lunes, 25 de septiembre de 2023

Las empresas europeas en China manifestaron su “preocupación” por las leyes de seguridad impuestas por el régimen


PEKÍN.- Las empresas europeas en China se cuestionan su posición ante las nuevas y estrictas leyes de seguridad y la politización del comercio en el gigante asiático, advirtió el lunes en Beijing el comisario de Comercio de la Unión Europea (UE), Valdis Dombrovskis.

“Las compañías europeas están preocupadas por la dirección que está tomando China”, dijo el funcionario en un discurso en la Universidad Tsinghua de la capital china. “Muchas se están cuestionando su posición en este país”.

Señaló una nueva ley de relaciones exteriores y una reciente actualización de las leyes chinas contra el espionaje como motivos de “gran preocupación” para la comunidad empresarial de la UE.

“Su ambigüedad deja demasiado margen a la interpretación”, advirtió.

“Esto significa que las empresas europeas tienen dificultades para entender sus obligaciones de cumplimiento: un factor que disminuye significativamente la confianza empresarial y disuade de nuevas inversiones en China”, dijo Dombrovskis.

El comisario europeo realiza una visita de varios días a la segunda economía mundial, donde se reunirá con altos funcionarios económicos y defenderá que el bloque no pretende desvincularse económicamente de China.

Su viaje se produce después de que la Cámara de Comercio de la UE publicó la semana pasada un informe que revela que la confianza empresarial se encuentra en uno de los niveles más bajos de los últimos años.

“Durante décadas, las empresas europeas prosperaron en China”, declaró el presidente de la Cámara, Jens Eskelund.

Pero, después de tres años “turbulentos”, dijo, “muchas han reevaluado sus hipótesis básicas sobre el mercado chino”.

Además, la visita de Dombrovskis se produce en un contexto de crecientes tensiones comerciales entre la UE y China, tras la decisión de Bruselas de abrir una investigación sobre las subvenciones de Beijing a los autos eléctricos.

La pesquisa podría llevar a la UE a tratar de proteger a los fabricantes europeos de automóviles imponiendo aranceles a los vehículos que considere que se venden injustamente a un precio inferior.

Al día siguiente de ese anuncio, el Ministerio de Comercio chino respondió al “proteccionismo desnudo” de la UE y afirmó que las medidas “tendrán un impacto negativo en las relaciones económicas y comerciales” bilaterales.

En su discurso de este lunes en Beijing, Dombrovskis insistió en que China sigue siendo una atractiva oportunidad de inversión para las empresas europeas.

“Tanto la UE como China se han beneficiado enormemente de su apertura al mundo”, afirmó. “Comerciar y cooperar más allá de las fronteras contribuyó a dar forma a nuestra fortaleza económica y geopolítica”.

Pero, dijo, los crecientes desafíos para las empresas corren el riesgo de convertir “lo que muchos consideraban una relación en la que todos ganaban en décadas pasadas” en una “dinámica en la que todos pierden en los próximos años”.

La negativa de China a condenar la guerra de Rusia en Ucrania también supone un “riesgo para su reputación”, afirmó Dombrovskis

La postura de Beijing “está afectando a la imagen del país, no sólo ante los consumidores europeos, sino también ante las empresas”, completó.

“China siempre ha defendido que cada país sea libre de elegir su propio camino de desarrollo”, consideró Dombrovskis.

“Así que nos resulta muy difícil entender la postura de China sobre la guerra de Rusia contra Ucrania, ya que incumple los propios principios fundamentales de China”, precisó.

EEUU va a llevar la guerra tecnológica con China a los ordenadores cuánticos


MADRID.- Las sanciones desplegadas por EEUU durante los últimos cinco años con el propósito de frenar el desarrollo tecnológico de China se intensificaron el 7 de octubre de 2022 con la aprobación de un nuevo paquete de prohibiciones extremadamente riguroso. La Administración estadounidense está vigilando muy de cerca la industria china de los semiconductores, pero hasta ahora no parecía prestar atención a los avances de este país asiático en computación cuántica. Esto acaba de cambiar.

