viernes, 19 de junio de 2020

Lagarde (BCE) avisa a los líderes de que "lo peor está por llegar" y el paro de la eurozona podría subir al 10%


FRÁNCFORT.- La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, ha advertido este viernes a los jefes de Estado y de Gobierno de la UE de que el impacto de la pandemia sobre el mercado laboral todavía no ha llegado a su peor punto y que este momento "todavía está por llegar", con una tasa de paro que podría alcanzar el 10%, afectando especialmente a la población joven.

Es uno de los mensajes que, según fuentes diplomáticas, la francesa ha trasladado a los líderes europeos en la cumbre por videoconferencia que mantienen este viernes como primera toma de contacto sobre el plan de recuperación y el presupuesto comunitario para los próximos siete años.
Lagarde, en concreto, ha apuntado que el BCE espera una caída del PIB de la eurozona del 13% en el segundo trimestre de este año con respecto a los tres meses anteriores y una contracción en todo 2020 del 8,7%.
"Lo peor del impacto en los mercados laborales todavía está por llegar", ha expresado la presidenta del instituto emisor en la reunión, señalando que la tasa de desempleo en la eurozona podría elevarse al 10% y golpear "particularmente duro" a los jóvenes europeos. Según los últimos datos ofrecidos por la oficina europea de estadística Eurostat, el paro en la eurozona se situó en el pasado mes de abril en el 7,3%.
La francesa ha apuntado también, según las mismas fuentes, que las medidas "decisivas y efectivas" adoptadas hasta ahora tanto a nivel nacional como europeo han funcionado para impulsar un cierto "rebote" de la economía y "comprar algo de tiempo". 
Esto "se ha reflejado en la confianza de los mercados", pero ha advertido que un "fracaso" en las negociaciones sobre el fondo de reconstrucción "podría conducir a un cambio en esa confianza".
"Está en nuestras manos forjar la recuperación que queremos ver y para eso necesitamos una visión positiva", ha subrayado Lagarde en su intervención ante los jefes de Estado y de Gobierno, a quienes ha trasladado que el paquete de recuperación debería ser "rápido, flexible y estar anclado con firmeza en las reformas económicas".
La presidenta del BCE ha incidido, además, en que "cuanto antes se acuerde este paquete, mejor será para la economía de la UE". Y advirtió a los líderes de la UE que sus economías se dirigen hacia una “caída drástica” debido a la crisis del coronavirus, instándolos a acordar rápidamente un plan de estímulo masivo cuya negociación ha dividido a los miembros del bloque.
Lagarde añadió que los efectos completos de la peor recesión de Europa desde la Segunda Guerra Mundial aún no se han dejado notar en el mercado laboral y que el desempleo en la zona euro de 19 países podría subir al 10% desde el actual 7,3%.
Su mensaje fue muy claro en un momento en que los 27 líderes de la Unión Europea se instalaban ante las pantallas de sus ordenadores para una jornada de deliberaciones sobre el programa de recuperación del bloque.
Con más de 100.000 muertos por causa de la COVID-19, la UE necesita demostrar ahora su solidaridad después de meses de disputas que han mermado la confianza pública en el grupo y han puesto en peligro su posición global tras el varapalo del Brexit.
“Es una crisis sin precedentes que ha tenido un enorme impacto económico y social, pero también en la viabilidad de la UE”, dijo un alto diplomático de la UE. “Para demostrar que Europa protege (a su población) no podemos demorarnos más, ya que los retrasos solo harán que la situación sea más difícil y más costosa”.
Según fuentes consultadas, Lagarde dijo a la cumbre que los mercados financieros están relativamente tranquilos debido a las expectativas de que actuarán para mostrar que “la UE ha vuelto” a la acción.
Los Estados miembros de la UE están debatiendo un presupuesto comunitario para el periodo 2021-27 de unos 1,1 billones de euros, así como una propuesta de la Comisión Europea de pedir prestado al mercado 750.000 millones de euros para ayudar a reactivar las economías más afectadas por el coronavirus, en particular Italia y España. 
Ya antes de la pandemia existía un enfrentamiento entre los países del norte, fiscalmente austeros, y el “Club Med” de los países del sur, más endeudados, sobre los presupuestos a largo plazo del bloque.
Ahora están divididos en cuanto al tamaño y las condiciones del fondo de recuperación, que la Comisión sugiere que se divida a razón de dos tercios de subvenciones no reembolsables y un tercio de préstamos.
Los Países Bajos, Dinamarca, Suecia y Austria, los conocidos como “Cuatro Frugales” (“Frugal Four”), dicen que el fondo es demasiado grande y que sólo debería consistir en préstamos, ya que las subvenciones tendrían que ser devueltas por todos los contribuyentes de la UE.
Estos cuatro países quieren que los fondos estén claramente vinculados a la recuperación de la pandemia y que los beneficiarios se comprometan a realizar reformas económicas.
“La condicionalidad es un gran problema. Un acuerdo sobre las reformas podría abrir un margen de maniobra para las subvenciones”, dijo un diplomático.
Los países del este de la UE consideran que demasiado dinero iría a parar al sur, pidiendo que el gasto se centre en la agricultura y en cerrar las brechas de desarrollo con el oeste.

Sassoli traslada a los líderes que la Eurocámara no aceptará "ningún paso atrás" en el plan anticrisis

BRUSELAS.- El presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, ha trasladado este viernes a los jefes de Estado y de Gobierno que la propuesta de Bruselas para el plan de recuperación es una "base mínima de partida" sobre la que todavía es posible añadir "algunas mejoras", así como que los eurodiputados no aceptarán "ningún paso atrás".

