ESTRASBURGO.- La Comisión Europea ha dado el primer paso
para expedientar a España por considerar que acumula desequilibrios
económicos excesivos que podrían agravar la crisis de deuda. Se trata de
la primera vez que se activa el nuevo procedimiento por desequilibrios
excesivos, cuya función es detectar y corregir a tiempo problemas
económicos que amenacen el crecimiento.
España supera los umbrales máximos en 6 de los 10 indicadores
utilizados por el Ejecutivo comunitario para identificar riesgos
económicos con el nuevo. De este modo, se sitúa -junto con Irlanda,
Chipre y Portugal, que también sobrepasan el límite en 6 indicadores-
entre los Estados miembros con mayor número de desequilibrios.
En concreto, en materia de desequilibrios externos y pérdida de
competitividad, España supera el umbral máximo considerado saludable en
tres indicadores: déficit por cuenta corriente (-6,5% de media en los
últimos tres años, frente al umbral del -4%), posición neta de inversión
internacional (-89,5% del PIB, frente al límite del -35%) y pérdida de
cuota de mercado exportador (-11,6% frente al -6%).
En cuanto a los desequilibrios internos, la economía española
registra problemas en materia de deuda privada (220% del PIB, frente a
un límite de 160%), deuda pública (61% frente al 60%) y nivel de paro
(16,5% de la población activa de media en tres años frente a un límite
del 10%).
El Ejecutivo comunitario admite que en España "desde 2008 las
pérdidas de competitividad en materia de precios y costes se han
revertido parcialmente".
"Aunque el ajuste de los desequilibrios está en
marcha, la absorción de las grandes reservas de deuda interna y externa
y la redistribución de los recursos liberados por el sector de la
construcción costará tiempo para restaurar condiciones más
equilibradas", señala el informe.
"La contracción del empleo ligada a la reducción del tamaño del
sector de la construcción se ha visto agravada por el lento ajuste de
los salarios, lo que ha impulsado el creciente paro", apunta.
La Comisión iniciará ahora una investigación en profundidad sobre
los problemas detectados en España. El vicepresidente y responsable de
Asuntos Económicos, Olli Rehn, ha explicado que se centrará en "examinar
las causas estructurales del alto nivel de paro y la difícil situación
tras una prolongada burbuja en la vivienda y el crédito"
El siguiente paso será que el Ejecutivo comunitario proponga
medidas correctivas. Si el Gobierno las desoye se iniciaría el
procedimiento sancionador propiamente dicho, que podría desembocar en
una multa de hasta el 0,1% del PIB (1.000 millones de euros en el caso
de España).
Además de a España, la Comisión ha dado el primer paso para
sancionar a Italia, Chipre y Hungría, que acumulan múltiples
desequilibrios; así como a Francia, Reino Unido y Bélgica
fundamentalmente por pérdida de cuota exportadora; a Dinamarca, Suecia y
Finlandia por la aparición de una burbuja inmobiliaria y también a
Eslovenia y Bulgaria.
Grecia, Portugal e Irlanda se libran de momento porque la UE ya
les ha impuesto un plan de reformas a cambio de los respectivos
rescates. Para el resto de países, el Ejecutivo comunitario considera
que no es necesario realizar exámenes en profundidad. De hecho, Alemania
respeta el límite del indicador de balanza por cuenta corriente, ya que
registra un superávit del 5,9%, frente al 6% máximo que se considera
sano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario