lunes, 7 de noviembre de 2011

Según Venizelos, el Gobierno de unidad demuestra el compromiso con los ajustes

BRUSELAS.- El ministro de finanzas griego, Evangelos Venizelos, ha dicho que el Gobierno de unidad nacional que se ha formado en Grecia demuestra el compromiso del país con la aplicación de los ajustes exigidos por la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI) a cambio del segundo rescate.

   "Tras una semana difícil, ahora tenemos una nueva situación política, un nuevo marco político en Grecia. Tenemos un nuevo Gobierno de unidad nacional y responsabilidad nacional", ha dicho Venizelos en declaraciones a la entrada de la reunión de ministros de Economía de la eurozona.
   "Esta es la prueba de nuestro compromiso y nuestra capacidad nacional de aplicar el programa y reconstruir el país", ha resaltado el ministro griego de Finanzas.
La oposición conservadora griega quiere mantener al equipo económico del gobierno socialista saliente, incluyendo al ministro de Finanzas, Evangelos Venizelos, en la nueva coalición que gobierne el país, según dijo el lunes un miembro del partido, por el bien de la continuidad en un momento de crisis.
El partido Nueva Democracia apoyaría la coalición, que tiene previsto gobernar hasta las elecciones de febrero, pero no quiere jugar un papel directo en ella, según dijo el miembro del partido bajo condición de anonimato.
La formación votaría en favor del presupuesto de austeridad de 2012 y de un nuevo rescate internacional para Atenas, además de apoyar la aplicación de un intercambio de bonos bancarios para reducir la deuda griega.
"Nos hemos comprometido y cumpliremos nuestros compromisos", dijo la fuente. "Los ministerios económicos, como el ministro de Finanzas, Venizelos, y su equipo, deben quedarse por el bien de la continuidad".
Nueva Democracia quiere que la coalición tenga cuantos más tecnócratas mejor, y el partido no propondrá a ninguno de sus miembros para puestos en el gabinete, añadió.
El partido lleva tiempo oponiéndose a las políticas de austeridad contempladas en los multimillonarios planes de rescate internacional para Grecia, afirmando que sofocan el crecimiento económico.
Sin embargo, presionados por la UE y algunos de sus propios diputados, suavizaron esas objeciones para consentir a la coalición.
El líder conservador, Antonis Samaras, llegó a un acuerdo el domingo para formar un Gobierno de coalición con el primer ministro, Georgios Papandreu, que dimitirá en favor de un candidato acordado por ambas partes.
Se ha señalado como favorito para el cargo al ex vicepresidente del BCE Lucas Papademos, que voló a Atenas el lunes, pero fuentes de Nueva Democracia señalaron que el trato aún no está cerrado.
Nueva Democracia votó el año pasado en contra del rescate de 110.000 millones de euros y se opone desde hace tiempo a las políticas contempladas en el plan, como subidas de impuestos, que afirman sofocan el crecimiento económico y han sumido a Grecia más aún en la recesión.
Pero sí han accedido a algunas de las políticas aprobadas por los socialistas, como la privatización y las reformas de liberalización del mercado. "No co-gobernaremos, pero apoyamos por completo al Gobierno de transición", dijo la fuente.
Nueva Democracia no quiere puestos en el nuevo ejecutivo, pero exige que los ministerios clave para las elecciones, acordadas en principio para el 19 de febrero, pasen de estar en manos socialistas y vayan a parar a tecnócratas apartidistas o figuras neutrales.
Esto incluye las carteras de Justicia, Defensa, Interior y Reformas Administrativas, señaló la fuente.
En un comunicado enviado a los miembros del partido en el que se les pide apoyo y se explica la posición de Nueva Democracia molestó a algunos en Atenas, que consideran que le falta compromiso con el acuerdo.
"En este periodo transicional de 100 días apoyamos lo que se ha votado para poder cambiarlo después", indicó la carta. "No aceptaremos nuevas medidas, ése es nuestro límite".
La fuente señaló que el documento explica a los miembros del partido que los conservadores apoyarán la coalición para impedir una suspensión de pagos inmediata y acudir a unas elecciones ordenadas, para poder renegociar partes de los términos del rescate que no funcionan.
"Intentaremos cambiar, de forma benigna, la mezcla de políticas que no está funcionando", indicó la fuente.

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