El Gobierno estadounidense ha confirmado que hará todo lo que esté en su mano para obstaculizar el desarrollo de los ordenadores cuánticos en China. Esta declaración de intenciones la ha realizado en el contexto del programa 'Chips and Science Act', un plan de 280.000 millones de dólares que destinará 52.000 millones de dólares expresamente al fortalecimiento de la industria estadounidense de los semiconductores. El Departamento de Comercio de EEUU ha perfilado con mucha claridad sus líneas rojas.

En el documento en el que explica qué va a hacer para impedir un uso inapropiado de los fondos del programa 'Chips Act' asegura que su propósito es "evitar que beneficie de forma directa o indirecta a países extranjeros de interés". La alusión a China es evidente. 

Además, este documento menciona expresamente y en varias ocasiones los semiconductores diseñados para trabajar en entornos de operación criogénicos por debajo de los 77 kelvin, por lo que es evidente que está centrando su atención, precisamente, en los ordenadores cuánticos.

En el ámbito de la computación cuántica el Gobierno estadounidense puede hacer exactamente lo mismo que ya está haciendo en el dominio de la industria de los semiconductores convencionales: prohibir a las empresas y los centros de investigación de EEUU compartir o vender sus innovaciones a China. 

También puede extender su área de influencia a sus aliados para conseguir que Alemania, Países Bajos o Japón, que son algunos de los países que también están realizando avances significativos en computación cuántica, sigan sus pasos.

Sin embargo, lo que EEUU no puede impedir es que China emplee sus propios recursos para desarrollar sus tecnologías cuánticas. De hecho, el país de Xi Jinping lleva varios años invirtiendo en esta área. Y está obteniendo buenos resultados. 

En 2020 el grupo de investigación liderado por el físico Jian-Wei Pan logró transmitir un mensaje cifrado imposible de vulnerar entre dos estaciones terrestres separadas por una distancia de 1.120 km. 

En aquel momento fue un hito en comunicaciones cuánticas. Y hace apenas cuatro meses el Gobierno chino puso en marcha un plan de cinco años que persigue dar un espaldarazo definitivo al desarrollo de sus telecomunicaciones cuánticas.

Para las grandes potencias el desarrollo de las tecnologías cuánticas es fundamental. Si el avance tecnológico sigue su curso y los actuales prototipos de ordenadores cuánticos dan paso a máquinas con la capacidad de enmendar sus propios errores podrán ser utilizados para resolver problemas que son inabarcables para los superordenadores clásicos.

Se podrán utilizar, por ejemplo, para diseñar nuevos materiales o desarrollar medicamentos más eficaces. Por otro lado, las comunicaciones cuánticas permiten transmitir mensajes cifrados imposibles de vulnerar, una capacidad que también es crucial para dos potencias como EEUU o China. 

Veremos cómo responde el Gobierno chino a esta nueva línea de actuación de su homólogo estadounidense.

Europa cava la tumba de su industria automovilística reduciendo los objetivos de emisiones


BARCELONA.- En plena transformación del sector del automóvil, los fabricantes europeos están gastando tiempo y dinero en hacer lobby en la UE para reducir o retrasar la entrada de las nuevas normas sobre emisiones. Algo que están logrando con la ayuda de Estados como España, que se ha puesto a la cabeza para rebajar los objetivos ambientales, con las impredecibles consecuencias que esto tendrá.

Hasta ocho países de la UE, entre ellos España, Francia e Italia, se han opuesto a reglas más estrictas sobre emisiones en el transporte, argumentando que los fabricantes europeos ya están bajo presión para cumplir con la prohibición planeada por el bloque sobre las ventas de nuevos coches con motor de combustión en 2035.

El gran escollo está en la puesta en marcha de la Euro 7, que entrará en vigor a mediados de 2025 para automóviles y dos años más tarde para autobuses y camiones.

La nueva legislación endurecerá los límites de emisiones de contaminantes como el monóxido de carbono, los óxidos de nitrógeno y las partículas de frenos y neumáticos. De acuerdo con los fabricantes, sus beneficios ambientales serán mínimos respecto a su elevado coste.

El coste de su implementación es uno de los principales argumentos esgrimidos por los fabricantes para rechazar la Euro 7. Según sus estimaciones, esta les obligará a destinar una importante cantidad de recursos a una tecnología, los motores de combustión interna, cuyas ventas se prohibirán 10 años después.

España, que ocupa la presidencia rotatoria de la UE, espera presentar el borrador de la nueva propuesta en el consejo de competitividad la próxima semana. Pero este borrador no tiene el acuerdo de todos los estados.

Según este documento, se retrasarían los plazos de implementación de mediados de 2025 para los turismos y mediados de 2027 para los camiones.

Según la actual Euro 7, los turismos y camiones pequeños tendrán 24 meses después de la entrada en vigor del reglamento para cumplirlo, mientras que los autobuses y camiones de más de 3.5 toneladas tendrán 48 meses.

El grupo de presión Transport and Environment (T&E) criticó el borrador diciendo que los países habían «cedido ante las amenazas de los fabricantes, condenando a los europeos a enfermedades pulmonares y muerte prematura en las próximas décadas«.

Según la nota de prensa de T&E «En esta nueva propuesta de la Presidencia española se han debilitado los límites de emisiones para los turismos. No hay cambios en los límites de emisiones para turismos y furgonetas con respecto a Euro 6, ni siquiera para el diésel, que puede emitir más contaminantes NOx (óxido nitroso) que la gasolina.»

La medida para suavizar las normas sobre emisiones se produce en momentos en que la alta inflación y la preocupación por el coste de la reforma ambiental pueden provocar una reacción europea contra la velocidad de la transición.

El ministro de Finanzas francés, Bruno Le Maire, dijo que la UE debería abandonar el estándar Euro 7, ya que costaría a los fabricantes de automóviles europeos “dinero inútil” en un momento crucial de transición.

Una vez que los países de la UE acuerden su posición sobre el Euro 7, entablarán negociaciones con el Parlamento Europeo sobre la forma final del acuerdo.

El 60% de los bienes inmobiliarios vaticanos son a renta cero


CIUDAD DEL VATICANO.- Gestiona más de cuatro mil unidades inmobiliarias en Italia, pagando al Estado 9 millones de euros en impuestos en 2022. Estas son las impresionantes cifras de Apsa, (Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica), el dicasterio que gestiona los activos inmobiliarios y financieros de la Santa Sede. «Pero el 60 % a renta cero y destinados en su mayor parte a actividades institucionales», señala su presidente, Nunzio Galantino.

A pesar de que solo el 40 % restante de los inmuebles son «productivos», en 2022 Apsa fue una importante muleta para el presupuesto vaticano porque contribuyó con 32,27 millones de euros a cubrir las necesidades de la Curia Romana (el año anterior había alcanzado los 38,1 millones de euros), reduciendo su deuda.
 
Apsa, por su parte, alcanzó el punto de equilibrio a pesar de la pandemia y la crisis económica y sigue siendo una de las entidades más prósperas de todo el sistema financiero vaticano.
 
Esta ha sido la verdadera fuerza de la entidad vaticana. Si bien aumentó la rentabilidad de las actividades inmobiliarias, es decir, la compra, venta y alquiler de inmuebles, con un saldo positivo de 32 millones de euros respecto al año anterior, la gestión de inmuebles arrojó un resultado negativo con una diferencia de -26,55 millones respecto a 2021. Los gastos de gestión también aumentaron, pasando de 10 a 13 millones de euros.
 
En el caso del negocio inmobiliario, la recuperación post-Covid se hizo sentir, mientras que el resultado negativo en el área de valores fue causado por varios factores, combinados, como la crisis energética, el conflicto en Ucrania y los cuellos de botella en la cadena de suministro, la caída general del mercado de acciones y bonos, y la decisión de aumentar la liquidez para cumplir con las nuevas directrices de gobernanza e inversión de la Santa Sede. Pero a pesar de estas pérdidas, los administradores de Apsa han conseguido llegar a fin de mes.
 
