viernes, 15 de septiembre de 2023

La Oposición británica abre la puerta a un acuerdo de inmigración con la UE


 LONDRES/LA HAYA.- El líder de la oposición laborista Keir Starmer ha iniciado una ofensiva dipomática participando en una reunión de la Europol y anticipando su disposición a sellar un acuerdo de inmigración con la UE si llega a primer ministro. En plena cuenta atrás para las elecciones generales en el 2024, el Partido Laborista aventaja al Partido Conservador por 18 puntos mientras que Rishi Sunak ha tocado fondo en las encuestas: el 67% de los británicos tiene una opinión "desfavorable" del "premier", frente al 26% con una visión "positiva".

Starmer ha aprovechado el viento a favor en los sondeos para proyectar su imagen de futuro "premier" con una primera parada en La Haya, seguida de un encuentro en Francia con Emmanuel Macron y un salto al otro lado del Atlántico, con una posible visita al presidente Joe Biden.

Su estreno en el cónclave del Europol ha tenido un alcance simbólico, pues el Reino Unido perdió su asiento en el organismo de seguridad europeo tras el Brexit (aunque sus representantes pueden asistir para facilitar cooperación). La salida de la UE supuso también la pérdida del acceso a las bases de datos que, en opinión de Starmer, podrían ser útiles para combatir la inmigración ilegal en el Reino Unido.

Sus planes de colaboración con la UE han sido interpretados por los medios conservadores como un deseo expreso de dar marcha atrás al Brexit y a la política de "recuperar el control" de las fronteras. El propio Starmer, partidario en su día de la permanencia, matizó sus declaraciones en La Haya ante las cámaras de la ITV...

"Hemos salido de la Unión Europea. No se trata de volver a la UE, ni de integrarnos en el mercado único o en la unión aduanera, ni de volver a la libertad de movimientos. He dejado claro cuáles son nuestros parámetros".

"Pero no acepto que esto nos impida trabajar con otras unidades de policía europeas y con los fiscales para aplastar a las bandas de tráfico humano", matizó el líder laborista de 61 años, recalcando su propio bagaje al frente de la Oficina del Fiscal General entre el 2008 y el 2013.

Starmer criticó duramente el fiasco de la política migratoria de Rishi Sunak y recordó cómo más de 40.000 inmigrantes han cruzado en botes el Canal de la Mancha desde que la controvertida Suella Braverman fue nombrada secretaria de Interior. 

Starmer anticipó que un hipotético gobierno laborista equipararía a las bandas de tráfico humano con los "terroristas", pero al mismo tiempo potenciaría una mayor colaboración en materia de inmigración y seguridad con la UE.

Según fuentes del Partido Laborista, citadas por The Daily Telegraph y The Daily Mail, Starmer estaría dispuesto a asumir el "reparto de la carga" de inmigrantes de los 27, lo que podría suponer "más de 120.000 aspirantes al derecho de asilo del millón que llegaron al territorio de la UE el año pasado".

El Reino Unido ha batido en el 2023 su propio récord, con 215.000 casos pendientes de la solicitud de asilo. Todos los intentos de los sucesivos Gobiernos "tories" se han estrellado contra la oleada de inmigrantes "irregulares" que hicieron la travesía en botes en el Canal de la Mancha (la mayoría albaneses, iraníes y afganos) en los tres últimos años.

Starmer ha anticipado que, si llega a primer ministro, dejaría automáticamente sin efecto el plan de deportaciones a Ruanda, paralizado sucesivamente por los tribunales, El líder laborista ha confirmado también su intención de impulsar la suspensión de la ley de inmigración ilegal recién aprobada por el Parlamento británico a instancias del Gobierno de Rishi Sunak.

El Papa Francisco, Tony Blair y el director general de Pfizer, Albert Bourla, participan en un acto de la Fundación Clinton para promover el globalismo

CIUDAD DEL VATICANO.- La Fundación Clinton ha anunciado esta semana que el Papa Francisco participará en la "Iniciativa Global Clinton" anual de la organización benéfica entre el 18 y el 19 de septiembre de la próxima semana, y se espera que el pontífice debata diversos temas, como el cambio climático, la crisis migratoria, el bienestar infantil y proyectos relacionados con hospitales infantiles, junto con el expresidente de los Estados Unidos Bill Clinton.

El Papa Francisco será una de las numerosas personalidades influyentes que participarán en el evento anual, junto con el ex Primer Ministro británico Tony Blair, la Secretaria del Interior de Estados Unidos Deb Haaland, el Gobernador de California Gavin Newsom, el Consejero Delegado de Pfizer Albert Bourla, la ex Secretaria de Prensa de la Casa Blanca Jen Psaki, la Secretaria del Tesoro de Estados Unidos Janet Yellen, entre muchos otros.

El CGI fue creado por los Clinton en 2005 y pretende reunir a "líderes mundiales para crear y aplicar soluciones a los retos más acuciantes del mundo, como el cambio climático, el crecimiento económico integrador y la equidad sanitaria".

El Papa Francisco ha sido cada vez más elocuente durante su pontificado, como cuando recientemente sugirió que los conservadores católicos estadounidenses son "retrógrados", además de hacer un llamamiento a la "gobernanza global" durante la pandemia del COVID-19.

Las 16 razones reales por las que mataron a Gadafi


1. Libia no tenía factura de electricidad, la electricidad era gratuita para todos los ciudadanos.

2. No había tipos de interés para los préstamos, los bancos eran de propiedad estatal y los préstamos a los ciudadanos, por ley, eran del 0%.

3. Gadafi prometió no comprar una casa para sus padres hasta que todos en Libia tuvieran una casa propia.

4. Todas las parejas de recién casados en Libia recibieron 60.000 dinares del gobierno y gracias a eso compraron sus propios apartamentos y formaron sus familias.

5. La educación y el tratamiento médico en Libia eran gratuitos. Antes de Gadafi sólo había un 25% de lectores, un 83% durante su mandato

6. Si los libios querían vivir en una granja, recibían electrodomésticos, semillas y ganado de forma gratuita.

7. Si no podían recibir tratamiento en Libia, el Estado les financiaría más de 2.300 dólares de alojamiento y viajes para recibir tratamiento en el extranjero.

8. Si comprabas un coche, el gobierno financia el 50% del precio.

9. El precio de la gasolina pasó a ser de 0,14 dólares por litro.

10. Libia no tenía deuda externa y las reservas eran de 150 mil millones de dólares (ahora congeladas en todo el mundo)

11. Dado que algunos libios no podían encontrar trabajo después de la escuela, el gobierno les pagará el salario promedio cuando no podían encontrar trabajo.

12. Parte de las ventas de petróleo en Libia estaban directamente vinculadas a las cuentas bancarias de todos los ciudadanos.

13. La madre que daba a luz a un bebé recibía cinco mil dólares.

14. Cuarenta barras de pan costaban quince céntimos de dólar.

https://operationdisclosureofficial.com/2023/09/14/restored-republic-via-a-gcr-as-of-september-14-2023/

Daniel Ortega aprovecha el G-77 para advertir a EE UU y a la UE que "no se metan con mi país"


LA HABANA.- "Imperio" y "bloqueo" fueron dos de las palabras más escuchadas este viernes en la apertura de la Cumbre del G-77, que tiene como sede La Habana. Dos palabras que se reiteraron especialmente en el discurso del presidente nicaragüense, Daniel Ortega, que en la capital cubana fue más que claro: "No se metan con mi país, no insistan en el tema de las violaciones a los derechos humanos".

"Nosotros no podemos andar buscando la paja en el ojo del vecino, porque todos tenemos problemas, todos tenemos dificultades en nuestros países. Nosotros por principio no nos metemos en las situaciones que se presentan en naciones hermanas", declaró Ortega durante un discurso de tono lento y monocorde en el palacio de Convenciones de La Habana, aunque con mucho fondo político.

"Se cumplen hoy 202 años de la independencia de América Central y no habían pasado ni ocho años cuando los imperialistas yanquis estaban invadiendo Nicaragua", recordó el presidente nicaragüense, jefe de una de las tres dictaduras de América Latina, junto con las de Cuba y Venezuela.

"Somos tres países que somos blanco de los gobernantes norteamericanos que se han venido sucediendo y de los gobiernos de la Unión Europea: Cuba, Venezuela y Nicaragua. Incluso llegan a discutir que si para tal reunión va a poder ingresar o no el presidente Nicolás Maduro".

Ortega insistió en que no se metan en sus asuntos y advirtió a Washington y a Bruselas: "Reaccionamos solamente cuando sean actitudes que las hemos conocido solamente de los gobernantes norteamericanos y de la Comunidad Europea".

"Déjennos en paz, hay que decirle a las potencias que nos dejen en paz y ya van a ver cómo vamos a ir haciendo realidad lo que estamos anunciando (...). El modelo socialista es infinitamente justo con su pueblo y con los pueblos del mundo. El presidente de los Estados Unidos ha aprobado un año más de bloqueo", destacó Ortega.

"El comandante Fidel Castro está aquí entre nosotros. El camino es resistir y resistir en medio de las condiciones duras del daño que se sufre desde el punto de vista de los derechos humanos de todo un pueblo. Se le está haciendo daño al pueblo cubano con este bloqueo criminal".

El G-77 es un grupo integrado por 134 países de Asia, África y América Latina al que últimamente se suma China como país invitado. Al igual que el G-7 o el G-20, el G-77 cuenta con el reconocimiento de las Naciones Unidas, cuyo secretario general, el portugués Antonio Guterres, habló este viernes en la apertura de la Cumbre.

La televisora venezolana Telesur señaló que "La Habana es en estos momentos la capital del sur global" e insistió en que el G-77 es un contrapeso eficaz para el G-7, aunque uno de sus propios analistas dijo que la comparación no tiene sentido.

Miguel Díaz-Canel, presidente de Cuba, le dio la palabra a Mahmoud Abbas, presentándolo como "presidente del Estado de Palestina". 

"El aumento de las desigualdades es una preocupante tendencia que afecta sobre todo a los países del sur. Nuestra economía no puede ser sostenible ni viable bajo una ocupación continua", advirtió Abbas, en una tarde en la que también habló Nicolás Maduro.

