SEÚL.- Corea del Sur prolongó su programa de distanciamiento social durante
otros 16 días el domingo, pero ofreció cierta flexibilidad a las
iglesias y a los encuentros deportivos, al registrar solo ocho nuevas
infecciones de coronavirus, el nivel más bajo en dos meses.
El relajamiento de las medidas significa que las instalaciones de
alto riesgo como las iglesias ya no tendrán que cerrar, mientras que los
partidos deportivos como el fútbol pueden reanudarse sin público.
“Es
más seguro mantener el distanciamiento social intensivo, pero no es
fácil, siendo realistas. Necesitamos encontrar un punto medio”, dijo el
primer ministro Chung Sye-kyun en una reunión televisada de
representantes del Gobierno.
“Si podemos mantener una gestión
estable al nivel actual, pasaremos a un ‘distanciamiento social
rutinario’ a partir del 6 de mayo”, dijo Chung.
Las
autoridades sanitarias han dicho que esto permitiría una reapertura de
la economía, manteniendo al mismo tiempo las directivas sobre la
desinfección y la prevención de la propagación del virus en la vida
cotidiana de las personas.
Se trata de la primera vez desde el 18
de febrero en que Corea del Sur ha registrado un aumento diario de un
solo dígito en las nuevas infecciones. La cifra eleva el total de casos a
10.661.
De los nuevos casos, cinco fueron importados del
extranjero, según el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de
Corea (KCDC). El número de muertes se elevó a 234.
Corea del Sur
ha logrado en gran medida controlar el brote y recientemente ha estado
comunicando unas cifras diarias de nuevos casos en torno a la veintena.
Las
autoridades sanitarias calificaron la tendencia de buena noticia, pero
lanzaron una llamada a la cautela sobre pronósticos demasiado
optimistas.
“Estamos continuamente en alerta para asegurarnos de
que no nos hemos perdido ninguna nueva infección, o por si la epidemia
se propaga por pacientes asintomáticos o levemente infectados”, dijo el
jefe del KCDC, Jeong Eun-kyeong, en una rueda de prensa.
El
presidente Moon Jae-in dijo el domingo que los avances de Corea del Sur
daban esperanzas de que el COVID-19 es “superable” en otras partes del
mundo. A principios de este año, Corea del Sur tenía el mayor número de
infecciones de Asia fuera de China. Desde entonces sus cifras han sido
superadas ampliamente por otros países.
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