domingo, 18 de diciembre de 2016

Arabia Saudita y EE.UU. discuten nexos bilaterales y rol en la región

RIAD.- El rey Salman bin Abdulaziz de Arabia Saudita discutió hoy con el secretario norteamericano de Estado, John Kerry, vías de afianzar la relación bilateral y coordinar acciones ante crisis regionales como las de Siria y Yemen. 
 
Salman recibió a Kerry en el palacio Yamamah de Riad, ocasión en la que el monarca expuso la visión de este país árabe respecto a la actual situación en la ciudad siria de Alepo, con especial énfasis en temas de seguridad, militares y humanitarios, según reportaron medios locales.

La agencia oficial SPA reseñó de forma muy escueta el encuentro entre el rey y el jefe de la diplomacia de Estados Unidos al apuntar que 'debatieron los últimos acontecimientos en la región y los esfuerzos que se ejercen por los mismos, además de revisar la cooperación bilateral entre ambos países'.

A su vez, el canal televisivo Al-Arabiya indicó que las dos partes hablaron de cooperación y asociación estratégica, toda vez que el reino wahabita forma parte de la coalición internacional que lidera Washington contra el Estado Islámico en Siria e Iraq.

Sin embargo, la presencia en la audiencia del príncipe heredero Mohammed bin Nayef bin Abdulaziz, viceprimer ministro y ministro del Interior, y del canciller Adel Al-Jubeir, indujo a pensar que se abordó también la coordinación entre ambos países en temas de seguridad de Medio Oriente.

En la que seguramente será su última visita a Arabia Saudita como secretario de Estado, Kerry centró parte de sus pláticas con Salman en el contencioso yemenita y el estancamiento del proceso de paz que él mismo intentó sin éxito relanzar el mes pasado desde Omán.

Según diversas fuentes, Washington, que apoya a Riad en la guerra que lanza contra los rebeldes houthis de Ansar Allah y sus aliados afines al expresidente Alí Abdulah Saleh, intenta al mismo tiempo cierta flexibilidad para sentar a negociar a los beligerantes en el vecino país.

Los sublevados chiitas tomaron Sanaa en septiembre de 2014 y expulsaron de allí al presidente yemenita, Abd Rabbo Mansour Hadi, ahora exiliado aquí, y Arabia Saudita alegó apoyarlo con una coalición de países árabes e islámicos que desde marzo de 2015 intensificó los bombardeos en el empobrecido estado.

La magnitud de los ataques aéreos y terrestres y el elevado número de víctimas civiles generó críticas en la ONU y de países aliados de Riad, incluso Estados Unidos, que detuvo algunas ventas de armas al reino.

El viaje de Kerry coincidió con reportes en círculos periodísticos regionales de que el segundo heredero al trono de Arabia Saudita, príncipe Mohammed bin Salman, quien está considerado el cerebro de las reformas económicas aquí, revisa la estrategia de inversión en Estados Unidos.

Según esas fuentes, el también ministro de Defensa ideó un plan para canalizar ingresos de la venta de acciones de la firma Aramco en los mercados doméstico y exterior, pero se especula que podría detener nuevas inversiones en suelo estadounidense por el cambio de paisaje político allí.

Algunos vinculan la hipotética decisión de reevaluar la estrategia financiera de miles de millones de dólares a la reciente aprobación por el Congreso norteamericano de la Ley de Justicia contra los Promotores del Terrorismo, que afectaría directamente a esta nación del golfo Pérsico.

No hay comentarios:

Publicar un comentario