"El asesinato por parte de Israel de más de 22.000 civiles palestinos, la mayoría de los cuales eran mujeres y niños, en Gaza durante casi tres meses no debe quedar impune de ninguna manera, y los responsables de ello deben rendir cuentas ante el Derecho Internacional", ha señalado el portavoz de Exteriores, Oncu Keceli.
En una publicación en su perfil oficial de la red socia X, Keceli ha señalado que, tras la solicitud presentada por Sudáfrica, "se espera que la CIJ emita una orden provisional" en la que inste a Israel a detener sus ataques contra la Franja de Gaza. "Turquía seguirá la implementación de esta decisión", ha apuntado.
Las autoridades sudafricanas presentaron la semana pasada una solicitud a la CIJ para aplicar medidas provisionales argumentando que Israel "ha participado, está participando y corre el riesgo de seguir cometiendo actos genocidas contra el pueblo palestino en Gaza", y mostró su preocupación "por la difícil situación de los civiles atrapados en los actuales ataques israelíes" en Gaza.
El Gobierno de Sudáfrica considera que Israel está violando sus obligaciones en virtud de la Convención para la Prevención y Sanción del Delito de Genocidio de 1948. Antes de que Turquía oficializara el respaldo a esta solicitud, las autoridades de Malasia ya se manifestaron en los mismos términos en la víspera.
Israel ha rechazado desde el primer momento esta postura de Sudáfrica, y ha anunciado que presentará una apelación ante la CIJ por el "absurdo libelo de sangre" presentado por Pretoria. "Garantizamos a los líderes de Sudáfrica: la historia os juzgará, y lo hará sin piedad", han advertido desde el Ejecutivo israelí.
El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) lanzó a comienzos de octubre una serie de ataques que dejaron unos 1.200 muertos y cerca de 240 secuestrados. El Ejército de Israel respondió con una cruenta contraofensiva contra la Franja de Gaza que se cobra ya más de 22.300 vidas palestinas y más de 57.200 heridos.
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