lunes, 7 de octubre de 2019

El gobierno de Hong Kong se plantea limitar el acceso a internet

HONG-KONG.- El Gobierno de Hong Kong se plantea limitar el acceso a internet, declaró este lunes un miembro del consejo ejecutivo, tres días después de que se prohibiera llevar máscaras en las manifestaciones, una medida que, sin embargo, atizó las protestas.

"Mientras haya medios para reprimir los disturbios, el Gobierno no podrá descartar la posibilidad de prohibir internet", declaró Ip Kwok-him, un miembro del consejo ejecutivo y diputado pro-Pekín.
Internet es una herramienta indispensable para el movimiento prodemocracia, que utiliza foros en línea y mensajería encriptada para organizar sus acciones de protesta.
Con todo, Ip, que es miembro del órgano consultivo de la jefa del Ejecutivo hongkonés, Carrie Lam, subrayó que restringir el acceso a internet podría tener consecuencias nefastas para Hong Kong.
"Creo que una de las condiciones para que se ponga en marcha la prohibición de internet sería que esto no afecte a las empresas de Hong Kong", matizó. 
El anuncio llegó tras tres días seguidos de "flashmobs" (acciones relámpago) y concentraciones no autorizadas en las que participaron decenas de miles de personas por todo el territorio semiautónomo.
Algunos manifestantes radicales vandalizaron oficinas gubernamentales vecinas, así como sucursales de numerosos bancos chinos y estaciones de metro, y buena parte de la red estuvo suspendida durante tres días.
También fueron atacadas las empresas con lazos con China, como las sucursales de los bancos chinos.
El lunes por la noche, las paredes de varias oficinas del Bank of China --una de las mayores entidades bancarias públicas chinas-- cercanas a Kowloon quedaron cubiertas de eslóganes y se destruyó parte de su mobiliario.
También por la noche, varios grupúsculos radicales vandalizaron escaparates de tiendas y dos estaciones de metro, y bloquearon arterias de varios barrios.
La policía recurrió a los gases lacrimógenos en al menos tres lugares.
La movilización se tornó especialmente violenta después de que, el viernes, Carrie Lam decidiera recurrir a una ley de emergencia para prohibir el uso de máscaras en las concentraciones públicas.
El lunes, las dos primeras personas juzgadas por violar la disposición, un estudiante y una mujer de 38 años, comparecieron ante un tribunal de Hong Kong.
Los dos detenidos fueron acusados de manifestación ilegal, hecho por el que pueden ser condenados a tres años de cárcel, y por haber infringido la prohibición de llevar una máscara en una movilización pública, penado con un año de prisión.
Ambos fueron puestos en libertad bajo fianza.
En el exterior del tribunal, los manifestantes coreaban consignas como "portar una máscara no es un crimen" y "la ley es injusta".
Muchos opositores a esta prohibición temen que sea el preludio a la adopción de nuevas medidas de urgencia por parte de las autoridades.
"Es una excusa para introducir otras leyes totalitarias, la próxima será la ley marcial", afirmó un manifestante, Lo, frente al tribunal.
Desde hace cuatro meses, Hong Kong atraviesa su peor crisis política desde la retrocesión a China por parte de Londres, con manifestaciones casi diarias para denunciar una pérdida de libertades y la creciente influencia del gobierno chino en los asuntos de esa región semiautónoma, y también para exigir reformas democráticas.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, instó el lunes a encontrar una "solución humana" y "pacífica" a esta crisis, señalando que el número de manifestantes es "mucho más pequeño ahora".
Los peores enfrentamientos hasta ahora se produjeron el 1 de octubre, cuando la República Popular China festejaba el 70º aniversario de su fundación. Ese día, por primera vez, un policía disparó una bala real contra un estudiante de 18 años, hiriéndolo gravemente.
A lo largo del fin de semana, los manifestantes se concentraron en los barrios del centro de la isla de Hong Kong y, del otro lado de la bahía, en la península de Kowloon, pese a la fuerte lluvia.
El domingo, la policía empleó gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes y se produjeron altercados en varios barrios.
A un taxista le dieron una paliza en el distrito de Sham Shui Po tras haber chocado con dos manifestantes, y un adolescente de 14 años fue herido por un policía vestido de civil durante una marcha.
En China, cundía en cambio la indignación tras un tuit del director general del equipo de baloncesto estadounidense Houston Rockets, Daryl Morey, apoyando a los hongkoneses.
Desde entonces, el tuit ha sido retirado y el lunes, James Harden, jugador estrella de los Houston Rockets, presentó sus disculpas. Pero la cadena pública china CCTV anunció que suspendería la difusión de los partidos de ese equipo de la NBA.

El Metro reabre parcialmente

Hong Kong trataba de recuperar la normalidad el lunes, con el metro funcionando sólo parcialmente y notables daños estructurales después de que decenas de manifestantes fueran arrestados en violentos enfrentamientos durante la noche, lo cual dio lugar a la primera advertencia del ejército chino. 
Decenas de miles de manifestantes marcharon pacíficamente el domingo por el centro de la ciudad del territorio chino, cubriéndose con máscaras en desafío a unas leyes de emergencia propias de la era colonial que amenazan con hasta un año de prisión a quienes oculten sus rostros.
Sin embargo, el cariz de las concentraciones se fue deteriorando y acabaron por dar lugar a una serie de enfrentamientos al caer la noche. La policía disparó gas lacrimógeno y realizó cargas en un intento por dispersar a los manifestantes que lanzaban cócteles mólotov en varios lugares de la ciudad financiera.
Decenas de manifestantes fueron arrestados y trasladados en autobuses bajo las recién instauradas leyes de emergencia que entraron en vigor el viernes por la noche, después de que algunos de los enfrentamientos más violentos en los cuatro meses de protestas en Hong Kong prácticamente cerraran la ciudad el sábado.
La autoridad de Hong Kong dijo en una declaración a primera hora del lunes, día festivo en la ciudad, que “la seguridad pública se ha visto amenazada y el orden público de toda la ciudad está al borde de una situación muy peligrosa”.
El operador ferroviario de Hong Kong, MTR Corp, dijo el lunes que, debido a un “acto de vandalismo grave”, la mayoría de las estaciones de la red fueron cerradas temporalmente. Esto incluía estaciones muy concurridas como Admiralty y Wan Chai, próximas al distrito de bares de la ciudad.
El anuncio de MTR siguió a un cierre sin precedentes el sábado y a una reducción de a mínimos de las operaciones el domingo, que paralizaron gran parte de la ciudad.
Toda la red, que transporta alrededor de 5 millones de pasajeros al día, cerrará a las 6 p.m. (10.00 GMT), más de cuatro horas antes de lo normal, para proceder con las reparaciones, dijo la autoridad.
La mayoría de las tiendas de comestibles que cerraron temprano el domingo habían abierto el lunes por la mañana. Muchos negocios y tiendas han tenido que cerrar en repetidas ocasiones durante los cuatro meses de protestas, con lo que Hong Kong se enfrenta ahora a su primera recesión en una década.
La líder de Hong Kong, Carrie Lam, invocó poderes de emergencia que se utilizaron por última vez hace más de 50 años con la esperanza de sofocar las protestas, pero la medida ha producido el efecto contrario, ya que han desencadenado tres noches de violencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario