
La economía española debería crecer apenas un 1,8% en 2009, casi al mismo nivel que el conjunto de la Eurozona (1,5%), lo que significa un brusco retroceso con respecto al 3,8% registrado en 2007 y el 3,9% de 2006.
En cuanto a la inflación, Bruselas estima que será de 3,8% en España para 2008, por encima del 3,2% previsto para la Eurozona (15 países).
En cuanto a la Eurozona, la Comisión redujo este lunes su previsión de crecimiento al 1,7% del PIB, contra el 1,8% de su anterior estimación, mientras que la inflación debería situarse en 3,2%, empujada por el alza de los precios de la energía y las materias primas.
Para el conjunto de la Unión Europea (UE-27), el crecimiento en 2008 sería de 2% del PIB y la inflación de 3,6%, según las cifras de las previsiones económicas de primavera difundidas por Bruselas.
"El crecimiento económico se desacelera en la Unión Europea y en la Eurozona y las presiones inflacionistas actuales son un tema de preocupación", indicó el comisario europeo de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia, al referirse a la cifras brindadas por Bruselas.
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