PEKÍN.- El
presidente chino, Xi Jinping, insistió en la unidad nacional y dijo que
las relaciones entre Hong Kong y China continental mejorarían, incluso
si manifestantes prodemocráticos planificaron varias manifestaciones que
coincidirán con el aniversario del gobierno comunista.
“Hong
Kong y Macao podrán desarrollarse junto con el interior de la patria”,
dijo Xi en un breve discurso en un banquete en Pekín antes de las
festividades del martes que celebran 70 años desde la fundación de la
República Popular de China. “Mañana será aún mejor”.
Xi
dijo que debe mantenerse el principio de “un país, dos sistemas” bajo
el cual Hong Kong ha sido gobernado desde su regreso del dominio
británico en 1997. Los comentarios del presidente, los más extensos
sobre Hong Kong desde que comenzaron los disturbios en junio, se
produjeron cuando la ciudad se preparaba para otra ola de protestas
durante el festivo del Día Nacional.
El
domingo, manifestantes incendiaron la entrada de una estación de metro y
arrojaron bombas de gasolina a la policía cuando decenas de miles
intentaban marchar hacia las oficinas del gobierno central de Hong Kong
antes del festivo. Fueron recibidos por oficiales que desplegaron rondas
de gas lacrimógeno y un cañón de agua para dispersarlos por segundo día
consecutivo.
Los
disturbios interrumpieron algunos servicios en el centro de la ciudad
de Hong Kong, y el operador ferroviario MTR Corp. cerró temporalmente
algunas estaciones del centro. La policía de Hong Kong dijo que había
arrestado a 146 personas y disparado 328 rondas de gas lacrimógeno el
domingo. Además, 48 personas fueron enviadas al hospital, dijeron las
autoridades.
La
violencia ha amenazado con estropear las celebraciones del 1 de octubre
de Xi en Pekín, que estarán marcadas por un “espectáculo masivo” en el
que participarán al menos 100.000 personas. Las festividades incluirán
un desfile militar y una gala nocturna en la plaza de Tiananmén.
Xi
y otros líderes del partido visitaron los restos del antiguo líder Mao
Zedong y asistieron a una ceremonia para rendir homenaje a los héroes
nacionales fallecidos en la plaza el lunes en la mañana, según la
agencia oficial de noticias Xinhua.
Carrie
Lam, la jefa ejecutiva, encabezará una delegación con destino a Pekín
para participar en las celebraciones, lo que significa que estará fuera
de la ciudad durante las festividades. Regresará a Hong Kong por la
tarde a través de la ciudad fronteriza de Shenzhen, y el segundo
funcionario de la ciudad, Matthew Cheung, será líder interino en su
ausencia.
El
gobierno de Hong Kong canceló los fuegos artificiales anuales del Día
Nacional de la ciudad, citando preocupaciones de seguridad, y prohibió
un mitin planeado por el principal organizador prodemocrático, el Frente
Civil de Derechos Humanos. La apelación del grupo fue negada por las
autoridades el lunes, dijo su segundo coordinador Jimmy Sham.
Las
manifestaciones han sacudido el centro financiero asiático desde
principios de junio, desencadenadas por la legislación propuesta que
permite extradiciones a China y luego se han transformado en un impulso
más amplio contra el control de Pekín.
Lam,
que había intentado aprobar el proyecto de ley antes de que estallaran
las protestas, asumió la responsabilidad de “todo el descontento”
durante su primer evento de diálogo comunitario la semana pasada, un
intento por calmar a los manifestantes antes del 1 de octubre.
Las
manifestaciones del martes se han planeado en seis distritos donde ha
habido algunas de las protestas más violentas de los últimos meses, y la
mayoría comenzará en la tarde.
El
activista y organizador de protestas Ventus Lau fue arrestado el lunes
por la mañana por presuntos delitos, incluidos daños criminales y
allanamiento en la cámara del Consejo Legislativo de la ciudad, dijo un
amigo al grupo de WhatsApp de medios de comunicación de Lau. El actor
local Gregory Wong también fue arrestado por cargos similares, escribió
el activista Nathan Law en su página de Facebook.
En
un momento durante los enfrentamientos fuera de una estación de metro
en el área de Wan Chai el domingo, un oficial disparó un tiro de
advertencia al aire.
“Algunos
policías fueron rodeados y atacados por un gran grupo de manifestantes
violentos”, dijo la policía de Hong Kong. “Sus vidas estaban bajo seria
amenaza y un oficial disparó un tiro de advertencia al aire para
proteger su propia seguridad”.
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