ROMA.- Italia anunció hoy que tomará medidas suplementarias para reducir su
déficit estructural en 0,3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB),
tras las explicaciones exigidas por la Comisión Europea (CE) sobre el
presupuesto de 2015.
El ministro italiano de Economía y Finanzas, Pier Carlo Padoan, envió
una carta de respuesta al vicepresidente de la CE, Jyrki Katainen, con
los detalles de las soluciones que buscará el país para alcanzar un
presupuesto equilibrado.
De acuerdo con el titular, su Gobierno dedicará 4.500 millones de euros a reducir el déficit estructural el año venidero, una cifra que incluye 3.300 millones de euros provenientes del fondo para la disminución de la carga fiscal.
Con ese paso, Roma respondió a las preocupaciones expresadas el viernes pasado por el Ejecutivo comunitario, según el cual Italia había retrasado hasta 2017 el objetivo de equilibrar el presupuesto y de recortar la deuda.
Sin embargo, Padoan advirtió a la CE que quieren evitar un cuarto año de recesión, tras argumentar que el PIB ha caído nueve por ciento respecto al nivel de 2008 y que la economía italiana vive su tercer año de recesión y corre el riesgo de caer en la deflación y el estancamiento.
Por eso, manifestó, un endurecimiento fiscal haría más arriesgada o incluso contraproducente la situación del déficit público.
Según el titular, su país está implementando un programa de reformas estructurales pensado para el crecimiento y que contiene medidas destinadas a hacer más eficaz el gasto público y la reducción de la carga fiscal.
Luego de recibir ese texto, el Ejecutivo del bloque consideró como una respuesta positiva el anuncio de reducir la deuda prevista para 2015.
El portavoz de la CE para Asuntos Monetarios y Económicos, Simon O'Connor, dio la bienvenida a la carta enviada por el Ejecutivo de Mateo Renzi, pero se negó a comunicar cuál será el resultado del análisis que realiza la Comisión sobre el plan presupuestario.
O'Connor indicó que será más adelante, en el mes de noviembre, cuando esa instancia adopte su decisión final sobre el proyecto de Italia.
De acuerdo con el titular, su Gobierno dedicará 4.500 millones de euros a reducir el déficit estructural el año venidero, una cifra que incluye 3.300 millones de euros provenientes del fondo para la disminución de la carga fiscal.
Con ese paso, Roma respondió a las preocupaciones expresadas el viernes pasado por el Ejecutivo comunitario, según el cual Italia había retrasado hasta 2017 el objetivo de equilibrar el presupuesto y de recortar la deuda.
Sin embargo, Padoan advirtió a la CE que quieren evitar un cuarto año de recesión, tras argumentar que el PIB ha caído nueve por ciento respecto al nivel de 2008 y que la economía italiana vive su tercer año de recesión y corre el riesgo de caer en la deflación y el estancamiento.
Por eso, manifestó, un endurecimiento fiscal haría más arriesgada o incluso contraproducente la situación del déficit público.
Según el titular, su país está implementando un programa de reformas estructurales pensado para el crecimiento y que contiene medidas destinadas a hacer más eficaz el gasto público y la reducción de la carga fiscal.
Luego de recibir ese texto, el Ejecutivo del bloque consideró como una respuesta positiva el anuncio de reducir la deuda prevista para 2015.
El portavoz de la CE para Asuntos Monetarios y Económicos, Simon O'Connor, dio la bienvenida a la carta enviada por el Ejecutivo de Mateo Renzi, pero se negó a comunicar cuál será el resultado del análisis que realiza la Comisión sobre el plan presupuestario.
O'Connor indicó que será más adelante, en el mes de noviembre, cuando esa instancia adopte su decisión final sobre el proyecto de Italia.
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