PARÍS/BERLÍN.- La economía francesa, la segunda mayor de la zona euro, retrocedió un
6% en el primer trimestre de 2020 como consecuencia del impacto de la
pandemia de Covid-19 y de las medidas de contención implementadas, lo
que supondría el peor dato de evolución del PIB desde la II Guerra
Mundial y similar al registrado durante mayo del 68, según ha reconocido
el gobernador del Banco de Francia, François Villeroy de Galhau, quien
ha estimado que cada quincena de confinamiento resta 1,5 puntos al
crecimiento anual.
En una entrevista con la emisora RTL
Villeroy de Galhau ha señalado que la economía francesa ha perdido en el
primer trimestre alrededor de un tercio de su nivel de actividad.
“”Esto corresponde a un crecimiento del -6% durante el trimestre, cada
quincena nos cuesta el 1,5% del PIB anual y un 1% más de déficit
público”, ha estimado.
En este sentido, el banquero central galo ha señalado que para
encontrar un impacto semejante al de esta crisis habría que remontarse
hasta “mayo de 1968”, cuando durante varias semanas la economía francesa
permaneció cerrada por las protestas.
“En el segundo trimestre, el PIB
cayó más del 5%, algo que está cerca de lo que estamos experimentando
hoy”, dijo el gobernador del Banco de Francia.
De este modo, Villeroy de Galhau ha anticipado un crecimiento muy
negativo de Francia en 2020, aunque ha expresado su confianza en que
“debería ser positivo en 2021”, destacando que para ello se está
“ayudando a los empresarios y sus empleados, con el fin de estar en
condiciones de comenzar más rápido el crecimiento cuando acaben las
medidas de contención “.
A este respecto, el banquero ha destacado que el país galo cuenta con
el sistema de desempleo más generoso de Europa, “afortunadamente el
modelo social y europeo está ahí y funciona”, mientras que ha recordado
que, por el contrario, EEUU ha registrado 10 millones de nuevos parados
en apenas 15 días.
Por su parte, el PIB de Alemania registrará en 2020 una contracción
del 4,2% como consecuencia del impacto de la pandemia de Covid-19 y de
las medidas de contención implementadas, que arrastrarán a la economía
germana en el segundo trimestre a una caída histórica del 9,8%, la más
profunda de toda la serie histórica y más del doble del hundimiento
contabilizado en el primer trimestre de 2009, el peor de la Gran
Recesión en el país, según los pronósticos de los principales institutos
germanos de investigación económica.
De cara a 2021, los cinco institutos (IFO de Munich, DIW de Berlín,
IfW de Kiel, IWH de Halle y RWI de Essen) anticipan un fuerte rebote del
PIB de Alemania, con un crecimiento del 5,8%, aunque advierten de que
sus previsiones cuentan “con considerables riesgos a la baja asociados”.
Según las nuevas estimaciones de los académicos, el PIB alemán habría
registrado una caída del 1,9% en el primer trimestre de 2020, que se
agravará entre abril y junio hasta un desplome del 9,8% como
consecuencia de las medidas de confinamiento aplicadas para contener la
propagación del virus, lo que supone la mayor contracción trimestral de
la economía germana desde que en 1970 comenzaron a recopilarse datos.
Los expertos anticipan un fuerte repunte del desempleo, con un
incremento de 236.000 parados respecto de 2019, hasta los 2,5 millones,
lo que supondría una tasa de paro del 5,5%, medio punto porcentual más
que el año pasado.
Asimismo, las cuentas públicas de la mayor economía europea sufrirán
el impacto de la recesión y de las medidas de estímulo anunciadas, lo
que se traducirá en que Alemania cerrará el año con un déficit del 4,7%
de su PIB, frente al superávit del 1,4% de 2019. Sería el primer
desequilibrio negativo del presupuesto alemán desde 2011.
“Alemania se encuentra en una buena posición para hacer frente al
desplome económico y regresar a medio plazo a los niveles que habría
alcanzado sin la crisis”, ha destacado el jefe de previsiones económicas
del Investigación Económica de Múnich (Ifo), Timo Wollmershäuser, para
quien la favorable situación de las finanzas públicas permite a Berlín
implementar medidas de largo alcance para amortiguar el impacto de la
crisis en las empresas y familias.
De este modo, el experto anticipa un déficit presupuestario récord de
159.000 millones de euros al cierre de 2020, con un fuerte incremento
de la ratio de deuda pública hasta el 70% del PIB.
De cara a 2021, los cinco institutos confían que el PIB de Alemania
rebotará con fuerza, con una expansión del 5,8%, lo que permitirá
reducir el desempleo nuevamente, hasta una tasa de paro del 5,3%, y
equilibrar los presupuestos, regresando así el próximo año al ‘cero
negro’.
No obstante, advierten de los considerables riesgos a la baja de
estas previsiones, ya que la pandemia podría tardar más de lo esperado
en ser controlada y los esfuerzos para reactivar la economía resultar
menor eficaces de lo previsto, sin descartar que sean necesarias en el
futuro medidas de contención adicionales, que podrían dar como resultado
más cierres e interrupciones de la producción, aumentando la
probabilidad de distorsiones financieras y y quiebras empresariales más allá de la capacidad de apoyo del Estado.
quiebras empresariales más
allá de la capacidad de apoy