BEIRUT.- La violencia que ha dejado en Beirut cientos de personas heridas, tanto manifestantes como efectivos de las fuerzas de seguridad,
ha empañado la hasta ahora pacífica revuelta libanesa, en los
acontecimientos más violentos desde el comienzo de las protestas el
pasado 17 de octubre.
Una fuente de la Cruz Roja libanesa informó que unos 170 heridos tuvieron que ser hospitalizados y más de 140 atendidos por los equipos de socorro
en el centro de la capital, donde el sábado por la noche y hasta la
madrugada del domingo se registraron enfrentamientos entre los
antidisturbios y los manifestantes.
Las Fuerzas de Seguridad Interna informaron este domingo de que 142
de sus miembros sufrieron heridas, incluidos siete oficiales y tres
casos graves que presentan fracturas.
Según la Agencia Nacional de Noticias libanesa (ANN), este sábado los
manifestantes lanzaron piedras, bengalas y cócteles molotov contra los
uniformados, que a su vez emplearon gases lacrimógenos, pelotas de goma y
cañones de agua para dispersarlos y evitar que se aproximaran a los
accesos del Parlamento.
La ministra de Interior en funciones, Raya al Hasan, afirmó este
domingo en Twitter que mantiene el contacto con el comandante del
Ejército Joseph Aoun, quien elogió el trabajo de los cuerpos militares y
de seguridad en esta “delicada etapa” y aseguró que “continúa la
coordinación para mantener el orden” en las calles del Líbano.
Anoche efectivos del Ejército consiguieron poner fin a los
enfrentamientos entre manifestantes y policías, como ya ha ocurrido
anteriormente en las protestas libanesas cuando los militares han tenido
que intervenir para aplacar los ánimos y controlar la situación.
“Hemos pedido una escalada y el fin del movimiento pacífico de hace más de un mes, ahora es el momento perfecto“, aseguró Ali Samadi, un estudiante universitario de 25 años.
Y agregó: “hemos estado en las calles durante más de 90 días y al Gobierno no le importa lo que digamos o hagamos, así que si no escuchan nuestra voz, sentirán nuestra rabia”.
El joven también auguró una campaña de arrestos y más violencia en
las calles si no se forma un nuevo gabinete, misión encargada a Hasan
Diab a finales de diciembre tras la dimisión de Saad Hariri por la
presión de las manifestaciones populares.
Otro manifestante y también estudiante de 23 años, Yad Haidar,
responsabilizó de la violencia a la ministra de Interior y al general
Emad Othman, director general de las Fuerzas de Seguridad Interna,
porque “fueron los que dieron las órdenes” de actuar con la fuerza.
“Hemos expresado nuestras demandas claramente pero ellos nos han
ignorado, teníamos que mandar un mensaje”, afirmó en referencia de las
clase política contra la que han estado protestando por 95 días y a la
que culpan de la crisis económica que sufre el país.
“Lo que hacemos es levantarnos contra los bancos que nos han robado
durante años y aquellos que están en el poder y no se ven afectados” por
la crisis”, agregó el joven.
Nueva jornada de disturbios
Este domingo, al menos 70 personas han resultado heridas en medio de una nueva jornada de disturbios
entre manifestantes y policías en las inmediaciones de la sede del
Parlamento libanés, en Beirut, según ha informado la Cruz Roja Libanesa.
Al menos 30 personas han tenido que ser trasladadas a un centro
hospitalario, mientras para otras 40 ha bastado con la atención recibida
por parte del personal de Cruz Roja. La organización ha subrayado que
ha desplegado un total de doce equipos en respuesta a estos incidentes y
ha anunciado que enviará a más personal.
Los enfrentamientos han comenzado cuando los manifestantes han
intentado acceder al Parlamento y la Policía ha cargado y ha empleado
cañones de agua y pelotas de goma. Los manifestantes por su parte han
lanzado piedras y artefactos pirotécnicos contra los agentes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario