TOKIO.- Representantes de los países integrantes del G20 analizan
 desde hoy en Japón los riesgos de las actuales tensiones comerciales y 
buscan políticas fiscales globales ante las profundas transformaciones 
de los modelos de negocio.
La reunión de ministros de
 Finanzas y gobernadores de bancos centrales, de dos días, se celebra en
 la ciudad de Fukuoka, en medio de un fuerte dispositivo de seguridad 
extraño para esta tranquila localidad situada frente al estrecho que 
separa las costas de Japón y Corea del Sur.
La sesión del sábado, que se extendió por tres horas y 
media, es parte de los contactos previos a la cumbre del 28 y 29 de 
junio en Osaka, a la que asistirán, entre otros, el presidente 
estadounidense, Donald Trump, y su colega chino, Xi Jinping, así como 
una veintena de gobernantes de otras naciones.
En una
 sala de un lujoso hotel de Fukuoka y en debates que se desarrollan a 
puerta cerrada, los altos funcionarios se reúnen teniendo como telón de 
fondo las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, aunque no 
se esperan avances en ese sentido.
Así lo destacó el 
secretario del Tesoro de EEUU, Steven Mnuchin, en declaraciones a los 
periodistas en los márgenes de la reunión, al confirmar que en su agenda
 se incluye una reunión con el gobernador del Banco Popular de China 
(central), Yi Gang.
"No será una reunión para 
negociar", aclaró Mnuchin, quien insistió en que serán los contactos que
 tendrán en Osaka Trump y Xi los que servirán para avanzar hacia el 
final de la guerra comercial que desde el año pasado enfrenta a las dos 
economías más poderosas.
De momento, la reunión de 
Fukuoka se desarrolla con una crisis en ciernes que ha quedado resuelta:
 la que enfrentaba a Estados Unidos con su vecino del sur ante las 
amenazas de la Casa Blanca de aplicar un arancel del 5 % a las 
importaciones procedentes de México.
Horas antes de 
que comenzara la reunión en Fukuoka, México y Estados Unidos anunciaban 
en Washington haber llegado a un acuerdo migratorio para atajar la 
crisis, lo que fue recibido con entusiasmo en Fukuoka por el propio 
Mnuchin.
"No podíamos estar más complacidos con el acuerdo que hemos alcanzado", afirmó el secretario del Tesoro de EEUU.
"Es muy, muy significativo -añadió-, y apreciamos mucho los compromisos
 que ha hecho México para ayudarnos en estos temas de migración tan 
importantes".
No hubo reacción en Fukuoka de parte de
 México, que está representada por el subsecretario de Hacienda, Arturo 
Herrera, y el director de Asuntos Internacionales del Banco de México, 
Gerardo Zúñiga.
Y es que el presidente de México, 
Andrés Manuel López Obrador, ha decidido bajar su perfil en el foro del 
G20 y se ausentará de la cumbre de Osaka, al no estar satisfecho por sus
 esfuerzos contra las desigualdades globales.
"No voy
 a ir a la reunión de los 20, al G20, pero sí les voy a mandar una carta
 sobre los problemas de la desigualdad en el mundo", dijo López Obrador 
el pasado martes.
A las reuniones asisten 
representantes de los países del G20 y otras naciones vinculadas a estas
 iniciativas, como España, que está representada por su ministra de 
Economía, Nadia Calviño.
De acuerdo con los 
borradores que han trascendido, la reunión se cerrará con una 
declaración en la que se harán notar los riesgos que se corren por las 
tensiones comerciales crecientes, que están erosionando años de lucha 
contra el proteccionismo.
También se esperan nuevos 
compromisos para hacer frente a los cambios radicales en las nuevas 
economías, que cada vez cruzan más fronteras, con profundos desafíos en 
cuanto a políticas tributarias que antes tenían en cuenta la residencia 
física de las empresas.
Esos esfuerzos tienen en 
cuenta modelos de negocios digitales como Google o Facebook, por una 
parte, pero también la tendencia de muchas compañías a trasladar sus 
sedes a otras naciones que ofrecen mayores ventajas fiscales que las 
propias.
"Los cambios en las políticas fiscales están
 vinculados con los cambios en los modelos de negocio (...). No hay ni 
un solo país que no se haya visto afectado", reconoció en un seminario 
previo la ministra de Finanzas de Indonesia, Sri Mulyani Indrawati. 

No hay comentarios:
Publicar un comentario