MADRID.- El 13% de los trabajadores
asalariados españoles están por debajo del 60% de la mediana de ingresos
del país, por lo se encuentran por debajo del umbral de la pobreza, un
porcentaje que supera la media europea, situada en el 9,5%, y que pone a
España en el tercer país a la cola de la UE en pobreza laboral, solo
superado por Grecia (17%) y Rumanía (24%).
Así lo ha
trasladado el director de la oficina de la Organización Internacional
del Trabajo (OIT), Joaquín Nieto, que ha presentado este lunes el
informe 'Estado del Trabajo Decente del Mundo', donde ha alertado de que
la recuperación social de la crisis en España "está lejos de culminar" y
"queda mucho por avanzar.
"La recuperación social ha empezado pero está lejos de
culminar", ha asegurado Nieto durante la presentación del informe este 7
de octubre, Día Internacional del Trabajo Decente. En su opinión, en
España "todavía queda mucho por avanzar para salir de la crisis en
términos de recuperación social", a pesar de la mejoría en crecimiento
del Producto Interior Bruto (PIB) o en términos macroeconómicos.
"La
recuperación social no ha ido al mismo tiempo que la recuperación
económica", ha añadido, señalando la mejora de la calidad del empleo
como "la asignatura pendiente" del país.
El director
de la oficina de la OIT en España considera que el país tiene una
"oportunidad" ante los "retos" de la transición digital y energética
para "modificar su estructura económica" y "remodelar su modelo
productivo" para "reorientarlo en términos positivos".
"La
necesidad de transición energética implica cambios en el transporte, la
edificación o la agricultura, casi todos los sectores productivos se
van a ver afectados, pero España tiene la oportunidad de hacerlo", ha
afirmado Nieto, que también ha apuntado al sector de los cuidados como
un asunto a afrontar en el futuro próximo.
"El
envejecimiento de la población está ahí, y plantea nuevos retos para
modificar la política de cuidados, que tiene una desigual distribución",
ha apuntado recordado que el 75% de estas labores recaen en mujeres, un
porcentaje que es menor en España, del 66%, pero desproporcionado para
el director nacional de la OIT.
"Esto hay que resolverlo, primero
reconociendo ese trabajo de ciudados no remunerados como trabajo, y
habrá que reducir esos trabajos de ciudados y empezar a ofrecer
servicios de cuidados, porque va a ser una de las mayores fuentes de
empleo en el futuro.
En la presentación del informe,
Joaquín Nieto ha recordado que la reivindicación del trabajo decente
está en la fundación hace un siglo de la OIT, y ahora forma parte de los
Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, aunque
la situación internacional tenga mucho margen de mejora.
Según
los datos incorporados al informe 'Estado del Trabajo Decente en el
Mundo', existen 2.000 millones de personas en el mundo, más de la mitad
de los trabajadores de todo el planeta, con empleos en la economía
informal, lo que les priva de condiciones dignas. "No lo hacen por
decisión propia, sino por la falta de oportunidades en el mercado de
trabajo formal", apunta la OIT.
Muchos de estos
trabajadores son además trabajadores pobres. En todo el mundo, hay 300
millones de personas en situación de pobreza extrema a pesar de tener
algún tipo de empleo. Es decir, no alcanzar a disponer ni dos dólares
diarios para subsistir. Al rango de 'pobreza moderada' se suman otros
800 millones de trabajadores de todo el planeta.
En
cuanto a la población sin empleo, la OIT estima que son casi 200
millones de personas en todo el mundo, una cifra que puede aumentar un
millón cada año según las previsiones de población activa.
"Estas cifras
resultan más alarmantes si tenemos en cuenta que desde el año 2013 la
cobertura de desempleo ha ido retrayéndose en la mayoría de los países",
se lee en el informe. De los casi 200 millones de desempleados a nivel
internacional, 64,8 son jóvenes.
El informe también
presta atención a la desigualdades de género: las mujeres reciben un 20%
menos de ingresos que los hombres por realizar un mismo trabajo,
asegura la OIT. En cuanto a la siniestralidad laboral, cada año mueren
2,7 millones de personas como consecuencia de un accidente de trabajo o
una enfermedad profesional.
"Esto implica que cada menos de cinco
segundos muere un trabajador en algún lugar del mundo a causa de un
accidente o enfermedad profesional", sostiene la OIT.
No hay comentarios:
Publicar un comentario