El italiano ha intervenido al inicio de la cumbre telemática en la que los líderes europeos tendrán un primer intercambio de opiniones sobre el fondo de reconstrucción económica y el presupuesto de la UE para los próximos siete años. Ambos deben ser acordados por unanimidad entre las capitales y recibir después el visto bueno de la Eurocámara.
En su discurso ante los jefes de Estado y de Gobierno, que el Parlamento Europeo ha publicado, Sassoli ha recalcado que la propuesta de la Comisión Europea es "ambiciosa" pero también "representa una base mínima de partida". 
"No aceptaremos ningún paso atrás. Creemos que aún es posible adoptar algunas mejoras para garantizar que las decisiones cruciales que adoptaremos sean beneficiosas para los ciudadanos", ha expresado.
"No se puede ir atrás, lo hemos dicho muchas veces. Espero que la voz del Parlamento Europeo se tome en serio en estas circunstancias", ha remarcado, en la misma línea, en una comparecencia de prensa posterior en la que también ha insistido en que la Eurocámara no renunciará a sus "prerrogativas presupuestarias".
Por otro lado, además de pedir a los líderes "actuar urgentemente y con valentía", ha subrayado que trasladar el dinero del fondo a los países únicamente mediante préstamos (como piden los países del Norte) "tendría consecuencias asimétricas para la deuda de los distintos Estados miembros".
También ha incidido en que la creación de nuevos impuestos que financien los gastos de la UE (nuevos "recursos propios") es un aspecto "irrenunciable" y un "requisito previo indispensable" para la Eurocámara de cara a un "acuerdo global" sobre el presupuesto para el periodo 2021-2027 (MFF).
Sobre este punto, Sassoli ha reconocido que todavía es necesario que la Comisión presente propuestas legislativa concretas para establecer estos nuevos impuestos, pero ha indicado que la voluntad de los eurodiputados radica en que el futuro acuerdo incluya con claridad a partir de cuándo estarán vigentes.
"No queremos únicamente anuncios, queremos saber cuándo entraran en vigor", ha expresado sobre una cuestión que los países más críticos con la propuesta de Bruselas quieren dejar para una etapa posterior.

La deuda del Reino Unido supera el 100% del PIB por primera vez desde 1963

LONDRES.- La deuda pública del Reino Unido se situó el pasado mes de mayo en 1,95 billones de libras esterlinas (2,16 billones de euros), cifra que equivale al 100,9% del PIB británico, rebasando por primera vez desde 1963 el tamaño de la economía del país, la segunda mayor de Europa, como consecuencia del impacto de la pandemia de covid, según ha confirmado la Oficina Nacional de Estadística (ONS).

El volumen de deuda neta contabilizado al final de mayo representó un incremento de 173.200 millones de libras (192.242 millones de euros) o de 20,5 puntos porcentuales en los últimos doce meses, lo que supone el mayor aumento interanual en porcentaje de PIB de toda la serie histórica, que se remonta a 1993.
Se estima que el endeudamiento público se elevó en mayo a 55.200 millones de libras (61.257 millones de euros), lo que supone prácticamente multiplicar por nueve la cifra contabilizada en mayo de 2019 y representa la más alta de toda la serie).
De este modo, en los dos primeros meses del ejercicio fiscal 2020/21 se calcula que el endeudamiento británico escaló a 103.700 millones de libras (115.071 millones de euros), un nuevo récord histórico, superando en unos 87.000 millones de libras (96.540 millones de euros) la cifra correspondiente a abril y mayo de 2019.
En este sentido, las últimas estimaciones de la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria (OBR por sus siglas en inglés) apuntan a que el endeudamiento de Reino Unido en el presente ejercicio fiscal, entre abril de 2020 y marzo de 2021, podría alcanzar los 298.400 millones de libras (330.988 millones de euros), casi cinco veces más que en el último ejercicio fiscal.
De su lado, los ingresos del Gobierno disminuyeron un 28,4% interanual en mayo, hasta los 40.700 millones de libras (45.150 millones de euros), incluyendo caídas del 46% y del 29,4% en la recaudación del IVA y del impuesto sobre la renta, mientras que la recaudación del impuesto de sociedades se redujo un 14%.
"Si bien el impacto de la pandemia en las finanzas públicas cada vez es más claro, sus efectos no se aprecian completamente aún, lo que significa que las estimaciones de los ingresos fiscales, endeudamiento y el PIB están sujetos a una incertidumbre mayor de lo habitual", advierte la ONS.

El supervisor británico propone una moratoria de otros tres meses en el crédito al consumo

LONDRES.- El organismo supervisor de los mercados británicos propuso el viernes que se permita a los consumidores prolongar la congelación de los pagos de sus tarjetas de crédito tres meses más, como parte de las medidas para apoyar a los prestatarios en dificultades debido a la pandemia de coronavirus. 

Aquellos que aún no han solicitado una congelación de pagos en las tarjetas de crédito o un descubierto sin intereses de hasta 500 libras (620 dólares) también podrían solicitarlo hasta el 31 de octubre, dijo la Autoridad de Conducta Financiera en un comunicado.
La prórroga de la congelación de pagos, que se introdujo en abril, también permitiría a los clientes solicitar una reducción del tipo de interés en cualquier descubierto de más de 500 libras.
“Las propuestas... proporcionarían un nivel mínimo de apoyo financiero para los consumidores que sigan en dificultades financieras temporales debido al coronavirus, o que comiencen a tenerlas”, dijo Christopher Woolard, director ejecutivo interino de la FCA.

La UE se atasca y deja para julio el acuerdo sobre el plan de recuperación

BRUSELAS.- Los líderes de la Unión Europea (UE) celebrarán una nueva cumbre a mediados de julio para intentar cerrar un acuerdo sobre el billonario plan de recuperación económica tras la pandemia de coronavirus, después de que el primer debate al respecto haya servido para constatar las diferencias sobre los detalles.

La falta de un acuerdo era el resultado esperado de la cumbre por videoconferencia celebrada este viernes por los jefes de Estado y de Gobierno de la UE, un encuentro de cuatro horas en el que los Veintisiete se limitaron a exponer al máximo nivel político las posiciones esgrimidas desde que la Comisión Europea presentó su propuesta en mayo.

Sin embargo, tanto el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, como la jefa de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, consideraron que el encuentro fue útil para constatar que hay voluntad de dar una respuesta común ante una situación sin precedentes y que la mayoría comparte que esta debe llegar cuanto antes.

El plan sobre la mesa plantea destinar cerca de dos billones de euros al reflote de la economía, a través de un fondo de recuperación con 750.000 millones de euros financiado con la emisión de deuda común y un presupuesto comunitario de 1,1 billones para el periodo 2021-2027. Por su envergadura y diseño, el plan no tiene parangón en la historia comunitaria.

"Los líderes acordaron unánimemente que la gravedad de la crisis justifica una respuesta común ambiciosa que combine solidaridad, inversiones y reformas", dijo Von der Leyen.

También hay consenso en que la Comisión utilice el presupuesto comunitario para emitir deuda en los mercados para financiar el fondo de recuperación, según añadió Michel.

Pero ahí terminan los puntos de encuentro y comienza la larga lista de divergencias: sobre el tamaño global del fondo de recuperación, sobre la proporción de subvenciones y préstamos (ahora fijada en 500.000 millones y 250.000 millones, respectivamente), sobre los criterios para distribuir el dinero o las condiciones para recibirlos.

También hay desencuentro sobre el tamaño del presupuesto plurianual y la permanencia de los descuentos que tienen algunos Estados en su contribución al mismo por pagar mucho más de lo que reciben.

Para salvar las distancias que separan a los Estados, Michel quiere "acelerar" las negociaciones en los próximos días, con la presentación de "propuestas concretas" hasta la cumbre que convocará "a mediados de julio" en Bruselas de forma presencial, algo que muchos consideran fundamental para llegar a un acuerdo.

Para ello se necesita la unanimidad de los Veintisiete y, después, el visto bueno de la Eurocámara y la ratificación de algunos parlamentos nacionales para que el dinero empiece a llegar a las arcas nacionales en 2021.

"Será difícil y no subestimo la tarea, pero hoy he percibido una fuerte voluntad política común para comprometerse, lo que es muy positivo", dijo Michel.Sin embargo, tras el encuentro, los países "frugales", el bloque formado por Holanda, Austria, Suecia y Dinamarca que lidera las críticas a la propuesta de Bruselas, rebajaron las expectativas.

El primer ministro holandés, Mark Rutte, afirmó en una rueda de prensa que "tampoco sería devastador" si no se logra un acuerdo en julio y dudó de que vaya a conseguirse incluso durante el verano.

Su homólogo austríaco, Sebastian Kurz, reiteró que el grupo no quiere un sistema basado en subvenciones, sino en créditos con un claro calendario de devolución.

Estos países vienen abogando además por que el desembolso de las ayudas esté estrictamente ligado a que los beneficiaros acometan reformas estructurales y quieren un presupuesto comunitario de mínimos, que además mantenga sus descuentos.

Estos reembolsos podrían convertirse en uno de los elementos clave del "regateo" en las próximas semanas para lograr el visto bueno de estos cuatro países, según varias fuentes diplomáticas, que coinciden en que su dura posición de partida busca también garantizar este extremo.

Con todo, estos países no son los únicos escépticos con respecto al volumen de subvenciones, que no convence a varios Estados más, según fuentes comunitarias.

Por otro lado, varios Estados, entre ellos los del grupo de Visegrado (Hungría, Polonia, Chequia y Eslovaquia) critican el criterio escogido para distribuir el dinero del fondo entre países, que se basa en el nivel de paro entre 2015 y 2019, y piden que se vincule más estrechamente al periodo de la pandemia.

Von der Leyen defendió, sin embargo, que este criterio refleja más fielmente que otros el nivel general de resiliencia de los países ante choques como el acaecido y que, aun cuando se eligiesen cifras más recientes, el reparto sería parecido.

La distribución actual deja a España como segunda beneficiaria con 140.446 millones en ayudas, solo por detrás de Italia.

España, Francia, Italia y Alemania, los grandes países, están en líneas generales satisfechos con el plan, que también respaldan Portugal, Luxemburgo o Bélgica, e insisten en que debe lograrse un rápido acuerdo.

"La propuesta que hoy debatimos en el Consejo es un punto de partida, pero debemos alcanzar un acuerdo pronto. Cuanto más tiempo perdamos, más profunda será la recesión", dijo en Twitter el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, quien no compareció ante la prensa tras el encuentro. 

La regiones de la UE piden "evitar retrasos innecesarios" con el fondo de recuperación

BRUSELAS.- El presidente del Comité Europeo de las Regiones, Apostolos Tzitzikostas, ha pedido este viernes a los líderes europeos un acuerdo "rápido" sobre el plan de recuperación económica y "evitar retrasos innecesarios" que afecten a la capacidad del bloque para ayudar a sus ciudadanos.

"Los debates en el Consejo europeo son legítimos, pero los Estados miembros deben evitar retrasos innecesarios que afectarían a nuestros esfuerzos para proteger a los ciudadanos y relanzar la economía", ha expresado el griego en un comunicado.
"Los ciudadanos de nuestras regiones, ciudades y localidades esperan un acuerdo rápido sobre el fondo de recuperación de 750.000 millones y un presupuesto comunitario sólido", ha apuntado el presidente de las regiones, para quien la UE debe actuar "con unidad, solidaridad y responsabilidad en estos difíciles momentos".
Los jefes de Estado y de Gobierno de la UE se han emplazado a una nueva reunión que tendrá lugar a mediados de julio en formato presencial tras haber mantenido este viernes un primer intercambio de impresiones sobre las propuestas de la Comisión Europea y haber constatado que todavía existen importantes diferencias entre las capitales.

La economía de EE.UU. muestra desajuste en oferta y demanda

NUEVA YORK.- Nuevos datos sugieren que la economía ha estado creciendo durante los últimos dos meses, aunque la distribución de ese crecimiento ha sido desigual. El consumo se ha recuperado más rápidamente que la producción, una divergencia que deberá resolverse durante los próximos meses. Cierta nivelación en el crecimiento de los sectores de manufactura y vivienda debería ayudar a compensar cualquier dificultad en el consumo que pueda surgir de una segunda ola del coronavirus o el retiro del apoyo fiscal por parte del Congreso.

