Brasil cerró su demanda diaria de gas en 18 millones de metros cúbicos el 31 de agosto, el nivel más bajo de los últimos años, inferior inclusive al mínimo establecido en el contrato firmado por ambos países, según el informe.
En julio la reducción de la demanda de gas fue de 11% y se acentuó la tendencia a la baja en agosto. El recorte en promedio fue de 5 millones de metros cúbicos diarios. La producción diaria del energético se situó ese mes por encima de los 40 millones de metros cúbicos.
El año pasado la demanda de Brasil, que es el principal mercado del gas boliviano, se incrementó a 31 millones de metros cúbicos, el tope máximo.
También Argentina, el otro mercado, recortó en agosto su demanda. Comenzó el mes consumiendo 5,35 millones de metros cúbicos y cerró el mes con 2 millones el día 31. En tanto que el consumo local se ubicó entre 6 y 7 millones de metros cúbicos.
El informe estadístico de producción y consumo no menciona las causas del recorte, pero autoridades bolivianas atribuyeron la baja de la demanda de Brasil a la crisis financiera internacional y al régimen de lluvias favorable que ha permitido a ese país suplir las necesidades energéticas con la electricidad producida en centrales hidroeléctricas.
La reducción en los requerimiento diarios llevó al presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Carlos Villegas, a plantear una revisión del contrato con Brasil para fijar otros topes mínimos y máximos para los despachos diarios de tal forma que permitan a Bolivia buscar otros mercados o industrializar el energético.
Villegas dijo antes que una menor demanda obliga a Bolivia a reinyectar el gas en los pozos con lo cual reduce la capacidad de producción de otros combustibles líquidos como gasolina y diesel para el mercado interno.
El gas natural es el principal producto de exportación del país y significó el año pasado el 54% del valor exportado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario