lunes, 27 de abril de 2020

El ingreso mínimo en Venezuela queda en 4,6 dólares al mes pese a alza de 77,7%

CARACAS.- El ingreso mínimo de Venezuela aumentará un 77,7% desde el 1 de mayo, Día del Trabajador, anunció este lunes el gobierno de Nicolás Maduro, pero apenas equivaldrá a 4,6 dólares mensuales en un país azotado por la hiperinflación y una constante depreciación de la moneda.

El ingreso mínimo, que suma el salario básico y un bono de alimentación obligatorio, pasó de 450.000 a 800.000 bolívares por mes (4,6 dólares al cambio oficial), informó el ministro del Trabajo, Eduardo Piñate, en un comunicado que divulgó en Twitter. "A partir del 1 de mayo entra en vigencia", precisó el funcionario.
El incremento combina un alza del sueldo de 250.000 a 400.000 bolívares (2,3 dólares) y otra del bono que lo complementa -sin impacto en prestaciones sociales y otros beneficios laborales- de 200.000 a 400.000 bolívares (2,3 dólares).
Es el segundo reajuste de 2020, después de tres aumentos decretados por Maduro en 2019 y seis en 2018, sin recuperar con ello el poder adquisitivo de los venezolanos, que sufren la peor crisis en la historia moderna de su país, con una economía que encadena seis años de recesión.
Paradójicamente, tras el último aumento previo en enero pasado, el ingreso equivalía a 6,7 dólares.  En octubre de 2019 se ubicaba en 15.
La situación ha llevado a una dolarización informal, con la población tratando de protegerse con divisas ante la inflación y la pérdida de valor del bolívar. El salario mínimo, por su enorme rezago, ha ido perdiendo peso como referencia real en el sector privado.
El nuevo ingreso mínimo solo alcanza para comprar poco más de un kilo de carne de res.
Maduro culpa del agravamiento de la crisis a una batería de sanciones de Estados Unidos. Sus adversarios atribuyen el descalabro a erróneas medidas económicas y corrupción.
El gobierno anunció la semana pasada la fiscalización de precios en el principal productor de alimentos de Venezuela, Empresas Polar, así como en otras compañías, una medida rechazada por esa compañía y organizaciones empresariales.

El Gobierno de Nicolás Maduro firmó este lunes una lista de precios de 27 productos de consumo básico que no se conocerá hasta el martes, cuando Venezuela volverá oficialmente a regirse por este tipo de controles que en el pasado desataron escasez y ahora regresan en medio de una mayor pobreza.
El vicepresidente del Área Económica, Tareck el Aissami, dijo que el Ejecutivo había acordado "precios justos y solidarios" luego de varias reuniones con productores y distribuidores que terminaron, dijo, "felizmente".
La firma de estos acuerdos, que fue parcialmente transmitida por el canal estatal VTV, no incluyó la difusión de ninguna de las nuevas tarifas ni de los productos que serán objeto de estas regulaciones, aunque los funcionarios del Gobierno han dejado claro que se trata de ítems básicos o de consumo masivo.
"Ese precio acordado debe satisfacer en gran medida a nuestro pueblo y así asegurar la continuación de la producción, de toda la cadena, la reposición continua", señaló El Aissami, quien esta jornada fue designado, además, como nuevo ministro de Petróleo.
El Gobierno -remarcó- vigilará que los precios acordados no "se desfasen de la realidad", para lo cual mantendrá un "diálogo permanente" con los comerciantes y "ante cualquier factor de perturbación (habrá) una respuesta inmediata", advirtió.
El vicepresidente agregó que exonerarán aranceles de importación a algunos sectores productivos.

La Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde) informó, a través de su cuenta en Twitter, de varias fiscalizaciones a establecimientos comerciales en Caracas y en otros cinco estados, en tanto que algunos de estos procedimientos terminaron con el "ajuste de precios de manera inmediata".
La ministra de Comercio, Eneyda Laya, dijo a VTV que estas revisiones se realizaron en conjunto con funcionarios policiales y militares.
"No estamos acaparando, ni confiscado absolutamente nada, estamos trabajando para garantizar que los precios sean reales", dijo la también superintendente de la Sundde.
A su juicio, en la última semana "se desató un ataque especulativo contra el pueblo", en alusión al incremento de los precios de alimentos, que se produjo a la par de una devaluación de 25 % de la moneda local en el mismo período de tiempo.
Laya aseguró que no habrá desabastecimiento de productos, como ya ocurrió severamente hasta 2018, y que no se le pedirá a los comerciantes que trabajen bajo pérdida pues, dijo, "se está velando para favorecer ambas partes".

Con tres bolsas recién cargadas en un supermercado del este de Caracas, Fernando Hernández dijo que las medidas de control de precios anunciadas por Maduro el pasado viernes no han hecho crecer su poder adquisitivo.
Son "los mismos precios del domingo, nada ha bajado de precio", dice el caraqueño de 52 años que en su escueta compra gastó cerca de tres millones de bolívares, unos 17 dólares o el equivalente de unos seis salarios mínimos.
Hernández teme que los nuevos controles de precios, como ocurrió en el pasado, se traduzcan en la proliferación de revendedores, conocidos en el país como "bachaqueros", que habían dejado de ser tan importantes en la comercialización desde la flexibilización de la economía que el Gobierno implementó a finales de 2018.

No hay comentarios:

Publicar un comentario