domingo, 1 de junio de 2008

El CGPJ prevé un aumento de la morosidad y los litigos "como en cualquier crisis o desaceleración"

MADRID.- El vocal y portavoz del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Enrique López, pronosticó hoy que se producirá un aumento de la morosidad y que ésta acarreará un mayor número de litigios, como sucede "en cualquier momento de crisis o desaceleración" económica.

"Por desgracia, la morosidad va a aumentar y también los procedimientos judiciales, tanto en el ámbito civil, fundamentalmente, como en el laboral y, esperemos que en menor medida, en el penal", dijo López, tras recalcar que el mundo judicial tiene este escenario "muy medido en resultados".

El portavoz del CGPJ hizo estas declaraciones tras la firma de un acuerdo de colaboración entre el organismo y la Asociación Nacional de Establecimientos Financieros de Crédito (Asnef) que permite a los jueces acceder a los datos de morosos de ésta, a los ficheros antifraude y de solvencia patrimonial.

Por su parte, el presidente de Asnef, Pedro Guijarro, sostuvo que dicho acuerdo no responde "en absoluto" a un eventual aumento de los impagos en el actual escenario económico, y consideró que la hipótesis de una mayor mora tiene un efecto "marginal" sobre los procesos judiciales.

El acuerdo sellado hoy por ambos responsables posibilita a los órganos judiciales, en el ejercicio de sus funciones, consultar los datos de Asnef para la prevención del fraude y para las operaciones impagadas de forma telemática, a través de los procedimientos establecidos en la red denominada 'Punto Neutro Judicial'.

El uso de las nuevas tecnologías contribuirá a una mayor agilidad y ahorro de costes de los procesos judiciales, ya que antes de la firma del acuerdo, los jueces accedían a la información sobre morosidad por correo ordinario, tras firmar un oficio.

"Sustituimos el correo tradicional por el uso de las nuevas tecnologías, con la ventaja que ofrecen en términos de seguridad", incidió el portavoz del CGPJ, tras recalcar que cualquier petición se realizará a través de firma electrónica.

López insistió además en que sólo los jueces que tramiten un procedimiento accederán a esta información, y que en ningún caso se consultará el estado de solvencia de una persona física o jurídica "por interés personal o curiosidad". "No podrá acceder a esta información cualquiera que pase por un órgano judicial", recalcó.

En este sentido, el presidente de Asnef subrayó que el acuerdo se lleva a cabo bajo "el absoluto respeto" a la protección de datos personales, ya que se ajusta a la legislación vigente en la materia, y refleja la fidelidad de los datos que maneja la asociación.

Por ejemplo, acceder a los datos de morosidad permitirá a los jueces determinar si un caso de insolvencia ha sido buscado a propósito con el ánimo de perjudicar a los acreedores o prestatarios de servicios y si encaja en los procedimientos penales.

Este convenio es el resultado de la línea de trabajo emprendida hace meses entre instituciones públicas y privadas para apoyarse mutuamente en acciones preventivas que incidan en la seguridad de la sociedad y contribuyan a la disminución del fraude.

Asnef representa a las entidades de financiación en España, y sirve de enlace con las Administraciones Públicas, otras asociaciones profesionales y usuarios de los productos financieros, facilitando a los consumidores, profesionales y empresarios el acceso a los bienes de consumo y de producción.

Por otro lado, el convenio contempla la posibilidad de que Asnef realice denuncias de forma telemática ante los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y ante los juzgados cuando tenga conocimiento de delitos. "Esto forma parte de la modernización de la Justicia", dijo López.

Cómo fabricar una crisis global / Walden Bello*

Cuando cientos de miles de personas se manifestaron en México el año pasado contra un incremento al precio de la tortilla, muchos analistas culparon a los biocombustibles. A causa de los subsidios del gobierno estadunidense, los granjeros de ese país dedicaban más hectáreas al maíz para etanol que para alimento, lo cual disparó los precios.

Esta desviación del uso del maíz fue sin duda una causa de la elevación de precios, aunque probablemente la especulación de intermediarios con la demanda de biocumbustible tuvo mayor influencia. Sin embargo, a muchos se les escapó una pregunta interesante: ¿cómo es que los mexicanos, que viven en la tierra donde se domesticó el maíz, han llegado a depender del grano estadunidense?

La erosión de la agricultura mexicana

No puede entenderse la crisis alimentaria mexicana sin considerar que en los años anteriores a la crisis de la tortilla la patria del maíz fue convertida en una economía importadora de ese grano por las políticas de “libre mercado” promovidas por el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM) y Washington.

El proceso comenzó con la crisis de deuda de principios de la década de 1980. México, uno de los dos mayores deudores del mundo en desarrollo, fue obligado a implorar dinero del banco y del FMI para pagar el servicio de su deuda con bancos comerciales internacionales. El precio de un rescate fue lo que un miembro del consejo ejecutivo del BM describió como “intervencionismo sin precedente”, diseñado para eliminar aranceles, reglamentaciones estatales e instituciones gubernamentales de apoyo, que la doctrina neoliberal identificaba como barreras a la eficiencia económica.

El pago de intereses se elevó de 19 por ciento del gasto federal total en 1982 a 57 por ciento en 1988, en tanto el gasto de capital se derrumbó de 19.3 a 4.4 por ciento. La contracción del gasto gubernamental se tradujo en el desmantelamiento del crédito estatal, de los insumos agrícolas subsidiados por el gobierno, los apoyos de precio, los consejos estatales de comercialización y los servicios de extensión.

Este golpe a la agricultura campesina fue seguido por uno aún mayor en 1994, cuando entró en vigor el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Aunque dicho tratado consideraba una prórroga de 15 años a la protección de productos agrícolas, entre ellos el maíz, pronto comenzó a fluir maíz estadunidense altamente subsidiado, lo cual redujo los precios a la mitad y hundió al sector maicero en una crisis crónica. En gran medida a causa de ese acuerdo, México se ha consolidado como importador neto de alimentos.

Con el cierre de la entidad gubernamental comercializadora de maíz, la distribución de importaciones maiceras de Estados Unidos y del grano nacional ha sido monopolizada por unas cuantas comercializadoras trasnacionales, como Cargill. Eso les ha dado tremendo poder para especular con las tendencias del mercado, de modo que pueden manipular y magnificar muchas veces los movimientos de demanda de biocombustibles. Al mismo tiempo, el control monopólico del comercio doméstico ha asegurado que una elevación en los precios internacionales del maíz no se traduzca en precios significativamente más altos a pagar a los pequeños productores.

Cada vez resulta más difícil a los productores mexicanos de maíz eludir el destino de muchos otros pequeños productores en sectores como arroz, carne de res, pollo y cerdo, quienes se han venido abajo por las ventajas concedidas por el TLCAN a los productos subsidiados estadunidenses. Según un informe del Fondo Carnegie de 2003, las importaciones agrícolas de EU han dejado sin trabajo a 1.3 millones de campesinos, muchos de los cuales han emigrado al país del norte.

Las perspectivas no son buenas, pues el gobierno mexicano continúa en manos de neoliberales que desmantelan sistemáticamente el sistema de apoyo al campo.

Creación de la crisis del arroz en Filipinas

Que la crisis global de alimentos se origina en la restructuración de la agricultura por el libre mercado resulta más claro en el caso del arroz. A diferencia del maíz, menos de 10 por ciento de la producción mundial de arroz se comercializa. Además, en el arroz no ha habido desviación del consumo hacia los biocombustibles.

Sin embargo, en este solo año los precios se han triplicado, de 380 dólares por tonelada en enero a más de mil dólares en abril. Sin duda, la inflación deriva en parte de la especulación de los cárteles mayoristas en una época de existencias escasas. Sin embargo, el mayor misterio es por qué varios países consumidores de arroz que eran autosuficientes se han vuelto severamente dependientes de las importaciones.

Filipinas ofrece un triste ejemplo de cómo la restructuración económica neoliberal transforma un país de exportador neto a importador neto de alimentos. Es el mayor importador mundial de arroz. El esfuerzo de Manila por asegurarse provisiones a cualquier precio se ha vuelto nota de primera plana, y las fotos de soldados que resguardan la distribución del cereal en comunidades pobres se ha vuelto emblemática de la crisis global.

Los trazos generales de la historia de Filpinas son similares a los de México. El dictador Ferdinando Marcos fue culpable de muchos crímenes y malos manejos, entre ellos no llevar adelante la reforma agraria, pero no se le puede acusar de privar al sector agrícola de fondos gubernamentales.

Para paliar el descontento de los campesinos, el régimen les otorgó fertilizantes y semillas subsidiadas, impulsó mecanismos de crédito y construyó infraestructura rural. Durante los 14 años de su dictadura, sólo en uno, 1973, se tuvo que importar arroz debido al extenso daño causado por tifones. Cuando Marcos huyó del país, en 1986, había 900 mil toneladas métricas de arroz en los almacenes del gobierno.

Paradójicamente, los siguientes años de gobierno democrático vieron encogerse la capacidad de inversión gubernamental. El BM y el FMI, actuando por cuenta de acreedores internacionales, presionaron al gobierno de Corazón Aquino para que diera prioridad al pago de la deuda externa, que ascendía a 26 mil millones de dólares. Aquino accedió, aunque los economistas de su país le advirtieron que sería “inútil buscar un programa de recuperación que sea consistente con el pago de la deuda fijado por nuestros acreedores”.

