OSAKA.- Donald Trump rebajó este 
viernes el tono de las críticas a sus socios en el arranque de la cumbre
 del G20 en Osaka, donde tiene previsto reunirse con su homólogo Xi 
Jinping para intentar frenar la guerra comercial entre ambas potencias.
Tras
 sus críticas a la política comercial de China e India o a Alemania, 
país al que acusó de estar "en mora" por no contribuir lo suficiente al 
presupuesto de la OTAN, el presidente de Estados Unidos hizo uno de sus 
habituales cambios de tono en sus primeras reuniones bilaterales en 
Osaka.
"Es una persona fantástica, una mujer fantástica y estoy 
contento de tenerla como amiga", afirmó en una reunión bilateral con la 
canciller Angela Merkel, que por otra parte no quiso hablar de sus 
recientes temblores en público que despiertan dudas sobre su estado de 
salud.
Sobre la crisis en Irán, Trump, que apenas hace unos días 
dijo que en caso de guerra "duraría poco", aseguró este viernes en 
cambio que "no hay prisa" en resolver el conflicto.
"Tenemos mucho
 tiempo. No hay prisa, pueden tomarse su tiempo", aseguró Trump, una 
cuestión que abordó también con Vladimir Putin en otra de sus reuniones 
bilaterales de la jornada, en la que no dudó en elogiar sus "muy buenas 
relaciones" con el presidente ruso e incluso se permitió bromear con él 
sobre la presunta injerencia rusa en las elecciones de 2016 que le 
llevaron al poder.
Los líderes de las 20 grandes potencias 
económicas del planeta, un foro que incluye a tres países 
latinoamericanos (México, Brasil y Argentina), están en Osaka, la 
segunda ciudad de Japón, para la reunión anual de este grupo que 
representan el 85% del PIB del planeta.
Un encuentro que su anfitrión, el primer ministro japonés Shinzo Abe, dijo que desea que termine logrando una "bonita armonía".
En lo económico, la 
mirada estará puesta en la reunión del sábado entre Trump y Xi, en la 
que los líderes de la primera y segunda economías mundiales deberían 
abordar la guerra comercial que, según economistas e instituciones 
internacionales, puede tener un impacto negativo para el crecimiento 
global. 
Ebrahim Rahbari, un analista de CitiFX, apunta a que 
existe un 60% de probabilidades de "un acuerdo [EEUU-China] para retomar
 las negociaciones". El Wall Street Journal aseguró por su parte que 
China pone como condición antes de sentarse a la mesa que Estados Unidos
 levante las sanciones contra el gigante tecnológico Huawei.
El duelo entre Estados Unidos y China podría eclipsar la 
agenda oficial del foro, en particular la cuestión climática, con 
posiciones enfrentadas entre Washington, reacio a incluirla en la 
declaración final, al igual que sus socios.
La
 jornada también fue muy intensa para el presidente brasileño Jair 
Bolsonaro, que se reunió por primera vez con Donald Trump y declaró ser 
su "admirador". Ambos demostraron muy buena sintonía y el estadounidense
 no dudó en calificarle de "hombre especial" y "muy querido por el 
pueblo brasileño".
Bolsonaro también tuvo un
 encuentro informal con el presidente Emmanuel Macron, que pocas horas 
antes le había criticado por su política medioambiental y por su 
presunta intención, que Bolsonaro niega, de abandonar el acuerdo de 
París sobre el clima, una de las cuestiones candentes de la cumbre.
Pero
 el encuentro fue finalmente "amistoso", según un portavoz brasileño, y 
ambos abordaron también el ambicioso tratado de libre comercio entre la 
Unión Europea y los países del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay, 
Uruguay) que, tras años en proyecto, está viviendo la fase final de 
negociaciones intensas en Bruselas.
Por su parte el presidente argentino, Mauricio Macri, se 
reunió con la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI),
 Christine Lagarde, que reiteró "el apoyo del Fondo al programa de 
estabilización económica". También tuvo encuentros con el presidente de 
Chile, Sebastián Piñera, y el español Pedro Sánchez, entre otros.
La
 agenda del G20 también incluye una reunión el sábado del Grupo de Lima 
para abordar la situación en Venezuela. México, miembro del G20, acudió 
por su parte a la cumbre sin su presidente, Andrés Manuel López Obrador,
 y está representado por el canciller Marcelo Ebrard.

No hay comentarios:
Publicar un comentario