lunes, 13 de noviembre de 2023

Diplomáticos del Departamento de Estado acusan a Biden de "desinformar" sobre "crímenes de guerra" israelíes


WASHINGTON.- Un memorándum interno del Departamento de Estado firmado por un centenar de trabajadores acusa al presidente estadounidense, Joe Biden, de "desinformar" sobre los "crímenes de guerra" cometidos por Israel en la Franja de Gaza.

El texto, al que ha tenido acceso el portal Axios, está redactado por un diplomático de bajo rango que critica a Biden por "difundir desinformación en su discurso del 10 de octubre", base de la postura oficial de Estados Unidos ante el conflicto.

"Recomendamos contundentemente defender la liberación de los rehenes tanto por Hamás como por" Israel en referencia a los "miles" de palestinos internados en prisiones israelíes "sin cargos".

El texto denuncia en su comienzo las "atrocidades" perpetradas por Hamás el 7 de octubre, pero se centra posteriormente en cuestionar la respuesta militar israelí sobre la Franja de Gaza y sus consecuencias humanitarias.

Así, denuncia que son "crímenes de guerra" o "crímenes contra la Humanidad" cortar la electricidad, limitar la entrada de ayuda humanitaria o los ataques que han provocado miles de desplazados.

"Hemos duplicado nuestra ayuda militar incondicional sin que haya líneas rojas claras", ha advertido el texto, que acusa a "miembros de la Casa Blanca" de "mostrar un claro desprecio por la vida de los palestinos y falta absoluta de voluntad de reducir la tensión", además de una "imprudente falta de visión estratégica" incluso antes del 7 de octubre.

En particular critica a Biden por "cuestionar la cifra de muertos" en Gaza, después de que el 27 de octubre el mandatario dijera que no tenía "confianza" en las cifras publicadas por el Ministerio de Sanidad de Gaza.

Este memorándum ha sido transmitido por el conocido como "canal de disensión" que se estableció durante la Guerra de Vietnam para que los diplomáticos pudieran expresar su oposición a la política oficial estadounidense. 

Sin embargo, se supone que no deberían publicarse, aunque a veces se filtren a la prensa.

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