La mejor evidencia de esta tendencia podría ser el avance de las ventas minoristas y los datos de producción industrial publicados el martes. En mayo, las ventas minoristas superaron significativamente las expectativas, con un aumento de 17,7% respecto al mes anterior y solo 6,1% por debajo del año anterior. Los impulsores de la mejora fueron las ventas de vehículos motorizados, muebles y ropa, a medida que los estados comenzaron a reabrir sus economías y los consumidores, tal vez, tuvieron cierta demanda acumulada después de confinarse en sus hogares durante semanas.
No se puede decir lo mismo de la producción industrial, que solo creció 1,4% respecto al mes anterior y que sigue 5,3% por debajo del año anterior. Debido a la naturaleza de esta dislocación económica, un cierre de gran parte de la economía en medio de una crisis de salud pública, las empresas son cautelosas al pronosticar la demanda, a medida que enfrentan desafíos que van desde cadenas de suministros estresadas hasta nuevas regulaciones de seguridad.
Pero el consumo solo puede superar a la producción por un tiempo antes que veamos escasez o mayores precios en algunos productos. Lo hemos visto de manera más dramática en la industria de la vivienda. El mercado de la vivienda ya estaba luchando contra la falta de oferta antes de que llegara la crisis, y si bien tanto la demanda como la construcción se desplomaron a medida que se establecieron las órdenes de cuarentena, la demanda se ha recuperado más rápido que la producción.
Esta semana, en su conferencia telefónica trimestral de ganancias, el constructor de viviendas Lennar dio una buena explicación de por qué este entorno es tan difícil. La compañía señaló que después de un fuerte comienzo de año, las ventas se desplomaron en marzo y abril, y los pedidos de abril disminuyeron 29% respecto del año anterior. 
Como resultado, la actividad de construcción de la compañía se desaceleró, tanto en respuesta a una demanda más débil como en un esfuerzo por preservar el efectivo. 
Desde entonces, Lennar ha experimentado el mismo repunte que el resto de la industria y los pedidos en las primeras dos semanas de junio aumentaron 20% respecto del año anterior.
Lo que esto significa es que incluso si la demanda sigue siendo fuerte, lo que no es una certeza dado el riesgo de un aumento de los contagios, Lennar tendrá una escasez de casas en venta en el segundo semestre, debido a las decisiones tomadas en marzo y abril. 
Esto ofrece una oportunidad para otros constructores de viviendas, pero podría significar una escasez de inventario aún más grave para los posibles compradores de viviendas. Eso, por supuesto, ejercería una mayor presión al alza sobre los precios de las viviendas, mientras la actividad de la construcción se pone al día.
Algunas de las mismas fuerzas están operando en la industria automotriz. La industria de autos de alquiler ha sido duramente afectada por la disminución de los viajes, lo que ha llevado a Hertz a declararse en bancarrota. 
Y, sin embargo, los concesionarios de automóviles usados no ven que las compañías de alquiler de automóviles vendan su inventario para recaudar efectivo. ¿La razón? Les preocupa no poder reponer los inventarios cuando la demanda de autos de alquiler se recupere, debido a la falta de producción por parte de los fabricantes de automóviles. Los precios de los automóviles usados han subido, al menos en parte, debido a esta falta de inventario.
Estas dinámicas de demanda y oferta son algunas de las razones por las que la encuesta del sector manufacturero de la Fed de Filadelfia de ayer mostró que la perspectiva de la actividad económica a seis meses subió a su nivel más alto desde principios de la década de 1990. En toda la economía, la producción necesita ponerse al día para satisfacer incluso un nivel moderado de demanda y reconstruir los inventarios que se han reducido durante los últimos meses.
A pesar de las señales de un repunte económico, muchas cosas aún podrían descarrilar esta recuperación. Los epicentros del virus en estados como Arizona, Texas y Florida podrían deshacer parte del progreso económico logrado desde abril. El hecho de que el Congreso no extienda los programas de alivio fiscal implementados para responder a la crisis podría tener un efecto similar. 
Pero dado que los consumidores muestran una mayor disposición a gastar de lo que parecía probable hace incluso un mes o dos, la producción debe aumentar para satisfacer esa demanda. Suponiendo que sí, esa producción adicional debería ayudar a impulsar el crecimiento económico en los próximos meses. Más preocupante sería si no fuera así y tuviéramos un pequeño episodio de estanflación marcado por una producción limitada y precios más altos.

Autoridades de la Fed, cautas sobre la recuperación por la propagación del virus

WASHINGTON.- Dos funcionarios de la Reserva Federal de Estados Unidos se mostraron más pesimistas el viernes sobre la velocidad de cualquier recuperación económica tras la epidemia de coronavirus, y advirtieron de que la tasa de desempleo podría aumentar de nuevo si la enfermedad no se controla.