Hacer público el balance por tercer año consecutivo se ajusta perfectamente a la petición del Papa de transparencia en las finanzas vaticanas. Con ocasión de la presentación del estado financiero, el presidente de Apsa, Galantino, subrayó que «la transparencia de los números, de los resultados alcanzados y de los procedimientos definidos es uno de los instrumentos de los que disponemos para desterrar (al menos en quienes están libres de prejuicios) las sospechas infundadas sobre la dimensión del patrimonio de la Iglesia, su administración o el cumplimiento de los deberes de justicia, como el pago de los impuestos debidos y de otras exacciones».
 
Pero la transparencia, señaló Galantino durante una reciente visita guiada con periodistas a uno de los tesoros inmobiliarios del Vaticano, el Palazzo della Cancelleria, «no consiste solo en la publicación del balance, no se detiene en la cantidad, sino que muestra también la calidad de lo que se guarda. Dar a conocer estos lugares –explicó– significa administrar bien, porque quien administra correctamente es también quien valoriza y distribuye, no solo la riqueza material, sino también, precisamente, la cultura, la historia, el conocimiento».
 
Por este motivo, el presidente de Apsa ha recordado que «la gran cantidad de bienes inmuebles propiedad de la Santa Sede están libres de alquiler en un 60 % y destinados en su mayor parte a actividades institucionales. Entre estos, la gran mayoría tiene ciertamente un valor histórico, incluso afectivo, muy importante».
 
El informe adjunto al presupuesto de Apsa también hace amplia referencia al plan trienal que la Administración del Patrimonio Apostólico ha adoptado para seguir mejorando los métodos de trabajo y los resultados financieros. El objetivo es lograr «beneficios totales de unos 55,4 millones de euros» para que el presupuesto vuelva a ser positivo.
 
En particular, Apsa está trabajando en el proyecto Sfitti a rendere para la reducción gradual del número de propiedades vacías, con su renovación y la posibilidad de ponerlas en el mercado inmobiliario. En total hay 140 propiedades afectadas.
 

Desenmascaran a la española "Mercadona" por identificarse con la más que dudosa Agenda 2030



MADRID/VALENCIA.- La cadena de supermercados españoles Mercadona celebraba esta semana el octavo aniversario de su compromiso con la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) con un mensaje en las redes sociales en el que anunciaba que quiere seguir «trabajando para alcanzar un futuro más sostenible». 

En la práctica, los Objetivos de Desarrollo Sostenible se resumen en un conjunto de medidas no votadas por los ciudadanos sino aceptadas por la gran mayoría de dirigentes políticos occidentales a través de lobbies, y que en la práctica supone la liquidación de la soberanía de las naciones y el ataque a la familia, a la vida y las raíces de Occidente. 

En este sentido, impone el «fanatismo climático», la ideología de género y alienta las avalanchas migratorias con el perjuicio inexorable a la prosperidad de las familias, al sector primario y a la industria.  

La polémica llegaba cuando muchos usuarios respondían al mensaje publicado en Twitter afirmando que no volverían a comprar en ninguna de sus tiendas. 

Incluso Vox, partido de extrema derecha que ha defendido en incontables ocasiones a la empresa española y a su dueño, Juan Roig, de los ataques sufridos de manera habitual por Podemos, se hacía eco de la publicación y mostraba su sorpresa por el hecho de que «una empresa privada se dedique a hacer campañas políticas, enarbolando una bandera que está amenazando nuestro campo, nuestra industria y el progreso de todos los españoles».  

Por su parte, la síndica de Vox en las Cortes Valencianas (Parlamento de una región oriental junto al Mediterráneo), Ana Vega, ha asegurado que lo que critican es que una empresa "alce la bandera" de los ODS, con los que Vox está "totalmente en contra". 

"Y lo vamos a seguir defendiendo", dijo tras rechazar que la cadena de supermercados defienda los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030.