LONDRES.- Los minoristas británicos registraron la mayor caída anual de precios desde mayo de este mes, lo que se suma a las señales de presión sobre el sector, ya que las tiendas no esenciales tuvieron que cerrar al público a partir del 5 de enero como parte de las renovadas medidas de cierre de COVID.
El British Retail Consortium, un organismo comercial, dijo que sus miembros vieron caer los precios promedio en un 2,2% en enero en comparación con el año anterior, la mayor caída desde las profundidades del primer bloqueo británico en mayo.
Los precios de los alimentos aumentaron un 0,2%, el menor aumento desde enero de 2017, y los precios de los productos no alimentarios cayeron un 3,6%.
"Las ventas posteriores a Navidad y el cierre nacional hicieron bajar los precios de los productos no alimentarios, especialmente para la ropa y los artículos de bricolaje", dijo la directora ejecutiva de BRC, Helen Dickinson.
La medida oficial británica de la inflación de los precios al consumidor, que cubre una gama más amplia de bienes y servicios, mostró aumentos anuales de los precios del 0,6% en diciembre.
Dickinson dijo que además de hacer frente a una demanda de los consumidores más moderada, los minoristas se veían presionados por costos más altos que podrían resultar incapaces de absorber.
"La burocracia relacionada con el Brexit, el aumento de los costos de envío global y los precios de los productos alimenticios, así como el peso de los cierres forzosos y las restricciones para muchas empresas minoristas, significa que las presiones sobre los precios se están acumulando", dijo.
Las nuevas medidas de bloqueo para combatir un aumento en los casos y muertes de COVID-19 se han sumado a un ajuste normal del cinturón después de Navidad por parte de los consumidores británicos.
Los datos experimentales de la semana pasada de la Oficina de Estadísticas Nacionales, que no están ajustados estacionalmente, mostraron una caída del 35% en el gasto del consumidor a principios de enero, y el martes la Confederación de la Industria Británica informó su número minorista más débil desde mayo.
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