sábado, 12 de julio de 2008

El Senado de EE UU aprueba plan para rescatar créditos de vivienda

WASHINGTON.- El Senado de Estados Unidos aprobó anoche un paquete colosal de ayuda para salvar a cientos de miles de personas de la pérdida de sus viviendas.

El plan por 300.000 millones permitirá a la Administración Federal de la Vivienda ayudar a cerca de 400.000 propietarios para solventar sus hipotecas.

Sin embargo aún tiene que superar la agitación constante en el mercado inmobiliario.

El paquete aprobado en una votación 63-5 refleja el interés de ambos partidos estadounidenses para auxiliar a los propietarios en problemas mientras los asuntos económicos son los más importantes en las prioridades de los electores.

El plan aún enfrenta serias dificultades en tanto que la cámara de representantes planea reformar detalles primordiales del plan y la Casa Blanca amenaza con vetarlo sin hacer más cambios.

La crisis inmobiliaria se ha convertido en un símbolo de la debacle económica que comenzó en Estados Unidos en agosto pasado y se extendió rápidamente en el país y otras partes del mundo.

Mientras que la administración de Bush insistía que la economía se encontraba simplemente saludable, los problemas financieros desplazaron al resto de los asuntos, incluso la poco aceptada guerra en Irak, en la campaña presidencial.

Por su parte John McCain, el virtual candidato republicano para las elecciones del 4 de noviembre, afirmó el jueves que las dos enormes compañías hipotecarias Fannie Mae y Freddie Mac, de capital privado y público, son demasiado importantes como para dejarlas caer.

Las compañías instituidas por el gobierno y administradas por inversionistas poseen o valúan más de 5 billones de dólares en hipotecas, casi la mitad del increíble adeudo hipotecario en Estados Unidos.

El rescate de estas compañías podría hacer que el paquete de 300.000 millones de dólares parezca insignificante en comparación.

Barack Obama, virtual oponente de McCain, es más reservado. El consejero económico Jason Furman, afirmó que los problemas de Fannie Mae y Freddie Mac son un reflejo del resto de las dificultades económicas.

Sin embargo, dijo "Obama cree que debemos mantener el flujo de capital de las hipotecas y proteger a los propietarios de la clausura de sus viviendas".

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