BRUSELAS.- El pleno del Parlamento Europeo ha afeado
este jueves al Gobierno británico las trabas para avanzar en las
negociaciones con Bruselas que permitan cerrar a tiempo un acuerdo sobre
la relación futura entre la UE y Reino Unido, un pacto que los
eurodiputados han avisado de que no ratificarán, si deja fuera la
cuestión pesquera o no da garantías suficientes sobre la igualdad de
condiciones en materia regulatoria y de competencia.
En una resolución adoptada con una amplia mayoría (572 votos
favorables, 34 en contra y 91 abstenciones), los eurodiputados confirman
el apoyo sin fisuras de la Cámara al negociador europeo, Michel
Barnier, y avisan de que la UE "no aceptará un acuerdo a cualquier
precio" y que rechazará todo pacto comercial que incluya "garantías
sólidas" en lo que al acceso a aguas de la flota comunitaria se refiere y
a la igualdad de condiciones.
Por ello, los eurodiputados abogan como Bruselas por un acuerdo
global y rechazan pactos separados, tal y como aspira Londres, al tiempo
que lamentan que Reino Unido intente alejarse durante las
conversaciones en curso de la senda marcada por la declaración política
que pactaron ambas partes en el momento del Brexit.
El texto de la Eurocámara recuerda también que una de las líneas
rojas para la Unión Europea fijadas desde el inicio de la negociación
del divorcio es que España tendrá derecho a veto con respecto a la
aplicación del acuerdo en Gibraltar, que no estará cubierto por el
pacto, si no es con el visto bueno "previo" de España.
También hacen hincapié los eurodiputados en la importancia de
aplicar las disposiciones del Protocolo sobre Gibraltar en lo relativo a
los trabajadores transfronterizos, la fiscalidad, el medio ambiente y
la pesca; y piden a los gobiernos español y británico que velen por que
se establezca la cooperación necesaria para tratar estas cuestiones.
El periodo de transición que mantiene el 'statu quo' mientras se
negocia esta nueva relación expirará el próximo 31 de diciembre, por lo
que es urgente alcanzar un acuerdo --a más tardar en octubre, según las
cuentas de Bruselas--, para que pueda ser ratificado y entrar en vigor a
tiempo para evitar una ruptura definitiva caótica.
Además, la resolución de la Eurocámara advierte de que todo
acuerdo de futuro estará también condicionado a que se haya aplicado de
manera "estricta" el acuerdo de retirada pactado entre Londres y
Bruselas, incluido el protocolo sobre la frontera en el Úlster.
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