El banco central ya dejó claro que espera que la recuperación económica completa del impacto del virus lleve años y mantuvo la tasa de interés cerca de cero en su reunión de política monetaria de la semana pasada.
Pero las incipientes señales de recuperación de los datos económicos, con un aumento de los puestos de trabajo y ventas minoristas mejores de lo previsto en mayo, habían alimentado algunas esperanzas de que Estados Unidos pudiese recuperarse más rápidamente.
Las autoridades de la Fed rechazaron esa idea el viernes y advirtieron de que no se reabra la economía demasiado rápido tras el fin de los confinamientos estatales destinados a contener el virus, que ha matado a más de 118.000 estadounidenses.
California, Carolina del Norte y una serie de ciudades de Estados Unidos exigieron o instaron el uso obligatorio de mascarillas el jueves para controlar los casos de coronavirus, después de que al menos seis estados establecieron récords de casos diarios.
"Esta falta de contención podría conducir en última instancia a la necesidad de cierres más prolongados, lo que resultaría en una reducción del consumo y la inversión, y un mayor desempleo", dijo el presidente de la Reserva Federal de Boston, Eric Rosengren, en un evento virtual organizado por la Cámara de Comercio de Greater Providence.
El jefe de la Fed de Mineápolis, Neel Kashkari, también dijo que la recuperación económica tardaría más de lo que esperaba hace unos meses, y advirtió de que la reciente tendencia positiva en el aumento de los puestos de trabajo podría invertirse pronto si no se domina el virus.
"Desafortunadamente, mi escenario base es que veremos una segunda ola del virus en Estados Unidos, probablemente este otoño (boreal)", aseguró Kashkari durante un chat por Twitter moderado por CBS News. "Si hay una segunda ola, esperaría que la tasa de desempleo suba otra vez".
A principios de esta semana, en dos comparecencias distintas ante los legisladores del Congreso, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, alertó de que millones de personas probablemente seguirán desempleadas incluso si la economía va por el camino de la recuperación.
Powell, Rosengren y otros han dicho que es probable que se necesite más apoyo de política fiscal y monetaria para ayudarles. El vicepresidente de la Reserva Federal, Richard Clarida, dijo a Fox Business Network el viernes que "hay mucho más que podemos hacer y creo que haremos mucho más".
Clarida añadió que no hay límite para las compras potenciales de la Fed de valores del Tesoro o de valores respaldados por hipotecas.
"Saldremos de esto, pero tomará tiempo y trabajo... El camino por delante probablemente será desafiante", afirmó Powell en una discusión a través de videoconferencia con líderes locales en Youngstown, Ohio. "Se han perdido vidas y medios de subsistencia y la incertidumbre es muy grande", agregó.

El FMI amplía red de seguridad para las principales economías latinas

WASHINGTON.- El Fondo Monetario Internacional amplió su red de seguridad para algunas de las economías más grandes de América Latina a medida que la pandemia global golpea a la región particularmente duro.

Después de que los mercados se desplomaran en el primer trimestre, Chile y Perú se apresuraron a unirse a México y Colombia como las únicas naciones del mundo con acceso a la Línea de Crédito Flexible (LCF) del Fondo.
El mes pasado recibieron la aprobación y, entre ellos, los cuatro países ahora pueden recurrir a 107.000 millones de dólares en fondos cuando lo deseen, lo que equivale a cerca de un décimo de la capacidad crediticia total del FMI.
Se trata de una valiosa reserva en caso de que los mercados emergentes sufran otra ola de “intensos” egresos como los observados en febrero y marzo, dijo Alberto Ramos, economista jefe para América Latina de Goldman Sachs Group Inc. Los inversionistas retiraron en marzo un récord de 83.000 millones de los mercados de renta variable y deuda del mundo en desarrollo, según el Instituto de finanzas internacionales.
El FMI, con sede en Washington, ha tenido una controvertida historia en América Latina en los últimos años después de que préstamos a Argentina y Ecuador provocaran protestas cuando el fondo hizo un llamado a la austeridad. Las LCF no tienen ese tipo de condiciones.
Ramos, quien trabajó en el FMI entre 1997 y 2003, señaló que se trata de dinero que viene sin condiciones.
Las líneas de crédito son de 61.000 millones para México, 24.000 millones para Chile y cerca de 11.000 millones para Perú y Colombia. Eso excede los fondos totales que el FMI ha reservado para más de 100 países en todo el mundo que han expresado interés en el financiamiento de emergencia para hacer frente a las consecuencias del covid-19. Los países pagan una tarifa de compromiso anual en función de su nivel de acceso, y el costo de México es el mayor, con 163 millones.
Las LCF están disponibles para países con un historial de formulación de políticas monetarias responsable, pero que también son vulnerables a los impactos externos.
Alejandro Werner, director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, dijo el mes pasado que Chile y Perú hace tiempo cumplen con los requisitos para la línea de crédito, pero que la pandemia global les sirvió de impulso para solicitarla.
Las cuatro naciones latinoamericanas tienen economías relativamente abiertas, lo que aumenta su exposición a recesiones en la economía mundial. En conjunto, forman el bloque procomercio de la Alianza del Pacífico.
Europa tiene el Mecanismo Europeo de Estabilidad para brindar ayuda financiera a los miembros en apuros y Asia tiene la Iniciativa Chiang Mai, sin embargo, América Latina no tiene un mecanismo regional de respaldo comparable. De ahí la creciente importancia del FMI.
Entre las economías más grandes de América Latina, solo las reservas internacionales de Perú igualaron al menos 20% de su producto interno bruto el año pasado.
América Latina se ha visto afectada por la pandemia mundial en parte debido a sus débiles sistemas de salud, capacidad limitada de prueba y grandes economías informales que dificultan el distanciamiento social. La región actualmente representa casi 50% de las muertes diarias por coronavirus.
La línea de crédito flexible se creó en 2009 para alentar a los países a solicitar ayuda antes de enfrentar una extensa crisis. México fue el primer país en solicitarla.
Si una nación la pide, debe repagarla en un plazo de 3,25 a 5 años.
Los países consideran los fondos como prevención y ninguno ha recurrido a ellos. Esa es una gran diferencia con la relación del FMI con Argentina, que ha recibido decenas de miles de millones de dólares en desembolsos del préstamo récord de 56.000 millones de dólares que acordaron en 2018.
Los gobiernos probablemente recurrirán a las líneas de crédito del FMI solo si las condiciones empeoran significativamente, porque hacerlo podría asustar a los inversores, dijo Ramos.
Por ahora, las líneas de crédito continúan siendo tratadas como un respaldo, para complementar las reservas internacionales en caso de emergencia.
Pero si hay otra fuerte recesión, es posible que los cuatro países recurran a los fondos, dijo Ernesto Revilla, jefe de economía latinoamericana de Citigroup Inc. y exjefe de la Unidad de Planeación Económica de la Secretaría de Hacienda de México.
Revilla estimó que no será necesario usar la LCF en general si el impacto es realmente transitorio: una recuperación de EE.UU. en el tercer trimestre, no más olas de contagio del virus y mercados que sigan siendo solidarios como hasta ahora. Si alguna de estas cosas ocurre, es posible que deban acostumbrarse, agregó.

