jueves, 13 de septiembre de 2007

Fidalgo pide cambio de modelo productivo y no augura "nada malo" pese a la "incertidumbre económica"

GRANADA.- El secretario general de CC.OO., José María Fidalgo, afirmó hoy que no augura "nada malo" pese al clima de "incertidumbre económica" que se ha generado en el país, "no sólo porque lo diga acertadamente Solbes", pero sí demandó decisiones al respecto y un cambio de modelo productivo en España.

Fidalgo alertó de la posibilidad de que haya "víctimas" en el caso de que se produzca una desaceleración en los principales sectores económicos de España, como construcción y servicios.

Pese a ello, reconoció que el crecimiento económico y también el del empleo es "muy notable", por lo que restó importancia a la situación, que "no es desesperada", precisó, si bien dejó claro que no es el tiempo de los discursos, sino de tomar decisiones y coordinar a las administraciones para conseguir el mismo objetivo.

En opinión de Fidalgo, el modelo de crecimiento en España tiene "los pies de barro" porque genera una economía "muy desequilibrada" con una balanza exterior negativa y un endeudamiento de las familias "cuantioso". Una economía endeudada es una economía que "vuela bajo", según manifestó el secretario general de CC.OO., para quien si no se toman medidas la situación "no irá a mejor".

Habrá que "retejer la red de contención social", explicó el dirigente sindical, para que en el caso de que se produzca una caída de los principales sectores esta gente "tenga cobertura" y posibilidad de "reinserción laboral lo más rápido posible".

Por otra parte, el secretario general de CC.OO. se refirió también a la siniestralidad laboral, respecto a lo que demandó un mayor control de la legalidad por parte del Gobierno central, algo que, según entiende, sólo depende de la "voluntad política".

En su opinión, el Ministerio de Trabajo tiene una "altísima responsabilidad" en haber permitido la "debilitación de los controles de legalidad en el mercado de trabajo" no sólo en lo relativo a la seguridad laboral, sino también en la contratación.

Por eso, recordó al Ejecutivo que "no está cumpliendo" el incremento de efectivos y medios comprometido en la Inspección de Trabajo "dependa de quien dependa", precisó Fidalgo, que no acepta que se aluda a la transferencia de competencias a las comunidades autónomas.

Además del Gobierno central, el máximo dirigente de CC.OO. responsabilizó a los empresarios de la elevada tasa de siniestralidad laboral puesto que es al que le incumbe "eliminar los riesgos" y precisó que mantenerlos constituye en sí un delito, tal y como recoge la normativa de prevención.

Pese a ello, insistió en que la "responsabilidad primera" es de la Administración, por lo que criticó que "nos vanagloriemos todos" de los muchos acuerdos suscritos en esta legislatura, puesto que no se está cumpliendo con el incremento en la Inspección, lo que mantiene a España a la cabeza en siniestralidad.

En este sentido, según afirmó, el sindicato sólo "no puede cumplir su responsabilidad" porque no hay delegados de prevención en todas partes, ni tampoco son "árbitros", ese papel le corresponde a la Administración.

Así, según consideró, "no hay Gobierno que pueda pregonar su progresismo si al menos no es capaz de establecer controles de legalidad en algo que es lo más progresista, según la historia del movimiento obrero, que es mantener el carácter protector del derecho del trabajo". - (Agencias)

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