Las Bolsas europeas bajan pese al plan de ayuda del Banco de Inglaterra

LONDRES.- Las Bolsas europeas cerraron a la baja la sesión de este lunes pese a las subidas registradas horas antes en los mercados asiáticos y al plan anunciado por el Banco de Inglaterra de destinar 60.000 millones de euros para desbloquear el mercado de los préstamos bancarios.

Las Bolsas asiáticas iniciaron la semana con fuertes ganancias, un síntoma de que los inversores esperan que lo peor de la crisis inmobiliaria estadounidense haya acabado.

Pero los temores de los inversores europeos a un agravamiento de la crisis hipotecaria y los nuevos récords históricos marcados por el precio del crudo (que llegó a alcanzar los 117,60 dólares por barril en Nueva York y los 114,86 en Londres a las 12H45 GMT) provocaron las caídas en las Bolsas europeas.

Así, la Bolsa de Londres cayó el 0,06%, Francfurt el 0,83%, París el 1,03% y el índice europeo EuroStoxx 50 cedió el 1,02%.

Esto fue muy diferente a la situación ofrecida pocas horas antes por los mercados asiáticos, que cerraron con fuertes subidas generalizadas: Tokio ganó el 1,63%, Hong Kong el 2,17%, Sidney el 3,1%, Shangai el 0,72%, Seúl el 1,6%, Mombai el 1,57%, y Singapur el 1,48%.

Las plazas europeas tampoco reaccionaron al anuncio del Banco de Inglaterra de inyectar unos 50.000 millones de libras (60.000 millones de euros) al mercado crediticio, la mayor medida adoptada por Gran Bretaña hasta ahora para restaurar la confianza y aliviar los efectos de la crisis de crédito.

El plan del banco central británico consiste en canjear temporalmente bonos del Tesoro por hipotecas bancarias por un valor calculado de 50.000 millones de libras.

Este plan de rescate será puesto a disposición de los bancos británicos y otras instituciones crediticias afectadas por la crisis hipotecaria de Estados Unidos, que desde hace meses reclaman insistentemente medidas para aliviar la falta de liquidez que han sufrido a raíz de la crisis de crédito.

Los analistas coincidieron en que este plan ayudará a los mercados, a pesar de que esto no se confirmara en la primera sesión bursátil de la semana.

Por su parte, el euro siguió apreciándose con respecto a la moneda estadounidense. La moneda europea, tras alcanzar un máximo histórico el pasado jueves al cotizarse a 1,5984 dólares, se cambiaba en las primeras transacciones de la mañana del lunes a 1,5864 dólares, frente a los 1,5814 del viernes en Nueva York.

Los inversores europeos, además, parecen esperar a la publicación esta semana de los resultados de grandes compañías (como Bank of America, Credit Suisse Group, Texas Instruments, Microsoft y AT&T) para confirmar los signos de recuperación.