La mayor compañía aérea de Europa de bajo coste aseguró que espera ganar cuota de mercado reduciendo el precio de los billetes, aunque sus acciones llegaron a perder un cuarto de su valor después de que informara de una caída del 85 por ciento de sus ganancias en el primer trimestre.
"Las perspectivas para lo que resta del año fiscal, que dependen completamente de las tarifas y los precios del combustible, siguen siendo pobres", dijo el consejero delegado, Michael O'Leary.
Ryanair dijo que planea responder a la desaceleración de las economías del Reino Unido e Irlanda con un recorte más agresivo de las tarifas respecto de sus competidores, quienes tienen menos efectivo y necesitan transferir los precios más altos de los combustibles a los pasajeros.
La aerolínea dijo que las ganancias ajustadas después de impuestos de los tres meses finalizados en junio fueron de 21 millones de euros, bien por debajo de las proyecciones de 48,8 millones de euros realizada por la correduría Davy.
Las cifras ajustadas excluyeron una amortización del valor de la participación de Ryanair en el rival irlandés Aer Lingus de 93,6 millones de euros, que refleja las fuertes caídas recientes en las acciones de las aerolíneas a nivel mundial.
La compañía dijo que esperaba que los resultados de todo el año fueran estables o mostraran una pérdida de hasta 60 millones de euros, sobre la base de sus actuales coberturas del valor del combustible, los precios del petróleo en el cuarto trimestre en cerca de 130 dólares el barril y una caída promedio de las tarifas del cinco por ciento.
"Esta desaceleración supone enormes oportunidades de crecimiento para compañías fuertes y bien financiadas como Ryanair", aseguró la empresa en un comunicado.
El vicepresidente ejecutivo Michael Cawley añadió que era muy poco probable que Ryanair registrara ganancias este año, a menos que hubiera una caída "precipitada" en los precios del petróleo en el cuarto trimestre de este año financiero.
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