ha dicho estar "encantada" con el acuerdo tras "unas largas negociaciones".
"Me alegro de que hayamos podido concluir por primera vez un acuerdo que pondrá fin al despliegue de imanes empleados por el Estado y procedentes de Turquía", ha aseverado.
Durante años, estos imanes, que siguen las directrices de la Dirección de Asuntos Religiosos de Turquía (Diyanet), han sido objeto de controversia por seguir instrucciones de Ankara a pesar de estar en suelo alemán. Además, las voces críticas consideran que suelen estar desconectados de la realidad del país.
Los imanes de la Diyanet trabajan principalmente en mezquitas gestionadas por la Unión Turco-Islámica para Asuntos Religiosos (Ditib) y según el Gobierno alemán, decenas de ellos predican además en las congregaciones de la Unión de Asociaciones Culturales Turco-Islámicas en Europa (ATIB) y Milli Görüs, dos organizaciones que aparecen en el último informe anual de la agencia de Inteligencia interior alemana.
Ahora, de acuerdo con el nuevo acuerdo, la Ditib se hará cargo en el transcurso de 2024 de supervisar las actividades de los imanes antes de que estos regresen a Turquía de forma definitiva y gradual. El Gobierno de Alemania tiene previsto fomentar la formación adicional de imanes en territorio alemán. "Queremos que los imanes participen en el diálogo entre religiones y debatan cuestiones de fe en nuestra sociedad", ha explicado Faeser.
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