Entre 1986 y 1993, entre 8 y 10 por ciento del PIB salió de Filipinas cada año en pagos del servicio de la deuda. Los pagos de intereses en proporción al gasto gubernamental se elevaron de 7 por ciento en 1980 a 28 por ciento en 1994; los gastos de capital cayeron de 26 a 16 por ciento. En suma, el servicio de la deuda se volvió la prioridad del presupuesto nacional.

El gasto en agricultura cayó a menos de la mitad. El BM y sus acólitos locales no se preocupaban, porque un propósito del apretamiento del cinturón era dejar que el sector privado invirtiera en el campo. Pero la capacidad agrícola se erosionó con rapidez, el riego se estancó, y hacia finales de la década de 1990 sólo 19 por ciento de la red caminera del país estaba pavimentada, contra 82 por ciento en Tailandia y 75 por ciento en Malasia.

Las cosechas eran anémicas en general; el rendimiento promedio de arroz era de 2.8 toneladas por hectárea, muy debajo de los de China, Vietnam y Tailandia, donde los gobiernos promovían activamente la producción rural. La reforma agraria languideció en la era posterior a Marcos, privada de fondos para servicios de apoyo, que habían sido la clave para las exitosas reformas de Taiwán y Corea del Sur.

Como en México, los campesinos filipinos enfrentaron la retirada en gran escala del Estado como proveedor de apoyo. Y el recorte en programas agrícolas fue seguido por la liberalización comercial; la entrada de Filipinas en la Organización Mundial de Comercio (OMC) tuvo igual efecto que la firma del TLCAN para México.

La membresía en la OMC requería eliminar cuotas en las importaciones agrícolas excepto arroz, y permitir que cierta cantidad de cada producto ingresara con bajos aranceles. Si bien se permitió al país mantener una cuota en importaciones de arroz, tuvo que admitir el equivalente a entre uno y 4 por ciento del consumo doméstico en los 10 años siguientes. De hecho, a causa del debilitamiento de la producción derivado de la falta de apoyo oficial, el gobierno importó mucho más que eso para compensar una posible escasez.

Esas importaciones, que se elevaron de 263 mil toneladas en 1995 a 2.1 millones en 1998, deprimieron el precio del cereal, lo cual desalentó a los productores y mantuvo la producción a una tasa muy menor a la de los dos principales proveedores del país, Tailandia y Vietnam.

Las consecuencias del ingreso de Filipinas a la OMC barrieron con el resto de la agricultura como un tifón. Ante la invasión de importaciones baratas de maíz, los campesinos redujeron la tierra dedicada a ese cultivo de 3.1 millones de hectáreas en 1993 a 2.5 millones en 2000. La importación masiva de piezas de pollo casi acabó con esa industria, en tanto el aumento de importaciones desestabilizó las de aves de corral, cerdo y vegetales.

Los economistas del gobierno prometieron que las pérdidas en maíz y otros cultivos tradicionales serían más que compensadas por la nueva industria exportadora de cultivos “de alto valor agregado” como flores, espárragos y brécoles. Poco de eso se materializó. El empleo agrícola cayó de 11.2 millones en 1994 a 10.8 millones en 2001.

El doble golpe del ajuste impuesto por el FMI y la liberalización comercial impuesta por la OMC hizo que una economía agrícola en buena medida autosuficiente se volviera dependiente de las importaciones y marginó constantemente a los agricultores. Fue un proceso cuyo dolor fue descrito por un negociador del gobierno filipino durante una sesión de la OMC en Ginebra: “Nuestros pequeños productores agrícolas son masacrados por la brutal injusticia del entorno del comercio internacional”.

La gran transformación

La experiencia de México y Filipinas se reprodujo en un país tras otro, sujetos a los manejos del FMI y la OMC. Un estudio de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en 14 países descubrió que los niveles de importaciones agrícolas en 1995-98 excedieron los de 1990-94. No era sorprendente, puesto que uno de los principales objetivos del acuerdo agrícola de la OMC era abrir mercados en países en desarrollo para que absorbieran la producción excedente del norte.

Los apóstoles del libre mercado y los defensores del dumping parecieran estar en extremos opuestos del espectro, pero las políticas que propugnan producen el mismo resultado: una agricultura capitalista industrial globalizada.

Los países en desarrollo se integran en un sistema en el que la producción de carne y grano para exportación está dominada por grandes granjas industrializadas como las manejadas por la trasnacional tailandesa CP, en las que la tecnología es mejorada continuamente por avances en ingeniería genética de firmas como Monsanto.

Y la eliminación de barreras tarifarias y no tarifarias facilita un supermercado agrícola global de consumidores de elite y clase media, atendidos por corporaciones comercializadoras de granos como Cargill y Archer Daniels Midland, y minoristas trasnacionales de alimentos como la británica Tesco y la francesa Carrefour.

No se trata sólo de la erosión de la autosuficiencia alimentaria nacional o de la seguridad alimentaria, sino de lo que la africanista Deborah Bryce-son, de Oxford, llama la “descampesinación”, es decir, la supresión de un modo de producción para hacer del campo un sitio más apropiado para la acumulación intensiva de capital.

Esta transformación es traumática para cientos de millones de personas, pues la producción campesina no es sólo una actividad económica: es un modo de vida milenario, una cultura, lo cual es una razón de que en India los campesinos desplazados o marginados hayan recurrido al suicidio. Se calcula que unos 15 mil campesinos indios han acabado con su vida.

El derrumbe de precios por la liberalización comercial y la pérdida de control sobre las semillas ante las empresas de biotecnología son parte de un problema integral, señala Vandana Shiva, activista por la justicia global: “En la globalización, el campesino o campesina pierde su identidad social, cultural y económica de productor. Ahora un campesino es ‘consumidor’ de semillas y químicos caros que venden las poderosas corporaciones trasnacionales por conducto de poderosos latifundistas y agiotistas locales”.

Agricultura africana: de la sumisión al desafío

La descampesinación se encuentra en estado avanzado en América Latina y Asia. Y si el Banco Mundial (BM) se sale con la suya, África marchará en la misma dirección. Como correctamente señalan Bryceson y sus colegas en un artículo reciente, el Informe mundial de desarrollo para 2008, que hace extensa referencia a la agricultura en África, es prácticamente un proyecto de transformación de la agricultura del continente, basada en campesinos, en una explotación agrícola comercial en gran escala. Sin embargo, como ocurre en muchos otros lugares hoy día, los pupilos del banco pasan del hosco resentimiento al abierto desafío.

En tiempos de la descolonización, en la década de 1960, África era en realidad exportadora neta de alimentos. Hoy el continente importa 25 por ciento de sus alimentos; prácticamente todos sus países son importadores netos. La hambruna se ha vuelto un fenómeno recurrente; sólo en los tres años pasados han surgido emergencias alimentarias en el cuerno de África, el Sahel y en las partes sur y centro del continente.

La agricultura en África se encuentra en profunda crisis, y las causas van desde las guerras hasta el mal gobierno, falta de tecnología agrícola y propagación del VIH/sida. Sin embargo, como en México y Filipinas, parte importante de la explicación es la cancelación de controles y mecanismos de apoyo gubernamentales conforme a los programas de ajuste estructural impuestos por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el BM para apoyar en el servicio de la deuda externa.

El ajuste estructural acarreó descenso de la inversión, aumento del desempleo, reducción del gasto social, disminución del consumo y baja producción. Levantar los controles de precios a los fertilizantes y reducir al mismo tiempo los sistemas de crédito agrícola sencillamente condujo a una reducción en el uso de fertilizantes, cosechas menos abundantes y menor inversión. Además, la realidad se negó a conformarse a la expectativa doctrinaria de que el retiro del Estado abriría el camino para que el mercado dinamizara la agricultura. El sector privado, percibiendo correctamente que la reducción del gasto gubernamental crearía más riesgo, se abstuvo de entrar al quite.

En un país tras otro, la partida del Estado alejó la inversión privada en vez de atraerla. Si bien los comerciantes privados sí remplazaron al Estado, indica un informe de Oxfam, “a veces lo han hecho en términos sumamente desfavorables para los campesinos pobres”, con lo cual los campesinos “han quedado en mayor inseguridad alimentaria, y los gobiernos, atenidos a los flujos de ayuda internacional, que son impredecibles”. The Economist, por lo regular inclinado hacia el sector privado, está de acuerdo, pues reconoce que “muchas de las empresas privadas llevadas para remplazar a los investigadores del Estado resultaron ser monopolistas en busca de ganancias”.

El poco apoyo que se permitió acopiar a los gobiernos africanos fue canalizado por el Banco Mundial a la agricultura de exportación con el fin de generar divisas necesarias para el pago de la deuda. Pero, como en Etiopía durante la hambruna de la década de 1980, esto condujo a dedicar tierra buena a cultivos de exportación, y los de alimentos se desplazaron a suelo menos apropiado, lo cual exacerbó la inseguridad alimentaria.

Además, como el BM alentó a varias economías a enfocarse en los mismos cultivos de exportación, con frecuencia el resultado fue la sobreproducción, que generó caídas de precios en los mercados internacionales. Por ejemplo, el éxito mismo de la expansión de la producción de cacao en Ghana provocó un descenso de 48 por ciento en el precio internacional entre 1986 y 1989. En 2002-03, un colapso de los precios del café contribuyó a otra emergencia alimentaria en Etiopía.

Como en México y Filipinas, el ajuste estructural en África no se refirió sólo a la baja inversión estatal, sino también al desvío de esa inversión. Pero hubo una importante diferencia: en África el BM y el FMI ejercieron una microadministración, tomando decisiones referentes a con qué rapidez cancelar los subsidios, cuántos empleados públicos despedir y hasta, como en el caso de Malawi, cuántas de las reservas de granos del país había que vender y a quién. En otras palabras, los procónsules del banco y el FMI penetraron en la entraña misma de la participación estatal en la agricultura para desmantelarla.