La caída económica de Perú es “casi inimaginable”

LIMA.- El presidente del banco central de Perú, Julio Velarde, asegura que la contracción récord de la economía en abril era “casi inimaginable” y no se revertirá fácilmente a corto plazo. “Ni en mis peores pesadillas podría pensar que la economia cayera 40%”, dijo Velarde a periodistas el viernes.

Industrias enteras se detuvieron en marzo, después de que el Gobierno implementara un confinamiento severo para contener un brote de coronavirus. La interrupción abrupta provocó la pérdida masiva de empleos a medida que las empresas se retiraban.
Una reapertura gradual de las industrias conducirá a contracciones más pequeñas en los meses siguientes –cerca de 30% en mayo y casi 20% en junio– y un crecimiento positivo solo desde el segundo trimestre de 2021, según el banco central. Para todo el año, el banco pronostica una contracción de 12,5%, la mayor en un siglo, seguida de un aumento de 11,5% el próximo año.
“Esperamos una recuperación rápida, pero la caída ha sido terrible”, dijo Velarde. ”Hay empresas y consumidores que van a tener miedo en gastar por el incertidumbre al futuro”, y agregó que el pronóstico del banco para 2020 “podría incluso ser un poco optimista”..
Velarde dijo que con la tasa de interés crediticia de referencia en 0,25% desde abril, la herramienta más poderosa del banco central por ahora es un programa de préstamos respaldado por el gobierno de 60.000 millones de soles (US$17.000 millones), llamado Reactiva. El programa, que está casi a la mitad, debe ir acompañado de un estímulo fiscal para evitar una contracción económica aún mayor, dijo.
Reactiva impulsará el crecimiento crediticio de Perú en aproximadamente 15% este año, el ritmo más rápido desde 2012, dijo.
Velarde dijo que es “indispensable” que el gobierno amplíe los pagos en efectivo y recomendó un pago mensual a los hogares con dificultades.

Ángela Merkel se prepara para riesgos electorales de campaña por Trump

BERLÍN.- Entre la pandemia global, el colapso económico más profundo desde la Segunda Guerra Mundial y el brexit, la canciller alemana, Angela Merkel, ha tenido un 2020 difícil. Y se está preparando para una situación que puede empeorar mucho.

A medida que la situación política del presidente Donald Trump se vuelve cada vez más impredecible previo a las elecciones estadounidenses de noviembre, Merkel se prepara para enfrentar más desafíos de su contraparte estadounidense, según funcionarios familiarizados con su ola de pensamiento.
Este mes, Trump, sin previo aviso, anunció el retiro de las tropas estadounidenses de Alemania, marginó a la canciller de negociaciones entre Serbia y Kosovo, y suspendió los esfuerzos de resolución de una disputa sobre gravámenes a gigantes de internet. Amenazó nuevamente con imponer aranceles a automóviles europeos, un ataque más bien directo para Alemania.
Ahora que EE.UU. hace frente a protestas masivas por la violencia policial, tiene más de 100.000 fallecimientos por covid-19 y las cifras de encuestas sobre el presidente no son sólidas, funcionarios en Berlín temen que eso pueda ser solo el comienzo de un problema para Alemania. Merkel incluso citó las elecciones estadounidenses como un factor de riesgo para la UE en una videoconferencia con sus colegas líderes el viernes, según un funcionario.
Los alemanes temen que mientras Trump intenta revivir su campaña, pueda atraer a su base con provocativas acciones políticas que les causen problemas masivos, dijo otro funcionario, pidiendo no ser identificado porque las discusiones son privadas. 
Los puntos críticos potenciales incluyen aumentar drásticamente las barreras comerciales o los esfuerzos por interrumpir la alianza de seguridad occidental. La ambivalencia de Trump sobre la OTAN ha sido una fuente de preocupación desde hace mucho tiempo para los líderes europeos.
Ahora que los lazos entre EE.UU. y Alemania están deteriorándose, Trump también comenzó a amenazar nuevamente con imponer aranceles sobre las exportaciones de autos alemanes. Es posible que Merkel haya desencadenado la más reciente provocación cuando redujo el esfuerzo de Trump por organizar una reunión del Grupo de los Siete en Camp David este mes diciendo que no asistiría.
El aumento de las tensiones comerciales podría ser la amenaza más inmediata para Berlín, y uno de los funcionarios dijo que era posible que Washington usara esto como tema de campaña. A principios de este mes, Trump planteó la posibilidad de apuntar al sector automotriz de Alemania para obligar a la UE a reducir sus impuestos sobre las exportaciones de langosta estadounidense.
“La Unión Europea ha estafado tanto a este país que es increíble, y es tan fácil de resolver”, dijo Trump a representantes de la industria pesquera en Maine que se quejaron de las barreras comerciales europeas. “Si no cambian, aplicaremos un arancel a sus autos hasta que cambien. Y cambiarán de inmediato”.
Los aranceles serían un desastre financiero para la industria automotriz de Alemania y podría afectar las ventas de vehículos valoradas en 23.000 millones de euros (28.000 millones de dólares), según estimaciones de Bloomberg Intelligence
De acuerdo con la Comisión Europea, la rama ejecutiva del bloque, un arancel estadounidense de 25% sobre los automóviles extranjeros agregaría 10.000 euros al precio de etiqueta de los vehículos europeos importados al país.
La UE ha indicado que si Washington sigue adelante con la amenaza, impondría aranceles a 35.000 millones de euros de las importaciones estadounidenses, una escalada que probablemente se convertiría en una guerra comercial general.
El impacto de la guerra comercial entre EE.UU. y la UE probablemente empeoraría las consecuencias del conflicto de Trump con China el año pasado.

La desigualdad alimentaria se profundiza en EE.UU.

NUEVA YORK.- El acceso a los alimentos ya era desigual en Estados Unidos desde mucho antes que llegara el coronavirus. Pero la pandemia ha intensificado el problema, con imágenes de interminables filas en bancos de alimentos que sacan a relucir esta dura realidad.

