También se han acometido labores desde la institución insular para calibrar el coste de las indemnizaciones que tendría que asumir la empresa si finalmente culminan los planes anunciados en lo referente a esta fábrica, que produce quesos El Caserío.
Así lo expuso la consellera de Economía y Medio Ambiente del Consell, Antonia Allès, durante el transcurso de una visita a las empresas de Baleares que participan en la feria 'Intergrift', donde afirmó que desde el Consell se exige a Kraft Foods que "actúe desde la responsabilidad social que tendría que tener".
Allès recordó que cuando la multinacional se instaló en Menorca "se comprometió" a que daría apoyo a la isla y que "no abandonaría la marca y la isla", por lo que reiteró que desde el Consell se solicita a la firma que tome medidas con responsabilidad social.
Para la titular de Economía del Consell, la crisis económica "es de carácter global y Menorca no huye de esta situación" dado que atraviesa un "momento delicado" desde el anuncio del cierre de la planta de Kraft, por lo que remarcó que la institución trabaja para trazar un modelo económico "diversificado y sostenible".
Por su parte, la consellera de Comercio, Industria y Energía, Francesca Vives, expresó a los medios de comunicación que desde el Govern se observa "con preocupación" la situación de la fábrica de Menorca, si bien dijo que desde distintas Consellerias del Ejecutivo autonómico se están haciendo "todo lo que está en sus manos" para intentar resolver "este desastre".
Preguntada sobre si el Govern estaría dispuesto a ayudar a buscar un comprador que adquiriera la fábrica, tal y como demandan los trabajadores, Vives señaló que desde el Ejecutivo "se intenta hacer lo que haga falta" para hallar soluciones a esta situación.
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