En el impacto negativo del ajuste tuvieron parte las injustas prácticas comerciales de Estados Unidos y la Unión Europea. La liberalización permitió que carne de res subsidiada de la UE arruinara a los ganaderos de Sudáfrica. Con subsidios legitimados por la OMC, productores estadunidenses saturaron los mercados mundiales de algodón a entre 20 y 55 por ciento del costo de producción, lo que llevó a la bancarrota a campesinos de África occidental y central.

Según Oxfam, el número de africanos subsaharianos que viven con menos de un dólar al día casi se duplicó, a 313 millones, entre 1981 y 2001: 46 por ciento del continente. El papel del ajuste estructural en crear pobreza era difícil de negar. Como reconoció el economista en jefe del BM: “No creímos que los costos humanos de estos programas pudieran ser tan grandes, y que las ganancias económicas tardaran tanto en llegar”.

Malawi representa la tragedia africana desencadenada por el FMI y el BM. En 1999 el gobierno de ese país lanzó un programa para dar a cada familia de pequeños propietarios un paquete inicial de fertilizantes y semillas. El resultado fue un superávit nacional de maíz. Lo que vino después es una historia que debería ser consagrada como un clásico estudio de caso de una de las mayores metidas de pata de la economía neoliberal.

El Banco Mundial y otros donadores obligaron a reducir y a la larga eliminar el programa, alegando que el subsidio distorsionaba el comercio. Sin los paquetes gratuitos, la producción decayó. Entre tanto, el FMI insistió en que el gobierno vendiera gran parte de sus reservas de granos para permitir que la dependencia encargada de las reservas pagara sus deudas comerciales. El gobierno cedió.

Cuando la crisis alimentaria dio lugar a la hambruna de 2001-02, ya no quedaban reservas. Unas mil 500 personas perecieron. El FMI no mostró arrepentimiento; de hecho, suspendió sus desembolsos de un programa de ajuste sobre la base de que “el sector paraestatal continuará representando riesgos a la exitosa aplicación del presupuesto 2002-03. Las intervenciones gubernamentales en los alimentos y otros mercados agrícolas desalientan otras inversiones más productivas”.

Para cuando se desarrolló una crisis aún peor, en 2005, el gobierno había tenido suficiente de la estupidez del BM y el FMI. Un nuevo presidente reanudó el subsidio para fertilizantes, permitiendo a 2 millones de familias comprarlo a la tercera parte de su precio al menudeo, y adquirir semillas con descuento. El resultado: cosechas abundantes durante dos años, un superávit de un millón de toneladas de maíz y la transformación del país en proveedor de grano al sur de África.

Hace 10 años, el desafío de Malawi al BM habría sido un acto de resistencia heroico, pero inútil. Hoy el entorno es diferente, porque el ajuste estructural ha ganado descrédito en toda África. Incluso algunos gobiernos y ONG donantes que solían apoyarlo se han distanciado del banco. Tal vez la motivación sea prevenir que su influencia en el continente se vea más erosionada al asociarlo con un enfoque fallido e instituciones impopulares en momentos en que la ayuda china fluye como alternativa al Banco Mundial, el FMI y los programas de ayuda de los gobiernos occidentales.

Soberanía alimentaria: ¿paradigma alternativo?

No sólo el desafío de gobiernos como el de Malawi y el disenso de antiguos aliados socavan al FMI y al BM. Organizaciones campesinas de todo el planeta se han vuelto cada vez más militantes en su resistencia a la globalización de la agricultura industrial. De hecho, la presión de los grupos campesinos ha llevado a los gobiernos del Sur a negarse a otorgar mayor acceso a sus mercados agrícolas y a exigir un cuantioso recorte a los subsidios agrícolas de Estados Unidos y la Unión Europea, lo cual condujo al estancamiento de las negociaciones de la ronda de Doha de la OMC.

Los grupos campesinos tienen ahora redes internacionales; una de las más dinámicas que han surgido es Vía Campesina, que no sólo busca “sacar a la OMC de la agricultura” y se opone al paradigma de una agricultura industrial globalizada, sino también propone la soberanía alimentaria como alternativa.

La soberanía alimentaria significa, en primer lugar, el derecho de una nación a determinar su producción y consumo de alimentos y la exclusión de la agricultura de regímenes de comercio global como el de la OMC. También significa consolidar una agricultura centrada en los pequeños productores protegiendo al mercado doméstico contra las importaciones baratas, fijando precios competitivos para campesinos y pescadores, suprimiendo todos los subsidios directos e indirectos y suspendiendo las subvenciones domésticas que promuevan una agricultura no sustentable.

La plataforma de Vía también demanda poner fin al régimen de derechos de propiedad intelectual relativos al comercio (TRIP, por sus siglas en inglés), que permite a las corporaciones patentar semillas; se opone a la agrotecnología basada en la ingeniería genética, y demanda una reforma agraria. En contraste con un monocultivo integrado global, Vía ofrece la visión de una economía agrícola internacional compuesta de diversas economías agrícolas nacionales que comercien entre sí, pero enfocadas sobre todo a la producción doméstica.

Alguna vez considerados reliquias de una era preindustrial, los campesinos encabezan ahora la oposición a una agricultura capitalista industrial que los enviaría al basurero de la historia. Se han vuelto lo que Karl Marx describió como una “clase para sí misma”, políticamente consciente, lo cual contradice sus predicciones de extinción. Con la crisis global de alimentos, se han colocado en el centro del escenario y cuentan con aliados y partidarios. Porque a la vez que los campesinos se niegan a desaparecer y luchan contra la descampesinación, los sucesos del siglo XXI revelan que la panacea de la agricultura industrial capitalista globalizada es una pesadilla.

Conforme se multiplican las crisis ambientales, se acumulan las disfunciones sociales de la vida urbana industrial y la agricultura industrializada crea mayor inseguridad alimentaria, el movimiento campesino cobra mayor relevancia no sólo para ese sector, sino para todos los que se ven amenazados por las consecuencias catastróficas de la visión capitalista global de organizar la producción, la comunidad y la vida misma.


* Walden Bello es analista y ex director ejecutivo del instituto de investigación y activismo Enfoque en el Sur Global, con sede en Bangkok.

Las exportaciones de petróleo en Irak llegan al máximo desde el inicio de la guerra

BAGDAD.- Irak elevó su producción y exportación de petróleo a su mayor nivel desde la invasión estadounidense en el 2003, informó el ministro de Petróleo iraquí.

"Las cifras de exportaciones en mayo superaron los 2 millones de barriles al día, y excedimos nuestro reporte previo y las cifras de producción," dijo a Reuters en una entrevista el ministro Hussein al-Shahristani.

"Los datos para abril y marzo fueron menores. En mayo superamos por primera vez la tasa de exportación de 2 millones de barriles diarios. En producción, superamos los 2,5 millones de barriles al día," indicó Shahristani.

El funcionario también sostuvo que Irak espera bombear entre 2,8 y 2,9 millones de barriles por día para finales del 2008.

Muere en París el modisto francés Yves Saint Laurent, nacido en Orán hace 71 años

PARÍS.- Yves Saint Laurent, uno de los más importantes modistos del siglo XX, que dio una nueva libertad a las mujeres al introducir en la moda el concepto de 'contemporaneidad' con emblemas como el traje sastre o el esmoquin, falleció anoche a la edad de 71 años, según la Fundación Bergé-Saint Laurent.

"Yves Saint Laurent falleció el domingo a las 23.10 horas", indicaron.

Nacido el 1 de agosto de 1936 en Orán (Argelia), Yves-Mathieu Saint Laurent conoció la gloria muy joven.

Llegado a París a la edad de 17 años, el dibujante de modelos se convirtió en 1954 en colaborador de Christian Dior, a quien sucedería tras su muerte en 1957.

Desde su primer desfile en 1958, el joven artista saborea las mieles del éxito con su línea 'Trapecia', que rompe con las cinturas de avispa de la época. En 1961, crea su propia casa en colaboración con Pierre Bergé.

Juntos, el uno como creador y el otro como gerente, construirán un imperio cuyo logotipo de tres letras negras entrelazadas sobre un fondo color crema dará la vuelta al mundo.

Modernizador del guardarropa femenino

Consciente de la época en la que vive, les dará a las mujeres una nueva libertad modernizando la alta costura y erigiéndose creador de un 'prêt-à-porter' que reinventa prendas clave del armario masculino: los chubasqueros, las saharianas, el traje pantalón, o el esmoquin serán algunos de sus conceptos más celebrados e imitados.

Gran aficionado de arte, a la ópera y al teatro, el modista buscará la inspiración para sus sucesivas colecciones en Picasso, Van Gogh, África, Rusia o en la literatura.

Sus propuestas no dejaban indemnes y tienen capacidad para causar sensación y crear escándalo a partes iguales, como la colección inspirada de los años 40 que presentó en 1971 o el lanzamiento del perfume 'Opium' en 1977.

En 2002, se despide de la alta costura con un desfile-retrospectiva de 40 años de creación en el Centro Pompidou de París.

Yves Saint Laurent coleccionó las recompensas y las retrospectivas, la última acaba de abrirse en Montreal (Quebec).

Adiós a un genio de la moda

El modisto francés Yves Saint-Laurent, uno de los nombres míticos de la alta costura, creció junto a sus dos hermanas con todas las comodidades propias de una buena familia asentada en la Argelia francesa. Su padre, abogado de cierto éxito, siempre quiso que Yves estudiara derecho y éste asistió a una escuela de Orán donde recibió una educación basada en una férrea disciplina que le afectó e influyó en su vida posterior.

Siempre se sintió muy unido a su madre, Lucienne, una mujer bella y elegante que fascinaba a Yves con sus constantes cambios de vestuario. Ella comprendió enseguida al sensible niño y cuando vio que los compañeros de clase se reían de su hijo porque vestía las muñecas de sus hermanas y las marionetas del teatro de la escuela, decidió buscar un centro de aprendizaje de confección y patronaje en París donde pudiera desarrollar todo su talento.

En pos del sueño

Fue éste un periodo de formación y también de dudas entre decidirse por el teatro o la moda, en que el adolescente Saint-Laurent devoraba Vogue y otras revistas especializadas, al tiempo que leía a Marcel Proust, su autor favorito. Finalmente, espoleado por su madre, se decidió a dar el salto, y el provinciano Yves fue a vivir solo a París con diecisiete años, dispuesto a aprenderlo todo sobre la alta costura.

Y pronto demostró que su empeño iba en serio. Mostró sus diseños a Michel de Brunhoff, director de Vogue, que resultó complacido y decidió publicarlos en su revista. Siguió los consejos de De Brunhoff y se matriculó en una escuela de alta costura, pero la encontró aburrida y poco tiempo después dejó de asistir a las clases. El impaciente aprendiz presentó a un concurso un esbozo para un vestido de cóctel y ganó el primer premio, hecho que le sirvió para darse a conocer entre la sociedad parisiense.

La creación de su propia firma

Mientras tanto, la casa Dior nombró director al asistente de Yves, Marc Bohan, lo que disgustó enormemente al modisto, que decidió demandar a la empresa. Ayudado por su inseparable amigo Bergé, Saint-Laurent presentó una demanda y peleó hasta recibir una indemnización de la empresa por daños morales y, con ese dinero y el de Mack Robinson, un hombre de negocios estaounidense interesado en la moda, creó su propia casa de costura.

En 1962 presentó una primera colección bajo su nombre y cuatro años después lanzó el esmoquín, que con el paso del tiempo se convirtió en un clásico. Con esta prenda y el resto de sus creaciones se erigió en el pionero de una moda más democrática, rápida y asequible, pensada para las nuevas generaciones.

Viste a las mejores estrellas del orbe

A mediados de los años sesenta se puso a trabajar en colecciones pensadas para la mujer madura y sofisticada. La actriz Elizabeth Taylor lució en su boda con Richard Burton un modelo de Saint-Laurent, y otras famosas, como Marlene Dietrich, Farah Diba, la duquesa de Windsor, Sofia Loren o Catherine Deneuve, también llevaron sus vestidos en alguna ocasión. Con la complicidad de su mejor amiga, Betty Catroux, Saint-Laurent creó un estilo andrógino con el que pretendió encontrar para la mujer el equivalente del traje de hombre.

Creador revolucionario

En 1970 sus desfiles destacaron por la presentación de la americana femenina y vestidos y blusas que dejaban la espalda al descubierto. Pero el hecho de que su colección "Estilo años 40" obtuviera muy malas críticas fue motivo suficiente para que Yves decidiera abandonar la moda durante los dos años siguientes. A principios de los años setenta hizo de modelo para su colección Rive Gauche de prêt-à-porter masculino, y llegó a posar desnudo ante la cámara de Jean-Loup Sieff para su perfume, algo inusual en aquellos tiempos.

Con la colaboración de sus dos mejores diseñadoras, Loulou de La Falaise y Anne-Marie Muñoz, en 1974 el modisto reapareció con una colección dedicada al Segundo Imperio y de nuevo escuchó aplausos. Ese año la revista Time lo denominó "Rey de la Moda" y le dedicó una portada. También ingresó varias veces en hospitales, de los que salía para volver a recaer, y ni siquiera el apoyo de su amigo Pierre pudo evitar que acabara cada vez más solo en su piso de París, o refugiado en la mansión que se había construido en Marrakech. Harto de esta situación, Bergé lo abandonó en 1976.

Sus miedos

En 1983, en el Metropolitan Museum de Nueva York, se inauguró una exposición dedicada a sus creaciones. Dos años después fue el Museo de Bellas Artes de Pekín el que hizo lo mismo, y en 1986 el Museo de la Moda de París presentó una retrospectiva del modisto desde 1958. El éxito de Saint-Laurent fue tal que a fines de los años ochenta la empresa creada más de veinte años atrás ya contaba con más de 10 mil personas que trabajaban en 200 países y facturaba unos 360 millones de euros.

Pese a que ya había sido distinguido con el galardón Oscar Neiman Marcus de la Costura (Dallas, 1958), o el Oscar Harper’s Bazaar (1966), a mediados de los años ochenta llegó el reconocimiento público a su labor y recibió la Legión de Honor de manos del presidente francés François Mitterrand. Sin embargo, Yves Saint-Laurent siguió padeciendo episodios de inseguridad y el miedo al fracaso lo llevaba a consumir tranquilizantes y somníferos.

Vida y Carrera

1936. 1 de agosto, nace en Orán, Argelia.

1953-54. Llega a París, donde muestra sus diseños al director de Vogue Michel de Brunhoff. Recibe clases en la Cámara Sindical de Alta Costura, gana un concurso. De Brunhoff presenta Yves Saint-Laurent a Christian Dior, que lo contrata.

1955-1957. asistente de Christian Dior.

1957. Es puesto al frente de la dirección artística de Dior, tras el repentino fallecimiento del diseñador, el 24 de octubre de 1957.

1958. Su primera colección "Trapecio", la cual termina con los años de cintura de avispa, es un éxito. Es galardonado con el Oscar Neiman Marcus de la Costura

1961. Crea su casa de costura Yves Saint Laurent, asociándose con Pierre Bergé.

1962. Se realiza el primer desfile de la casa de costura Yves Saint Laurent .

1964. Lanzamiento de "Y", primer perfume firmado por Saint Laurent.

1966. Crea el mítico diseño del primer esmoquin para mujeres y abre la primer boutique prêt-à-porter en París. Le otorgan el Oscar Harper’s Bazaar.

1968. Nace la chaqueta sahariana, versión Yves.

1971. La colección "40", es un escándalo. Yves posa desnudo para un anuncio publicitario sobre su perfume para hombre.

1974. La revista estadunidense Time lo cataloga como "El Rey de la Moda"

1981. Crea Yves Saint el uniforme de Marguerite Yourcenar para su entrada en la Academia francesa.

1982. Gana el International Award of the Council of Fashion Designers of America.

1983: El museo Metropolitan de Nueva York realiza una retrospectiva dedicada a sus creaciones

1986. Se efectúan otras exposiciones en Rusia y París.

1985. Le otorgan el "Oscar" al mejor modista por toda su obra en la Ópera de París. El entonces presidente francés, François Mitterrand, le hace entrega de la insignia de caballero de la Legión de Honor (promovido al grado de oficial en 1995 y al de gran oficial en 2007).

1998. Celebra sus 40 años de carrera. En el Stade de France 300 modelos desfilan sobre el césped del estadio de fUtbol antes del final de la Copa Mundial que disputan Francia y Brasil.

1998. Decide dedicarse exclusivamente a la alta costura. Dos jóvenes creadores toman el relevo en el prêt-à-porter

1999. La casa Gucci adquiere el prêt-à-porter y los perfumes. Y el 2 de junio recibe un premio a su carrera en Nueva York, concedido por el Council of Fashion Designers of America

2001. El presidente francés Jacques Chirac le otorga el grado de Comendador de la Legión de Honor.

2002. La casa de costura Yves Saint Laurent celebra sus 40 años el 22 de enero.

2004. La Fundación Pierre Bergé-Yves Saint Laurent abre con una exposición titulada "Yves Saint Laurent dialoga con el arte".

Renfe considera una reordenación de sus servicios nocturnos por la caída en su ocupación

MADRID.- Renfe considera que sus servicios de tráfico de viajeros nocturnos necesitan una "reordenación" ante la "cada vez menor" ocupación que registran, sobre todo desde la puesta en marcha de los nuevos AVE, y dado "los elevados costes" que presentan, según informó la operadora.

La compañía asegura que con el AVE "los ciudadanos se están decantando hacia un uso del tren diurno, con tiempos de viaje competitivos con el avión o el coche, y están abandonando paulatinamente los antiguos trenes nocturnos, que cada vez tienen más baja ocupación y más costes para las arcas del Estado".

Por ello, Renfe asegura que está abordando un "análisis en profundidad" de la demanda del ferrocarril que, según asegura, ha cambiado de "forma sustancial en España con la aparición del AVE, cuya utilización está siendo masiva".

No obstante, la operadora garantizó que "ninguna relación quedará sin servicio ferroviario" en virtud de dicho análisis, cuyo objetivo será "mejorar las relaciones donde la demanda de algunos trenes cae de forma estrepitosa sin que los ciudadanos perciban un empeoramiento de las condiciones de transporte".

En este sentido, la compañía recordó que ha invertido 150 millones de euros en un pedido de diez nuevos 'treneshotel', que destinará a cubrir relaciones nocturnas transversales.

Los nuevos trenes sólo dispondrán de dos tipos de plaza, butacas con asientos "superreclinables" y cabinas de camas con ducha, lo que, según destacó, supondrá un cambio "sustancial" respecto a la oferta actual.

En el replanteamiento de los servicios nocturnos se incluye el tren 'Estrella Costa Brava', que une Madrid y Barcelona, por la vía convencional.