Incluso en EE.UU., una de las naciones con mayor seguridad alimentaria del mundo, millones de personas enfrentan dificultades para acceder a comida nutritiva. La desigualdad alimentaria afecta desproporcionadamente a los estadounidenses de color, que ya figuran entre los más afectados por el covid-19 y sus consecuencias económicas.
Aproximadamente 17 millones de personas más caerán en inseguridad alimentaria en 2020, lo que elevará el total a 54 millones, incluidos 18 millones de niños, según proyecciones de Feeding America, la organización sin ánimo de lucro más grande del país en alivio del hambre.
Las disparidades a través de las ramas raciales podrían empeorar. Actualmente, los afroamericanos tienen dos veces y media más probabilidades que los estadounidenses blancos de tener bajo o muy bajo acceso a suficientes alimentos para una vida activa y saludable. Para los latinoamericanos, la tasa duplica la de los blancos. Las cifras destacan algunas de las desigualdades sistémicas subyacentes que existen sobre las ramas raciales a medida que las manifestaciones en todo el país atraen a cientos de miles para protestar contra la violencia policial y el asesinato de George Floyd.
Según datos del Departamento de Agricultura de EE.UU., las personas que viven por debajo del umbral de la pobreza tienen una probabilidad seis veces mayor de inseguridad alimentaria que aquellas que casi duplican el nivel. Esa brecha podría ampliarse este año, como sucedió durante la recesión de 2008. Tomó casi 10 años a EE.UU. recuperarse de las profundidades de seguridad alimentaria en las que cayó durante la Gran Recesión.
Desiertos alimentarios
La inseguridad alimentaria describe la incapacidad de un hogar para proporcionar suficientes alimentos para una vida saludable. Eso podría significar suministros insuficientes, pero también una falta de variedad de alimentos, incluidas frutas y verduras frescas, que se necesita para proporcionar el equilibrio nutricional adecuado.
Los denominados desiertos alimentarios, o áreas sin proveedores tales como supermercados, son comunes en lugares de bajos ingresos. En estas áreas, las opciones nutricionales de las personas a menudo se limitan a alimentos más baratos, ricos en calorías y menos nutritivos.
Los afroamericanos tienen el doble de probabilidades que sus homólogos blancos de vivir por debajo del umbral de pobreza, y sin tanta riqueza y redes seguras de ahorro, podrían caer en inseguridad alimentaria más rápidamente.
Ocho de los 10 condados con las tasas más altas de inseguridad alimentaria cuentan con una población de raza negra de más de 60%, según Feeding America. Esos ocho están ubicados en el sur profundo del país.
La accesibilidad a alimentos va de la mano con los gastos en alimentos en la lucha contra el hambre. De los 50 condados con la mayor brecha entre el costo de la comida y la capacidad de las personas para pagarla, 46 tienen una población negra o latina que supera las cifras nacionales, según un informe de Feeding America.
Con millones de personas sin trabajo desde mediados de marzo, las solicitudes de beneficios por desempleo en EE.UU. han superado el millón durante 13 semanas consecutivas, los déficits presupuestarios probablemente empeorarán
El covid-19 ha afectado desproporcionadamente a las poblaciones minoritarias, cobrando vidas de estadounidenses de raza negra a más del doble de la tasa de estadounidenses de raza blanca. Además, muchas áreas que han tenido altas tasas de infección por virus también sufren inseguridad alimentaria, lo que puede contribuir a problemas de salud a largo plazo.
Antes de la pandemia, 21% de los hogares negros y 16% de los hogares latinos estaban en inseguridad alimentaria, en comparación con 8% de los blancos, según USDA. Desde el inicio de la pandemia en marzo, 45% de los adultos negros dijeron que se saltaban las comidas, o recurrían a caridad o asistencia alimentaria federal, en comparación con 18% de los adultos blancos, según Kaiser Family Foundation.
Se espera que la pandemia de coronavirus continúe aumentando la cantidad de personas en inseguridad alimentaria. Las tasas de inseguridad se duplicaron en EE.UU. en abril y se triplicaron para las familias con niños, que en muchos casos han perdido el acceso a las comidas escolares gratuitas y de bajo costo con los cierres inducidos por la pandemia, según un informe de Northwestern University. 
Feeding America proyecta que uno de cada seis adultos y una cuarta parte de todos los niños podrían experimentar inseguridad alimentaria este año.

Wall Street cierra mixto tras un día volátil en el que el Dow bajó un 0,80 %

NUEVA YORK.- Wall Street cerró en terreno mixto este viernes después de que su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, acabara la jornada con un descenso del 0,80 % en una sesión de importantes fluctuaciones causadas por algunos factores técnicos y por la inquietud que causa en el mercado una posible nueva oleada de coronavirus en EE.UU.

