El viernes el crudo descendió 64 centavos y cerró en 72,04 dólares.
Los precios de los energéticos, al igual que los de otras materias primas, han estado aumentando con rapidez ante las especulaciones de que la economía estadounidense se está recuperando de su recesión más larga desde la Segunda Guerra Mundial. Pero a fines de la semana pasada revirtieron su rumbo al surgir preocupaciones en torno a la durabilidad de dicha recuperación.
Mientras tanto, un dólar en alza también le ha dado a los corredores una razón para sacar su dinero de las materias primas, con frecuencia empleadas como refugio cuando el dólar se debilita.
El billete verde registró un alza el lunes después de que el ministro de Finanzas ruso expresó su apoyo a esta divisa. Un retroceso en los mercados accionarios también azuzó la compra de dólares.
Por otro lado, los precios de la gasolina en Estados Unidos subieron el lunes por 48vo día consecutivo, con los precios en un alza de casi dos tercios desde que comenzó el año incluso en momentos en que la demanda de gasolina sigue débil.
Los precios al por menor subieron 0,6 centavos a 2,669 dólares el galón, de acuerdo con la Asocación Nacional de Automovilistas, la empresa Wright Express y el Servicio de Información sobre Precios del Petróleo.
En otras transacciones en la bolsa mercantil, la gasolina para entrega en julio subió menos de un centavo para ubicarse en 2,053 dólares el galón, y el combustible para calefacción bajó 2,2 centavos hasta finalizar en 1,8156 dólar. El gas natural para julio avanzó 32,5 centavos y cerró en 4,182 dólares por cada 1.000 pies cúbicos.
En Londres, la mezcla Brent del Mar del Norte bajó 1,48 dólar y finalizó en 69,44 dólares el barril en la bolsa ICE Futures.
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