Según Renfe, este servicio presenta una "bajísima ocupación" que cifra en un 20% y que "sigue cayendo desde la puesta en servicio del servicio AVE" el pasado mes de febrero.

"El tren Costa Brava continúa perdiendo viajeros, entre otras cosas, por la falta de atractivo de este producto, cuya competencia con los nuevos servicios ferroviarios es prácticamente imposible", argumentó la compañía.

"De hecho, en otras relaciones donde existen trenes AVE, los ciudadanos han ido abandonando paulatinamente los trenes más antiguos y la compañía se ha visto en la obligación de suprimirlos, ya que el coste del funcionamiento de esos servicios nocturnos es muy elevado", indicó la operadora.

Cuatro empresas internacionales se disputan parte del contrato argelino de Repsol y Gas Natural

ARGEL.- La empresa francesa Technip, la italo-japonesa Snamprojeti, la británica Petrofac y la indonesia IKP son las cuatro empresas internacionales precalificadas para disputarse el contrato de desarrollo de un tren de licuefacción de gas en la planta argelina de Arzew, concedido inicialmente a El Andalous, sociedad conjunta de Repsol, Gas Natural y Sonatrach.

El grupo argelino Sonatrach decidió buscar entre varias empresas internacionales la mejor oferta para suplir la actividad de El Andalous, que ha dejado de operar debido a las diferencias entre el grupo estatal y las españolas.

Mientras, la petrolera presidida por Antonio Brufau y la gasista presidida por Salvador Gabarró han elevado la cuantía de las indemnizaciones solicitadas ante el Tribunal Internacional de Arbitraje por la ruptura del acuerdo con el grupo argelino para el desarrollo de la planta de Gassi Touil.

El propio presidente de la compañía, Antonio Brufau, indicó recientemente que existen "costes de oportunidad e intangibles" que elevan la cuantía de las indeminizaciones solicitadas por las empresas españolas al grupo argelino.

La planta está valorada en cerca de 7.000 millones de dólares (4.500 millones de euros). A finales de diciembre, Sonatrach contrató a expertos europeos para evaluar el impacto de los retrasos. La duración estimada de esta labor es de seis meses y sobre sus conclusiones Sonatrach formulará sus exigencias de indemnizaciones.

Sonatrach cuenta con el asesoramiento del despacho de abogados Shearman & Sterling, mientras que Repsol y Gas Natural han confiado la defensa de sus argumentos al bufete francés Derains & Associés, así como a Uría Menéndez.

Sin contar la partida de lucro cesante, Repsol y Gas Natural calculan que su inversión ya ejecutada en el proyecto ronda los 200 millones de dólares (130 millones de euros) en cada caso. A estos 400 millones los litigantes añaden 24 millones de dólares (15 millones de euros) de la penalización en caso de parón contemplada en el contrato con Sonatrach.

De tener el cuenta el lucro cesante, las partes añaden la rentabilidad de un proyecto que hubiese procurado cerca de 9 bcm (miles de millones de metros cúbicos) de gas natural, y que estaba considerado uno de los más destacados de las compañías españolas en Argelia.

Hasta la fecha, las tres partes --Sonatrach, Repsol y Gas Natural-- exigían ante el Tribunal de Arbitraje de París indemnizaciones que, en conjunto, rondaban los 1.000 millones de dólares (640 millones de euros) en total.

Mientras, Sonatrach ha reiniciado la actividad en la planta gasista de Gassi Touil (en la imagen) con ayuda de la empresa estadounidense Schlumberger. La compañía argelina estima que cada día de parón en la construcción tiene un coste que ronda los 275.000 euros.

La industria india de automoción prevé crear unos 25 millones de empleos en 2016

NUEVA DELHI.- El sector automovilístico indio prevé alcanzar en 2016 una facturación de 145.000 millones de dólares (casi 100.000 millones de euros al cambio actual), lo que le permitiría aportar más del 10% al PIB del país (frente al 5,5% actual), y crear en el período unos 25 millones de empleos, que se sumarían a los 10,5 millones de puestos de trabajo que genera en la actualidad.

Según los datos que maneja la Sociedad India de Fabricantes de Automóvil, agrupación que representa a 38 constructores de vehículos e ingeniería automovilística en el país, los objetivos hasta 2016 se centran en emerger como destino mundial de diseño y fabricación de automóviles y componentes.

En el marco de un plan con el año 2016 como horizonte, a estos objetivos se une la intención de la Sociedad de mantener al sector en el segundo puesto mundial de fabricación de vehículos de dos ruedas -en la actualidad es líder en fabricación de motocicletas y tractores--, triplicar los puestos de trabajo y multiplicar por nueve las exportaciones, que en la actualidad alcanzan los 2.800 millones de dólares (1.800 millones de euros).

La industria automovilística india, según la información de la Sociedad, cifra en 33.400 millones de dólares (21.550 millones de euros) la facturación actual.

El sector registró un crecimiento del 40% de las exportaciones en los últimos cinco años y cuantifica en 15.000 millones de dólares (9.700 millones de euros) las nuevas inversiones, aspectos alcanzados, en parte, gracias al crecimiento económico del país, la "amplia oferta a precios competitivos", los cambios demográficos experimentados y el aumento de las necesidades de movilidad.

La producción del sector, que engloba compañías como Tata, BMW, Fiat, Mazda, Volvo, Yamaha, Toyota, Hindustan Motors, Hyundai o Mahindra Renault, se reparte entre un 76% para vehículos de dos ruedas, el 14% para turismos, y el 5% tanto para los vehículos comerciales, por un lado, y para vehículos de tres ruedas, por otro.

Los retos para mantener el crecimiento del sector en el mercado nacional se centran, según la Sociedad, en la bajada de los impuestos para reducir los costes de los propietarios, asegurar la competitividad de los precios, conseguir incentivos para la innovación en productos de bajo coste, "objetivo" de los consumidores de las clases más bajas, y trabajar en la preservación del medio ambiente a través del control del ruido y las emisiones para mejorar la calidad del aire.

Por ello, las recomendaciones establecidas en el propio Plan para mantener esta tendencia también a nivel internacional se centran en el apoyo inversor, el desarrollo de las infraestructuras, la incentivación para extender la demanda doméstica, el apoyo al desarrollo de los mercados internacionales y las exportaciones, la apuesta por la innovación, la internacionalización de las normas de seguridad y la mejora de la productividad y los recursos humanos.

El país, que contabiliza más de 91 millones de vehículos --el 74% de dos ruedas, el 14% correspondiente a comerciales, incluidos tractores, trailers y vehículos de tres ruedas, y el 12% de pasajeros--, es en la actualidad el quinto del mundo en comercialización de vehículos y el decimoprimero en fabricación de coches, con 1,5 millones de unidades.

No obstante y según los datos de la Sociedad de Fabricantes Indios de Automóvil, los ratios de vehículo por habitante en el país asiático son sensiblemente inferiores a los de otros países del mundo: los siete coches por cada mil habitantes que se contabilizan en India contrastan con los 550 de Alemania, los 495 de Francia, los 253 de Malasia o los 219 de Corea del Sur.

Lo mismo sucede en el caso de los vehículos de dos ruedas: 43 de cada 1.000 habitantes de la India cuentan con uno pero la cifra, en el caso de países como Tailandia, Malasia, Italia, Japón o España, alcanza los 286, 258, 166, 100 ó 90, respectivamente.

La densidad de vehículos de India es del 3,2 por kilómetro cuadrado frente al 209,6 de Alemania, el 159,2 de Taiwan, el 87,2 del Reino Unido o el 61,8 de Japón.

La evolución el sector en los últimos 30 años estuvo marcada por el cambio en la consideración de los vehículos, que en la década de los 70 eran considerados un "lujo", y por la progresiva pérdida de peso de las limitaciones en la expansión para, en la actualidad, experimentar un incremento en las exportaciones y centrar sus esfuerzos en la seguridad tras el "boom" que experimentó el mercado en el quinquenio 1995-2000.

(Sede de Tata Telco en Bombay, India)

Para el Santander, la evolución del petróleo podría mantener el IPC de la eurozona por encima del 3%

MADRID.- La incertidumbre en torno a la evolución de los precios de la energía, que pone en entredicho la perspectiva general de moderación de precios del crudo, provoca un deterioro en en el perfil de inflación previsto que impediría que la inflación de la zona euro se situara por debajo del 3% a finales de 2008, según Santander.

De acuerdo con un informe de la entidad, el banco presidido por Emilio Botín admite que esta incertidumbre sobre la evolución de los precios del crudo "pone en riesgo" la previsión de recortes de tipos por parte del Banco Central Europeo (BCE) en diciembre de 2008.

"La perspectiva de moderación de precios del crudo que generalmente se venía estimando queda en entredicho, por lo que para lo que resta de 2008, suponiendo que los precios del crudo mantienen un nivel medio de 120 dólares por barril hasta final de año, se produce un deterioro del perfil de inflación previsto que evitaría que la inflación se situara por debajo del 3% a fin de 2008", señala el documento.

En este sentido, el Santander señala que las condiciones del mercado del petróleo "siguen siendo muy tensas" y advierte de que "existen señales que sugieren que las tensiones pueden prolongarse".

En concreto, el banco apunta que la producción se encuentra "estancada" en un nivel similar al de 2005, un año de producción "anormalmente baja". Asimismo, la oferta se ha visto superada por la demanda, lo que provoca la "caída continuada de los 'stocks'".

Además, el informe indica que, pese a las revisiones a la baja de la demanda global efectuadas por la Agencia Internacional de la Energía (AIE), aún se espera un avance del 1,1% en 2008, hasta 87,2 millones de barriles diarios, con lo que si la producción continúa con su comportamiento reciente "se producirá un incremento del desequilibrio, saldado a costa de los 'stocks'".