Al término de las operaciones en la Bolsa de Nueva York, el Dow Jones bajó 207,54 puntos y cayó por debajo de los 26.000 puntos al quedar en 25.872,56 enteros, lastrado por Walt Disney (-3,17 %), Boeing (-2,80 %) o Nike (-2,68 %).
El selectivo S&P 500 vivió una sesión especialmente movida y terminó con un descenso del 0,56 % o 17,60 puntos, hasta 3.097,74 unidades, mientras que el Nasdaq, que aglutina a las tecnológicas más importantes del mercado, fue el único que se salvó del rojo al repuntar un leve 0,03 % o 3,07 puntos, hasta 9.946,12 unidades.
Prácticamente todos los sectores llegaron a la campana de cierre con pérdidas, entre los que destacaron el de servicios públicos (-3,10 %), el energético (-1,67 %) y el industrial (-1,27 %), mientras que sólo acabó el terreno positivo el sanitario, con una subida del 0, 87 %.
El parqué neoyorquino vivió una sesión de importantes fluctuaciones debido, en parte, a factores técnicos como el primer reequilibrio del año al que se enfrentaba el S&P 500, que sucedió tres meses después de lo habitual, ya que la última vez se suspendió dada la inestabilidad que había causado en el mercado el coronavirus.
A esta medida, que suele estar asociada a marcados movimientos en zig zag, se le unió la incertidumbre que está creando una posible segunda oleada de coronavirus en EE.UU., y que ha llevado por ejemplo a que Apple haya anunciado que volverá a cerrar 11 de sus tiendas en Florida, Arizona, Carolina del Sur y Carolina del Norte.
Además, la Asociación Internacional de Compañías de Cruceros anunció este viernes la suspensión de todas sus operaciones desde puertos estadounidenses dada la actual situación, lo que llevó a Norwegian Cruise Line y a Carnival a caer más de un 5 %, y a Royal Caribbean a retroceder un 6,8 %.
Este viernes, Arizona y Florida han anunciado que se han registrado importantes aumentos en el número de casos de coronavirus, y California informó de 4.000 nuevas infecciones el jueves, su cifra más elevada, pero los estados continúan con sus planes de reapertura.
"Los casos de Covid han estado alcanzando máximos en algunos estados... Y el problema está creciendo demasiado como para que los mercados lo ignoren", explicó el fundador de Vital Knowledge, Adan Crisafulli, en un comunicado.
Pese a la inestable sesión del viernes, el Dow Jones terminó con un ascenso semanal del 1,04 %, que en el caso del S&P 500 fue del 1,86 % y del Nasdaq del 3,73 %.
En otros mercados, el precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este viernes con una subida del 2,34 %, hasta los 39,75 dólares el barril, en una jornada en la que el crudo texano ha sellado una ganancia semanal de cerca del 11 %, espoleado por los altos niveles de cumplimiento de los recortes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus socios (OPEP+).
Al cierre de Wall Street, el oro subió a 1.754,90 dólares la onza, el rendimiento del bono del Tesoro a 10 años descendió al 0,692 % y el dólar ganó terreno frente al euro, con un cambio de 1,1178.

El petróleo de Texas sube un 2,34% y se anota una ganancia semanal de cerca del 11%

NUEVA YORK.- El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este viernes con una subida del 2,34 %, hasta los 39,75 dólares el barril, en una jornada en la que el crudo texano ha sellado una ganancia semanal de cerca del 11 %, espoleado por los altos niveles de cumplimiento de los recortes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus socios (OPEP+).

Al final de las operaciones en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex) los contratos de futuros del WTI para entrega en julio sumaron 0,91 dólares respecto a la sesión previa del jueves, cuando el Texas subió un 2,3 %.
Los precios del petróleo subían tras una sesión sin sobresaltos en la que los operadores han valorado el efecto que ejerce en el mercado la marcha según lo previsto de los recortes de la OPEP+, si bien todavía existen preocupaciones en torno a un posible repunte del virus que vuelva a lastrar la demanda, duramente golpeada por la pandemia.
Algunos países de la OPEP+ como Irak o Kazajistán, que han tenido dificultades para cumplir su parte, se han comprometido a profundizar en los recortes y acercarse a su cuota, lo que podría suponer una menor producción para julio.
"Las condiciones de la demanda siguen siendo el factor de riesgo real en el mercado actual", aseguró en una nota diaria el analista sénior de Schneider Electric Robbie Fraser, que advirtió de los riesgos para el mercado energético de los repuntes del virus que se están produciendo en algunos estados de Estados Unidos y el efecto en las reaperturas.
También ha ayudado al WTI la sensación entre los inversores de que la guerra comercial entre China y Estados Unidos se ha suavizado tras conocerse este viernes que el gigante asiático incrementará la importación de vainas de soja estadounidenses, etanol y maíz.
"La globalización es también importante para la demanda de petróleo y si las relaciones comerciales de China y Estados Unidos alcanzan un punto saludable, esto es positivo para los precios del petróleo", explicó el analista senior del corredor de divisas Oanda, Edward Moya.
En este contexto, los contratos de futuros de gasolina con vencimiento en julio sumaron más de un centavo hasta los 1,27 dólares el galón, y los de gas natural, que expiran en julio, sumaron casi cuatro centavos hasta los 1,669 dólares por cada mil pies cúbicos.

Las bolsas europeas suben por la mejora de las relaciones entre EEUU y China

MADRID.- Las principales bolsas europeas han subido este viernes por la mejora de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China y las perspectivas de recuperación económica ante la vuelta a la actividad.

En el conjunto de la semana, los mercados se han visto animados por la nueva tanda de estímulos monetarios y fiscales, encabezados por la Reserva Federal de EEUU, un factor que ha quedado parcialmente contrarrestado por los rebrotes de la epidemia de coronavirus en algunos países.
Londres ha subido hoy un 1,10 %; Milán, un 0,68 %; París, un 0,42 %; Fráncfort, un 0,40 %; y Madrid, un 0,32 %.
En la semana Milán ha ganado un 3,87 %; Fráncfort, un 3,19 %; Londres un 3,07 %; París un 2,90 %; y Madrid, un 1,67 %.
El índice Eurostoxx50, que agrupa a las 50 empresas europeas de mayor capitalización, ha subido este viernes un 0,71 % y en la semana mejora el 3,78 %.
Los mercados han reaccionado hoy con optimismo ante la mejora de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, tras anunciarse que el gigante asiático va a aumentar las importaciones de ciertos productos estadounidenses, como las vainas de soja, el maíz o el etanol.
En cambio, el fracaso de los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) para llegar a un acuerdo sobre el plan de recuperación económica ha aminorado las alzas iniciales de la bolsa.
La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, ha advertido de que, si no se aprueba rápido un plan de recuperación, podría peligrar el incipiente repunte de la economía.
Wall Street ha abierto hoy en verde. El Dow Jones de Industriales, su principal indicador, avanzaba un 0,30 %, el S&P 500 ganaba un 0,27 %, y el índice compuesto del mercado Nasdaq avanzaba un 0,52 % a la hora del cierre del mercado europeo.
El parqué neoyorquino se encaminaba hacia su cuarta semana de ganancias consecutiva.
En el mercado petrolero, el crudo Brent para entrega en agosto subía el 0,44 %, hasta 41,95 dólares, y el petróleo intermedio de Texas (WTI) se revalorizaba el 0,54 % hasta 39,38 dólares.