"¡Basta ya de persecución contra los pueblos del mundo que quieren su independencia y construir sus propios modelos!", se exaltó Maduro, que pidió al G-77 y a China que levanten la voz con más fuerza: "Hay que hacer mucho más".

En una de sus últimas apariciones en un escenario internacional, el presidente argentino, Alberto Fernández, señaló que "la hegemonía estadounidense ya no es lo que fue" y que Europa está "en una crisis que comenzó con el Brexit y sigue con la invasión de Rusia a Ucrania".

"Y la aparición de dos potencias enormes como China y como India, que cambia diametralmente el comercio internacional. En ese esquema asoman los BRICS, un nuevo grupo de naciones que representan el 44 por ciento de la Humanidad y el 36 por ciento del PBI. Un grupo de naciones que son más que el G-7", advirtió Fernández, que acaba de lograr la incorporación de Argentina al grupo que hasta ahora reunía a Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.

"Hay que cambiar el sistema financiero internacional, ¿cuánto tiempo más vamos a soportar esto? ¿Cuánto tiempo más vamos a soportar que el FMI siga las tasas que impone la Reserva Federal estadounidense? ¿Tanto les preocupa Ucrania y les cobran semejante exacción? 

Estados Unidos ha castigado durante 60 años consecutivos a esta isla. Estamos ante una OMC que ve cómo los alimentos se convierten en commodities y no hace nada, mientras la FAO anuncia una hambruna de 400 millones de personas".

Lagarde reconoce que ahora es el momento más difícil para la economía europea


FRÁNCFORT.- El BCE ha revisado al alza su previsión de inflación, que no alcanzará el ansiado objetivo del 2% en su tasa general hasta el tercer trimestre de 2025, y recortado la de crecimiento. Prevé de hecho un estancamiento económico en la zona euro en el tercer trimestre de este año, lo que no ha impedido que le temblara el pulso para decidir una subida más de tipos, la décima consecutiva. Un aumento que desatará las críticas y las dudas de si el banco central se habrá excedido al endurecer un peldaño más su política monetaria.

Christine Lagarde, presidenta del BCE, ha reconocido hoy en rueda de prensa que la zona euro está en un momento de crecimiento económico “muy lento”. 

La previsión del banco central es de un nulo crecimiento intertrimestral en este tercer trimestre de 2023 y del 0,1% en el cuarto trimestre del año. 

“El momento más difícil es ahora, confiamos en que el crecimiento aumentará en 2024″, ha defendido Lagarde. El año próximo, según las previsiones del BCE, el crecimiento del PIB será del 1%, medio punto menos de lo estimado en junio.

Pese a las alzas de tipos acumuladas, Lagarde también ha advertido que el objetivo de inflación ni siquiera se habrá alcanzado en 2025 para la tasa subyacente, que permanecerá sobre la meta del 2% durante todo ese año.

En definitiva, el BCE sube tipos en un entorno con todos los ingredientes para la estanflación, en una economía sin apenas crecimiento y en la que la inflación se modera solo a duras penas. 

El detalle de las nuevas previsiones elaboradas por el BCE contempla que la inflación aún seguirá en la zona euro en el 5% en el tercer trimestre de este año, para ir moderándose después al 3,3% en el cuarto trimestre del año y al 2,9% en el cuarto trimestre de 2024. Pero no será hasta el tercer trimestre de 2025 cuando el BCE logre cumplir su objetivo de encauzar el IPC al 2%. Para el cuarto trimestre de ese año, los precios ya crecerán a una tasa de solo el 1,9%.

El BCE ha reconocido que el ajuste al alza en sus previsiones sobre la evolución de los precios (en 2024 prevé un IPC del 3,2%, frente al 3% de junio) se debe en gran medida al encarecimiento de la energía. 

Así, ahora maneja una previsión para el barril de petróleo para este año de 82,7 dólares, frente a los 78 dólares que contemplaba en junio. Su previsión para 2024 también sube de 72,6 a 81,8 dólares el barril y la que estima para 2025, desde los 70,4 dólares de junio a los 77,9 de sus proyecciones de septiembre.

Descontando el precio de la energía y los alimentos, la inflación subyacente tampoco dará una tregua rápida. Incluso a pesar de que el BCE sí estime su moderación frente a los pronósticos de junio. 

Ahora contempla para la tasa subyacente una media del 5,1 % en 2023, del 2,9 % en 2024 y del 2,2 % en 2025. Sin embargo, la subyacente no llegará a la meta del 2% en ningún momento de 2025, ni siquiera en el cuarto trimestre de ese año, en que el BCE calcula una tasa del 2,1%.

Lagarde se ha defendido en rueda de prensa de las críticas por el efecto arrollador que las continuas alzas del tipos están causando en la economía, hasta el punto de empujarla al borde de la recesión.

 “No queremos una recesión, sino la estabilidad de precios para los ciudadanos”, ha defendido. Pero las previsiones que maneja el BCE apuntan sin remedio a un estancamiento que roza la recesión, que sí será un hecho en algunas economías de la zona euro.