El pasado viernes, la oficina comunitaria de estadística, Eurostat, informó de que el Índice de Precios de Consumo (IPC) preliminar de la eurozona aumentó tres décimas en mayo y se situó nuevamente en su máximo histórico del 3,6% interanual.

(Sede institucional en Madrid del Banco Santander)

Casi tres de cada cuatro trabajadores sufren estrés laboral y se sienten "quemados" con el trabajo

MADRID.- Tres de cada cuatro trabajadores, en concreto el 73%, sufren estrés en su ámbito laboral y tres cuartas partes de ellos tienen problemas de salud por culpa de esta situación, siendo las dolencias más habituales la fatiga, dolor de cuello y de cabeza, irritabilidad, sensación de agobio, insomnio, falta de concentración y dificultades oculares.

Así lo refleja un estudio del Observatorio de Riesgos Psicosociales de UGT, que analiza más de 4.000 puestos de trabajo en diferentes áreas de actividad, como la hostelería, el textil, la enseñanza, la atención primaria y especializada, la cerámica y la industria cárnica, entre otras.

Las situaciones de estrés laboral, muy extendidas entre la población ocupada, pueden deberse a diversos factores, entre los que se encuentran la falta de autonomía en el puesto de trabajo, inseguridad respecto a las condiciones laborales y al futuro e indefinición sobre las tareas a desarrollar.

El informe del sindicato revela además que siete de cada diez trabajadores "se sienten quemados" por su trabajo. Esta sensación se denomina síndrome de 'burnout' y está directamente relacionado tanto con factores físicos (cefaleas, dolores musculares, fatiga crónica, etc) y psicológicos (frustración, ansiedad, irritabilidad), como con aspectos organizativos (menor rendimiento, absentismo laboral).

Hablar a gritos, criticar la vida privada y ser amenazados, ignorados o asignados a lugares aislados son otras conductas que padecen algunos trabajadores en su lugar de trabajo y que pueden afectar a su salud.

Según este estudio, el 26% de los trabajadores se encuentran en riesgo de acoso, al desarrollar su actividad en un ambiente que califican de "hostigador". Un 2% de las personas entrevistadas son víctimas de acoso moral en el trabajo de manera permanente y un 15% reconocen haber sido víctimas puntuales.

Además, el 43% de los encuestados dicen haber sufrido abuso por parte de sus superiores y más de la mitad de las víctimas de acoso se quejan de haber recibido un comportamiento vejatorio mediante gritos. Este tipo de comportamientos puede provocar depresiones en los trabajadores y conducir, por tanto, a la baja laboral.

Dentro de los trabajadores entrevistados para el estudio que estaban de baja por depresión, el 35% se vieron sometidos a intimidaciones y amenazas, el 32% a acoso moral, el 26% a algún tipo de violencia verbal y el 23% sufrieron agresiones físicas.

La organización dirigida por Cándido Méndez denuncia que todos estos riesgos psicosociales se producen, principalmente, por una mala organización del trabajo y por un estilo de mando deficiente y en la mayoría de los casos, autoritario.

Además, las empresas no están preparadas para resolver estos conflictos, pues una de cada tres deja que el problema persista al retrasar la toma de decisiones. "El problema de fondo es que en las empresas siguen primando los intereses económicos a la satisfacción o el bienestar de sus trabajadores", concluye UGT.

Zapatero dice que toma medidas para paliar el alza de las hipotecas y garantizar financiación a las empresas

MADRID.- El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó que es "consciente" de que "un buen número de familias sufren en sus bolsillos" la subida del Euríbor, que se ha traducido en un incremento en el importe de las cuotas de sus hipotecas y dijo que el Gobierno toma medidas dirigidas a familias para garantizar su poder adquisitivo y a empresas para garantizar su financiación.

Zapatero, que reconoció en declaraciones a la Cadena Ser que él tiene una hipoteca sujeta a un tipo de interés "fijo", señaló que el Ejecutivo trabaja en "alguna medida para paliar" esta situación.

En este sentido, recordó que 15 millones de ciudadanos recibirán en sus nóminas de junio 200 euros, más otros 200 euros que cobrarán antes de que termine el año. "Son más de 5.000 millones de euros, que algo ayudarán", señaló Zapatero.

El presidente del Gobierno afirmó que esta cantidad también servirá para "estimular el consumo, dar confianza" y que las empresas mantengan su horizonte de inversión y de actividad porque eso es "conveniente para la economía". "No podemos hacer que las dificultades generen más dificultades", señaló.

En este sentido, Zapatero dijo que el Gobierno también está "muy atento" a las condiciones para que las empresas sigan financiando las grandes inversiones que han hecho y que "han permitido el crecimiento".

A su juicio, la liquidez "está difícil" y anunció que el Gobierno ha tomado alguna medida en este sentido a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO) y no descartó adoptar nuevas iniciativas si es necesario.

Zapatero apostó por acometer "ayudas indirectas" a los sectores más afectados por la "fuerte subida" del precio del petróleo, como el de la pesca o el transporte.

Por otro lado, Zapatero repasó algunos datos económicos "más tranquilizadores que otros", como el crédito, que sigue creciendo a dos dígitos, a pesar de que el año pasado repuntaba por encima del 20%.

Respecto a la evolución del empleo, dijo que hay una "caída fuerte pero que está muy concentrada en la Construcción", y citó que los servicios siguen creciendo al 2%, así como las afiliaciones a la seguridad social vinculadas a la agricultura.

El presidente aseguró que la producción industrial, que se conocerá en los próximos días, "no va a ser un mal dato", aunque manifestó que otros datos, "son un poco más preocupantes", como la inflación, que sube básicamente como consecuencia del petróleo.

Alemany entiende que Solbes huya del término crisis pero pide saber lo que "continuará pasando"

BARCELONA.- El presidente entrante del Círculo de Economía, Salvador Alemany, aseguró que entiende que el ministro de Economía, Pedro Solbes, se resista a hablar de crisis --Solbes dijo que era "exagerado" utilizar este término--, pero alertó de que "lo importante" es saber cuántas previsiones más a la baja se deberán realizar.

"Me interesa saber lo que continuará pasando", apostilló el también consejero delegado de Abertis.

Alemany, que tomó ayer posesión formal de la presidencia de la institución en sustitución de José Manuel Lara, explicó que más que los términos, los empresarios quieren saber cómo afronta el Gobierno la situación actual.

Según Alemany, no es de extrañar que el ministro Solbes rehuya el concepto crisis porque el Gobierno es consciente de que lanzar un mensaje pesimista podría acelerar o acentuar un clima negativo. "Podemos entender que el Gobierno lo matice", añadió.

Aún así, Alemany constató que el empresariado está viviendo la situación de menor crecimiento de manera "asimétrica". El elegido para liderar el Círculo en el nuevo mandato explicó que en la propia sala donde se celebran estos dos días las jornadas conviven empresarios que pasan por situaciones muy distintas.

EEUU no prevé solución inmediata al alza del crudo

DOHA.- El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Henry Paulson, dijo el domingo que "no hay solución inmediata" a los altos precios del crudo, y que sólo dependerán de la oferta y la demanda mundiales.

En momentos en que los precios han llegado a niveles máximos sin precedente, Paulson dijo que la demanda mundial sigue fuerte mientras "la capacidad de producción no ha sido desarrollada", agregó.

"No veo muchas alternativas a corto plazo", indicó.

Durante una conferencia de prensa en Qatar, una pequeña nación del Golfo Pérsico, Paulson señaló que la inflación en el Golfo Pérsico es "considerable" pero insinuó que no era la única razón el hecho de que las naciones de la región vinculen sus monedas al débil dólar. Agregó que se trataba de una "decisión soberana" que cada país decida si desea desvincularse del dólar.

Paulson reconoció también que la economía estadounidense experimentaba un "revés" y reiteró que un dólar fuerte beneficiaría a Estados Unidos.

El secretario del Tesoro visitó Medio Oriente para llevar un mensaje a los líderes de Arabia Saudí y a otros naciones productoras de petróleo sobre el hecho que los crecientes precios del crudo están presionando a la economía mundial.

Paulson ha instado a los países a que permitan inversiones en sus mercados petroleros a fin de que puedan acrecentar su exploración y producción.

Agregó que les gustaría ver "mayores inversiones en el crudo y el gas todo el mundo y fuentes alternativas de energía".

En un viaje a Medio Oriente a principios de mes, el presidente estadounidense George W. Bush no logró obtener la ayuda que deseaba para mitigar los altos precios petroleros.

Paulson se reunió con importantes políticos y altos ejecutivos financieros en Katar, un día después que visitó Arabia Saudí.

El ministro de finanzas saudí, Ibrahim al-Assaf, afirmó el sábado que su país no tiene intención de desvincular a su moneda con el debilitado dólar.

Wall Street espera cifras de empleo

NUEVA YORK.- Tranquilizada sobre la situación del consumo, la Bolsa de Nueva York va a esperar la semana próxima las cifras del empleo para intentar medir la vitalidad de la economía estadounidense.

"El empleo, el empleo, el empleo: he aquí el estribillo que van a tararear los inversionistas", declaró Rich Peterson, analista de Thomson Financial, en referencia a las cifras del mercado de trabajo de mayo, que deben ser publicadas el próximo viernes.

El mercado de trabajo, uno de los pilares de la economía estadounidense por su impacto sobre el consumo, perdió empleos en los últimos cinco meses, al hacerse eco de la degradación de la coyuntura económica.

Una reducción importante de los empleos reavivaría la posibilidad de una bajada suplementaria de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal (Fed), con el fin de relanzar la economía, estimaron ciertos analistas, a pesar de la multiplicación de los comentarios de dirigentes de la Fed que parecen excluir esta hipótesis.

Una nueva bajada de la tasa directriz contribuiría a debilitar el dólar todavía más y provocaría nuevos aumentos en los precios del oro y del petróleo, convertidos en un refugio contra la inflación. Este alza de los precios afectaría el consumo, que contribuye en más de dos tercios de la actividad económica estadounidense, ya que los hogares se verían forzados a restringir sus gastos a los bienes de primera necesidad, explicó Lindsey Piegza de FTN Financial.

El informe sobre el empleo del estudio privado ADP del miércoles dará una pista a los inversionistas, que también observarán la evolución del precio del petróleo, debido a la amenaza de una aceleración de la inflación.

Serán también publicadas la próxima semana las cifras de mayo del índice ISM que mide la actividad industrial (lunes) y servicios (martes) y además de los datos sobre la productividad (miércoles).

En la semana que termina Wall Street recuperó el optimismo después de una revisión al alza del Producto Interno Bruto (PIB) en el primer trimestre, de una ligera mejora en el sector inmobiliario y de nuevas pruebas de la resistencia del consumo.

Durante la semana, el índice principal Dow Jones Industrial Average ganó un 1,27%, para terminar el viernes en 12.638,32. El índice Nasdaq también ganó: un 3,19% en la semana, cerrando en 2.522,66 puntos. Por su parte, el S&P 500 avanzó un 1,77%, a 1.400,38 puntos.

En el mercado de obligaciones el rendimiento del bono del tesoro a 10 años, que evoluciona en sentido contrario del precio de las obligaciones, subió al 4,046%. contra el 3,831% del viernes anterior, y el bono a 30 años al 4,707%, contra el 4,557%.

El BCE cumple 10 años con un prestigio consolidado pese al recelo hacia el euro

FRANCFORT.- El Banco Central Europeo (BCE) cumple una década de existencia con el mérito de haberse labrado una reputación seria en los mercados financieros, pese a que su producto estrella, el euro, una moneda sin nacionalidad, no ha logrado hacerse querer.

El BCE nació el 1 de junio de 1998 con la misión de acompañar el estreno de la moneda única en los mercados, un paso de gigante para la construcción europea que se materializaría seis meses después.

El logro de pasar, sin gran dolor, a la moneda única europea, hoy en día compartida por 15 países a los que se sumará Eslovaquia probablemente a inicios de 2009, puede atribuirse en gran parte al "guardián del euro", con sede en Fráncfort, capital alemana de las finanzas.

Tras un inicio algo accidentado bajo el mando de su primer presidente, Wim Duisenberg, la joven institución aprendió a comunicar con los mercados. "La mejoría está más relacionada con un proceso de conocimiento mutuo entre el BCE y los mercados que con la transición", entre el holandés Duisenberg y el actual presidente, el francés Jean-Claude Trichet, indicó el jefe economista en Europa del Bank of America, Holger Schmieding.

El euro se ha impuesto por su parte como segunda moneda de reserva detrás del dólar estadounidense. Signo de confianza, empresas y Estados emiten cada vez más sus bonos en moneda europea y la circulación del euro es actualmente superior a la de los billetes verdes en el mundo.

Pero tanto débil frente al dólar, como en 2000, como fuerte hoy en día, el euro sigue sin hacerse querer. Difícil para muchos reconocerse en una moneda sin nacionalidad, surgida de una ambición mayor todavía en el aire, esto es, la unión política de Europa. Un reciente sondeo revela que uno de cada tres alemanes desearía un regreso al marco. Y más de la mitad continúa atribuyendo el encarecimiento de la vida a la divisa europea, una impresión ampliamente expandida en el Viejo Continente.

Cargar contra el BCE, el único responsable de facto del euro, se ha vuelto una tentación difícil de evitar. Francia e Italia no han cesado de criticar la política de la institución desde su nacimiento con el empeño de reducir su independencia, contemplada empero en el Tratado de Maastricht. Le reprochan preocuparse únicamente de la lucha contra la inflación -su primera misión, según el Tratado- sin tener en cuenta las consecuencias sobre el crecimiento y el empleo.

"Es algo problemático, estos comentarios políticos constantes. Esto complica la tarea del BCE", juzga Stefan Gerlach, profesor del Instituto para la Estabilidad Financiera y Monetaria, dependiente de la Universidad de Fráncfort.

Gerlach pone el siguiente ejemplo: si un responsable político pide públicamente al BCE que rebaje las tasas de interés, aunque éste tenga previsto un gesto en este sentido, no podrá hacerlo sin dar la impresión de ceder a las exigencias políticas, lo que perjudicaría su credibilidad.

Tratar de comunicar directamente con el público para contrarrestar las presiones políticas no aportaría gran cosa, defiende este profesor. "Un buen banco central debe permanecer silencioso, en un segundo plano, y trabajar correctamente". Es esencial que "inspire confianza", destaca.

Pero la labor del BCE también pasa por cumplir con sus promesas. Y desde este punto de vista, ha fracasado, según Gerlach, puesto que no ha logrado mantener durante su existencia una media ligeramente por debajo del 2% de la inflación. "Para el BCE, la ambición de los próximos diez años debe ser atenerse" a este objetivo, estima el profesor.

Un verdadero desafío, habida cuenta de la creciente tendencia inflacionista, resultante del alza de los precios de los alimentos y de las materias primas en el mundo, contra la cual el BCE no puede hacer nada.

Los pescadores catalanes deciden levantar la huelga

BARCELONA.- Los pequeños pescadores de Cataluña dedicieron levantar a partir del lunes la huelga ilimitada iniciada el viernes contra el aumento de los combustibles, anunció este domingo el líder del gremio.

La decisión, adoptada el sábado, se debe al hecho de que "el 90% de las flotas quieren seguir trabajando", explicó el presidente de la Federación de Cooperativas de Pesca de Cataluña, Vicenç Balaguer, en declaraciones recogidas en el portal Internet de la Cadena Ser.

Los pescadores catalanes iniciaron la semana pasada una huelga que el viernes se extendió a toda España, para reclamar medidas contra el alza incesante de los precios del gasóleo.

La decisión de volver al trabajo no era unánime entre los pescadores catalanes, especialmente entre los de los puertos de Barcelona, Vilanova y Puerto de la Selva, que fueron los primeros en declararse en huelga el lunes y el martes, según algunos medios españoles.

(Flota pesquera de Port Lligat, Cadaqués, Gerona, España)

Crisis económica: la mirada de un historiador / Robert Brenner *

La agitación que se observa en Gran Bretaña y EE.UU. en el préstamo hipotecario y en la banca parece contenida, pero el futuro de la misma sigue siendo más que dudoso. Si, como vienen diciendo desde hace tiempo los funcionarios veteranos, los elementos fundamentales de la economía son robustos, los miedos ante el impacto de la crisis deberían irse apaciguando. Pero ¿es así?

Las alegres embestidas de los 80, los 90 y la primera mitad de la presente década, con sus transferencias de renta al 1% más rico de la población, han eclipsado la realidad económica básica del debilitamiento en el largo plazo de las economías capitalistas avanzadas. El rendimiento económico de los EEUU, Europa occidental y Japón, medido con prácticamente todos los indicadores posibles –volumen de producción, inversión, empleo y salarios—, no ha hecho sino deteriorarse, década tras década, ciclo económico tras ciclo económico, desde comienzos de los 70.

Los años transcurridos desde que empezara el actual ciclo a comienzos de 2001 han sido los peores: en EEUU, el crecimiento del PIB y del empleo ha sido el más lento desde fines de los años 40, y los salarios reales por hora trabajada no han hecho, para el 80% de la población, sino retroceder al nivel de 1979.

El descenso del dinamismo de las economías capitalistas avanzadas arraiga en una caída importante de la tasa de beneficios, caída causada por una tendencia crónica a la sobrecapacidad en la industria manufacturera global, que se remonta a finales de los 60. Las reducidas tasas de beneficios han llevado, desde los 70, a un continuo declive de la tasa de inversión como porción del PIB, así como a paulatinas reducciones del crecimiento del stock de capital y del empleo.

Esa desaceleración de la acumulación de capital, sumada a la presión granempresarial para restaurar sus tasas de retorno manteniendo bajos los salarios, ha reducido la demanda agregada; una debilidad que viene a constituir desde tiempos inveterados el principal obstáculo atravesado en el camino del crecimiento de las economías avanzadas.

Los gobiernos, con el de los EEUU en cabeza, han emitido volúmenes cada vez mayores de deuda, a través de canales cada vez más barrocos, para subsidiar el poder de compra. En los 70 y en los 80 incurrieron en déficit cada vez más grandes, a fin de sostener el crecimiento. Desde mediados de los 90, empero, tuvieron que recurrir a formas más drásticas y más arriesgadas de estímulo para contrarrestar la tendencia al estancamiento, substituyendo los déficit públicos del keynesianismo tradicional por los déficit privados y la inflación de activos, en lo que bien podría llamarse un keynesianismo de precios de activos, o, con igual pertinencia, una política económica de la burbuja.

A despecho de sus protestas en contrario, fue Alan Greenspan, y nadie más, quien lanzó el experimento macroeconómico que alimentó la gran carrera especulativa de los mercados de valores a fines de los 90, tras el fracaso de los intentos de la administración Clinton y de la UE por arrancar a la economía de su dependencia del crédito mediante ajustes presupuestarios de impronta neoliberal.

