
"Llegó la hora de tomar la decisión de bajar los impuestos en este sector de la economía a fin de estimular el alza de la extracción y del refinado de petróleo", dijo ante la Duma (cámara baja del Parlamento), que ya lo confirmó como primer ministro.
Los impuestos también serían reducidos en otros sectores como la construcción y la educación, añadió Putin, y subrayó que esto era necesario para "estimular el desarrollo económico del país".
También fijó como objetivo "llevar la inflación por debajo del 10% en los años venideros". La inflación, que alcanzó un 11,9% el año pasado y evoluciona actualmente a un ritmo anual de más del 14%, figura en el primer lugar de las preocupaciones de los rusos.
Los estándares de calidad de vida mejorarán en el país, prometió Putin. "Podemos y debemos convertirnos en un líder mundial en los principales indicadores de nivel de vida durante los 10 a 15 próximos años", dijo, y mencionó en particular los salarios, la seguridad social, la educación y la salud, la esperanza de vida, el medio ambiente y la vivienda.
El ex presidente llamó además a "fortalecer la libertad de empresa" en el país y dijo estar "seguro de que Rusia se convertirá en uno de los principales centros financieros del mundo".
Los diputados rusos aprobaron por 392 votos contra 56 la candidatura de Putin a la jefatura del gobierno, un día después de su nombramiento por parte del flamante presidente de Rusia, Dimitri Medvedev.
Poco antes, ante el Parlamento, Medvedev, sucesor y delfín de Putin, había afirmado que como primer ministro, Putin "tendrá un papel clave" en los planes de desarrollo de Rusia de aquí a 2020.
No hay comentarios:
Publicar un comentario