GINEBRA.- El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha
instado este miércoles al Gobierno de Grecia a mejorar las condiciones
de vida en los centros de refugiados y ha dicho que Europa debe hacer más para proteger a los menores no acompañados.
“No podemos aceptar que ellos (los refugiados) vivan en
condiciones miserables. Las condiciones son un desafío y necesitan
mejoras urgentes“, ha subrayado el máximoresponsable de ACNUR Filippo Grandi, después de visitar los centros en la isla de Lesbos.
Grandi ha indicado que Grecia ha sido la nación costera más afectada de la Unión Europea por la crisis de migrantes y ha pedido una solución colectiva europea paraproteger a los menores no acompañados.
“Estoy muy preocupado por los niños, especialmente por
aquellos que viajan solos, ellos son los más expuestos a la violencia y
la explotación”, ha apostillado elcomisionado, quien tiene
previsto reunirse con el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis,
durante el día.
El nuevo Gobierno conservador de Grecia ha adoptado una postura más
dura que su predecesor izquierdista sobre la crisis migratoria,
asegurando que “cerrará la puerta” las personas que carezcan de los
derechos de asilo pertinentes.
Bajo este supuesto, Grecia anunció la
semana pasada el despliegue de 1.200 guardias más con el fin de reforzar las fronteras del país.
De este modo, ha anunciado planes para cerrar los campamentos de
refugiados que estén superpoblados y reemplazarlos por otros de carácter
más restrictivo que seutilizarán como salas de espera para deportar a
los solicitantes de asilo que hayan sido rechazados y como centro de
recepción y procesamiento para los recién llegados.
Las llegadas de migrantes de la vecina Turquía han aumentado nuevamente en los últimos meses, con más de 37.000 personas abarrotando las instalaciones en las islas del este del mar Egeo que están operando por encima de su capacidad.
En Lesbos, el campamento de Moria es uno de los centros que se cerrará. Creado para acoger unas 3.000 personas, actualmente alberga a más de 15.000 en condiciones que las agencias humanitarias han calificado como “pésimas”.
El nuevo Ejecutivo pretende trasladar a cerca de 20.000 personas a la península helena antes de final de año
y espera que las nuevas instalaciones estén listas en julio de 2020.
Las autoridades del Estado creen que 80.000 migrantes y refugiados se
encuentran actualmente en Grecia.
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