Esos intentos naufragaron frente a las hondas recesiones en Europa y en Japón, frente la recuperación sin creación de empleo en los EEUU y frente a la crisis del peso mexicano. En la medida en que las corporaciones empresariales y los hogares ricos comenzaron a disfrutar de su creciente riqueza sobre el papel, se embarcaron en un aumento sin precedentes de endeudamiento, lo que estuvo en la base de una potente expansión de la inversión y del consumo, el malhadado boom de la “nueva economía”.

Sin embargo, el incremento de los precios de los valores, a despecho de unas tasas de beneficio declinantes y de la escalada de sobrecapacidad resultante de una inversión acelerada, provocó el crac y la recesión de 2000-2001.

Imperturbables, los bancos centrales recurrieron de nuevo a la inflación de los precios de los activos. Reduciendo las tasas de interés real a corto plazo a cero durante tres años, facilitaron una explosión del préstamo hipotecario en el mercado inmobiliario que, a su vez, contribuyó a –e incentivó— que se dispararan los precios de las viviendas. La riqueza inmobiliaria así inflada permitió un incremento en el gasto de consumo, el cual, a su vez, dio fuelle a la expansión.

El consumo personal, sumado a la inversión en vivienda, representó el 90-100% del crecimiento del PIB en los primeros cinco años del presente ciclo. Sin embargo, el sólo sector de la vivienda es responsable del crecimiento del PIB en más de un 40%, lo que contribuyó a obscurecer la debilidad de la recuperación.

El incremento de la demanda resucitó a la economía. Pero, aunque los consumidores hicieron su tarea, no puede decirse lo mismo del mundo de los negocios, a pesar del incentivo que significaban unos préstamos inmobiliarios sin precedentes.

Centradas en restaurar sus tasas de beneficio, las grandes empresas desencadenaron una brutal ofensiva contra los trabajadores. Incrementaron el crecimiento de la productividad, no tanto con inversiones en equipo, como por la vía del recorte del empleo y de obligar a los empleados a cargar con los costes de los períodos de poca actividad. Mantuvieron bajos los salarios, al tiempo que lograban exprimir más rendimiento de cada persona, lo que les permitió apropiarse de una porción sin precedentes del incremento que de ello resultó en el PIB no-financiero.

Las corporaciones empresariales no-financieras, así pues, aumentaron sus tasas de beneficio significativamente, aun cuando ni siquiera a los niveles ya rebajados de los 90. Pero al mantener en bajos niveles la creación de empleo, la inversión y los salarios, mantuvieron bajo también el crecimiento de la demanda agregada, socavando así su propio incentivo para expandirse.

Lo que hicieron, en cambio, en vez de aumentar la inversión y crear más empleo, fue explotar las ventajas del crédito barato y dedicar una parte sin precedentes de sus recursos a la recompra de sus propias acciones, a la financiación de fusiones y adquisiciones de otras empresas y a pagar dividendos a los accionistas.

Con ese trasfondo de debilidad de los fundamentos de la economía productiva real, la crisis desencadenada por el colapso del mercado de hipotecas de alto riesgo resulta extremadamente amenazante. Ben Bernanke –que sustituyó a Greenspan como presidente de la Reserva federal de EEUU— tiene, pues, pocas opciones, aparte de seguir rebajando el coste de los préstamos.

La deflación de la burbuja inmobiliaria desde 2005 –su momento culminante— venía ya ejerciendo presión sobre el gasto del consumidor y sobre la construcción de vivienda, un problema que no hará verosímilmente más que empeorar, a medida que las ventas y los precios de las viviendas se desplomen.

Además, a la vista de la débil respuesta que han dado a uno de los paquetes de estímulos más imponentes de la historia, difícilmente puede esperarse que las corporaciones empresariales aflojen: de hecho, empezaron a reducir el crecimiento del empleo antes incluso de que la crisis financiera estallara.

Hay, además, razones para dudar de la eficacia de los tipos reducidos de la Fed. ¿Cómo habrían de lanzarse al consumo los consumidores, si los precios en declive de sus viviendas inducen al ahorro, no al consumo? El boom estimulado por el consumo parece destinado a su fin.

¿O acaso la bajada del dólar, que ha de ir de consuno con los movimientos de la Fed, no forzará un alza en los tipos de interés a largo plazo, con la consiguiente amenaza de rebajar los precios de los activos y estorbar el crecimiento económico? ¿Cómo puede la rebaja de costes de los préstamos reducir las masivas pérdidas en títulos hipotecarios que tienen inexorablemente que resultar del maremoto de morosidad que no ha hecho sino comenzar?

No ofrece duda: se avecinan duros tiempos; el final de la expansión puede venir acompañado de llanto y crujir de dientes.

*Robert Brenner es director del Center for Social Theory and Comparative History en la Universidad de California-Los Ángeles.

Kodak subirá sus precios hasta en un 20% por la inflación

SAN FRANCISCO.- El fabricante estadounidense de productos fotográficos Kodak dijo que subirá los precios de algunos de sus productos hasta en un 20%, debido a un alza de los costes de la energía y de las materias primas como la plata y el aluminio.

El anuncio de Kodak ha sido la señal más fuerte de que las empresas estadounidenses están comenzando a responder a la inflación traspasando los costes a los consumidores.

Dow Chemical, el principal fabricante de químicos en Estados Unidos, podría subir el próximo mes los precios de sus productos hasta en un 20 por ciento a raíz de los aumentos de los costes energéticos.

Kodak dijo que el alza afectaría los precios de algunos de sus productos en todo el mundo, pero no dio más detalles.

"Los aumentos son el resultado de los elevados precios de materias primas clave, en especial de la plata y del aluminio, y también al alza del coste del petróleo", dijo Kodak en un comunicado.

Kodak dijo que espera que las alzas tengan efecto el 1 de julio, y que se introduzcan paulatinamente por grupos productivos y por zonas geográficas durante las siguientes semanas.

España resultará menos afectada por la previsible veda de atún rojo

BRUSELAS.- La amenaza de la Comisión Europea de imponer una veda adelantada para la pesca del atún rojo en aguas comunitarias a partir de junio no afectaría tanto a España, la gran potencia pesquera de la Unión Europea con mayor presencia de artes tradicionales de pesca.

Bruselas ya anunció que se está a punto de superar ya el máximo de Total Admitido de Capturas (TAC) y que cuando eso suceda, previsiblemente dentro pocos días, se decretará la prohibición de pescar atún rojo.

Sin embargo, se espera que esta prohibición no sea total y que afecte sólo a los grandes barcos cerqueros de pesca industrial, con lo que quedarían excluidos los sistemas tradicionales, como las almadrabas del Golfo de Cádiz y los palangres del Cantábrico.

De esta manera, España sería el único país dentro de los tres gigantes dedicados a la pesca del atún rojo del Mediterráneo (Francia e Italia son los dos restantes), que, aún viendo mermadas sus posibilidades, podría continuar con unos niveles importantes de capturas.

De las 16.210 toneladas anuales de atún rojo que la UE tiene permitido pescar en aguas del Mediterráneo y el Atlántico oriental, a España le corresponden 5.428 toneladas, repartiéndose el resto, fundamentalmente, entre Francia e Italia, aunque también en menor medida Grecia, Chipre, Malta y Portugal.

Lo que perjudicaría menos a España en esta ocasión es que, mientras que el resto de Estados socios (básicamente Francia e Italia) obtienen casi el 60% de sus cuotas de atún rojo con artes de cerco (a las que se dirigiría la veda), según cifras de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (CICAA), en España este porcentaje se eleva a menos de la mitad.

De acuerdo con datos del ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, en términos comparativos con el resto de países, en España sólo el 28,4% de las 5.378 toneladas asignadas se pescan con los gigantes barcos cerqueros.

En concreto, España utiliza únicamente seis embarcaciones de cerco, fondeadas en el puerto de L'Ametlla de Mar (Tarragona), en comparación con las 67 embarcaciones de Italia y las 36 de Francia.

En España aún se mantienen privilegiados los sistemas tradicionales de pesca del atún rojo, de captura manual y pieza a pieza, hasta el punto de que este tipo de artes acumulan el 71,6% del TAC de las 5.378 toneladas otorgadas.

La zona del Golfo de Cádiz es de las que concentra los mayores esfuerzos, en términos cuantitativos, por conservar los sistemas tradicionales y de desarrollo sostenible de pesca. Las cuatro almadrabas gaditanas, localizadas en las localidades de Tarifa, Zahara de los Atunes, Barbate y Conil, suponen el 26,35% de la pesca total de atún rojo en España, es decir, 1.417 toneladas.

La otra gran zona de pesca tradicional es la de los palangreros del Cantábrico, que acumula también más del 20% del TAC español de atún rojo.

Sin embargo, los mayores peligros para España en la pesca del atún rojo no derivan de la veda que imponga Bruselas, sino de la sobreexplotación a que está sometido el caladero, de la que los científicos culpan sobre todo a italianos y franceses, además de la actividad de las granjas de engorde.

"Los atunes rojos llegan al Mediterráneo a desovar desde aguas del Atlántico, para emprender luego rumbo hacia el Cantábrico y proseguir a las aguas más frías del Mar del Norte y Noruega. Pero la pesca de cerco, la picaresca pesquera de los barcos nodriza y la actividad de las granjas ha roto este ciclo", dijo en ese sentido Sebastián Losada, responsable de Greenpeace.

"Todas estas actividades impiden que los atunes puedan madurar y reproducirse, lo que conlleva que tampoco a los pescadores españoles de artes tradicionales les lleguen los atunes maduros", agregó.