CIUDAD DEL VATICANO.- El secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, expresó sus dudas sobre la versión oficial de Israel respecto al ataque militar que alcanzó la Iglesia de la Sagrada Familia en Gaza el pasado jueves, donde murieron tres personas y diez resultaron heridas, entre ellas el párroco, el padre Gabriel Romanelli.
Parolin exigió una investigación a fondo por parte del gobierno israelí, tras las declaraciones del primer ministro Benjamin Netanyahu, quien calificó el suceso como un accidente provocado por una "munición perdida" en una llamada telefónica con el Papa León XIV.
En una entrevista para el programa TG2 de la radiotelevisión pública italiana RAI, Parolin calificó el ataque como un incidente de "una gravedad absoluta" y advirtió que la situación en Gaza es "realmente insostenible".
Aunque agradeció la llamada telefónica de Netanyahu al Papa, Parolin dejó claro que no aceptará la explicación de Israel hasta que no se realice una investigación más detallada.
En su opinión, lo ocurrido podría ser interpretado como un ataque deliberado contra los cristianos en Gaza, con el fin de eliminar una fuerza moderadora que podría contribuir a la paz en la región.
"Vamos a darles el tiempo necesario para que nos digan exactamente qué sucedió", señaló Parolin. Sin embargo, subrayó que la legitimidad de la versión israelí, según la cual el ataque fue un error, está en duda.
El secretario de Estado del Vaticano también señaló que, si el ataque fuera intencional, podría ser un intento de eliminar cualquier elemento moderador que pudiera contribuir a una tregua y, finalmente, a la paz.
"Hay un deseo de eliminar cualquier elemento que pudiera contribuir a lograr una tregua y luego la paz", agregó.
Parolin insistió en que la investigación debe llevarse a cabo "con toda seriedad" y exigió que Israel dé a conocer los resultados de manera clara y transparente.
En sus palabras: "Después de tantas palabras, por fin dar paso a los hechos", y agregó que espera que las palabras del primer ministro Netanyahu sobre el suceso se cumplan lo antes posible debido a la grave situación en Gaza.
Parolin resaltó la importancia de la comunidad cristiana en Oriente Medio, especialmente en Gaza, donde actúan como fuerza moderadora en un contexto de conflicto constante entre palestinos e israelíes.
Su intervención refleja la preocupación del Vaticano por la seguridad y el bienestar de los cristianos en la región, que históricamente han jugado un papel crucial en las relaciones interreligiosas y en los esfuerzos por alcanzar la paz.
El Vaticano espera que el gobierno de Israel proporcione una respuesta concreta a la comunidad internacional sobre lo sucedido, para evitar que la violencia y el sufrimiento en Gaza se agraven aún más.
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