NUEVA YORK.- En su primera aparición pública desde que se desató la guerra entre Israel y Hamas
a principios de octubre, la palestina Rania de Jordania criticó en una entrevista el
"doble rasero" de los países occidentales en su apoyo a los bombardeos
del Ejército israelí en la Franja de Gaza. "La gente de todo Oriente
Próximo, incluida Jordania, estamos conmocionados y decepcionados por la
reacción mundial ante esta catástrofe que se está desarrollando. "En las
últimas semanas hemos visto un flagrante doble rasero en el mundo",
declaró Rania en una entrevista exclusiva en la emisora CNN. La monarca
incidió en la cuestión humanitaria en Gaza, donde los bombardeos
israelíes han causado la muerte de 6.546 civiles, entre ellos 2.704
niños, según datos el ministerio de Salud gazatí.
"Es la primera vez en
la historia moderna que hay tal sufrimiento humano y el mundo ni
siquiera pide un alto el fuego", señaló Rania. "El silencio
ensordecedor, para muchos en nuestra región, convierte al mundo
occidental en cómplice", añadió.
Jordania mantiene una relación estable con Israel desde
que reconoció el Estado en 1994. Sin embargo, después de que Israel
declarara el "asedio completo" de Gaza, Amán se ha convertido en una de
las voces más críticas de la región, que pide el cese de las
hostilidades por temor a un gran desplazamiento de la población
palestina.
El rey Abdulá de Jordania ha reiterado que el reasentamiento
de refugiados palestinos a Jordania y Egipto es "una línea roja" y que
no está dispuesto a aceptar población desplazada, por temor a que no
puedan regresar a los territorios palestinos, como ha ocurrido con
guerras anteriores.
Rania denunció que los territorios palestinos viven
sometidos en un "régimen de apartheid" como han señalado organizaciones
internacionales. "Básicamente, se les da a elegir entre la expulsión o
el exterminio, entre la limpieza étnica y el genocidio. A ningún pueblo
se le debería dar, ningún pueblo debería enfrentarse a este tipo de
elección", señaló.
"El pueblo de Gaza no debería verse obligado a ser
trasladado de nuevo", señaló, en referencia a la presencia en la Franja
de refugiados palestinos de otros territorios, que han sido obligados
por Israel a desplazarse hacia el sur del territorio, ante la inminente
incursión terrestre del Ejército.
Rania
de Jordania suscribió las palabras de su marido, que señaló en una
cumbre la semana pasada que las vidas de los palestinos y de los árabes
de la región "importan menos que las israelíes" para
los países occidentales.
"Cuando ocurrió lo del 7 de octubre, el mundo
se puso inmediatamente al lado de Israel y de su derecho a defenderse y
condenó el ataque", señaló, en alusión a la ofensiva sorpresa de Hamás
en Israel, que causó la muerte de 1.400 israelíes. Y añadió: "Pero lo
que estamos viendo en las dos últimas semanas... estamos viendo el
silencio del mundo", denunció.
La monarca incidió en los bombardeos
israelíes, que han causado la muerte de "niños, médicos, trabajadores de
la ONU, periodistas".
"Nos están diciendo que está mal matar a una
familia a punta de pistola, pero que está bien bombardearlos hasta la
muerte", lamentó, tras describir la situación de muchas familias en
Gaza, que escriben el nombre de sus hijos en los cuerpos para que puedan
ser identificados en caso de morir en un bombardeo.
"Como madre, quiero
recordar al mundo que las madres palestinas aman a sus hijos tanto como
cualquier otra madre en el mundo", describió la reina de Jordania, que
es también de origen palestino.
Durante la entrevista, la emisora CNN le preguntó si condenaba los ataques de Hamas. Rania condenó el asesinato de civiles, pero cuestionó el apoyo de algunos gobiernos a Israel para defenderse,
mientras que se critica el derecho de los palestinos a la resistencia.
"Uno es un ocupante, el otro es un ocupado, uno tiene un ejército, uno
de los ejércitos más poderosos del mundo. El otro no tiene ningún
ejército. Así se dibuja esta falsa simetría", describió.
La reina de
Jordania recordó que el Estado israelí ha violado "treinta resoluciones
de seguridad de la ONU" que exigen que se "retire de los territorios
ocupado de 1967", en referencia a Cisjordania y Jerusalén Oriental.