WASHINGTON.- El
coronavirus y las recesiones resultantes dejarán "cicatrices duraderas"
en los países en desarrollo y los mercados emergentes, con las naciones
exportadoras de petróleo y las que sufren crisis financieras llevándose
la peor parte, dijo el martes el Banco Mundial.
En
su reporte de perspectivas económicas mundiales, el banco sostuvo que
un país promedio de los mercados emergentes que sufre una crisis
financiera podría ver una caída de su producción de un 8% en un período
de cinco años, mientras que en el caso de los exportadores de petróleo
el desplome alcanzaría un 11%.
Funcionarios
del prestamista internacional destacaron que las perspectivas de
crecimiento ya se habían atenuado significativamente debido en parte a
los conflictos comerciales, por lo que el impacto de la pandemia podría
fácilmente convertirse en problemas de solvencia para los países de
mercados emergentes.
Las
bajas tasas de interés en la última década contribuyeron a un aumento
récord de la deuda soberana y corporativa en los mercados emergentes,
limitando la capacidad de las autoridades para responder a la crisis y
evitar el cierre de negocios, la pérdida de empleos y el deterioro del
capital humano, dijo Ceyla Pazarbasioglu, vicepresidenta de crecimiento
equitativo, finanzas e instituciones del banco.
"Si
las políticas están totalmente orientadas a respaldar intereses creados
o compañías zombis, se pueden generar problemas de liquidez que se
convierten en problemas de solvencia", dijo Pazarbasioglu.
"Lo
que realmente se necesita ahora son medidas urgentes para limitar daños
y perjuicios, pero también mantenerse al margen de políticas que pueden
llevar a esta crisis de salud, que se ha convertido en una crisis
económica, a una crisis financiera".
No hay comentarios:
Publicar un comentario